Nadie recordará el clásico Seahawks-Falcons porque el sistema de repetición de la NFL es tonto

La mejor línea ofensiva de la NFL se enfrentó a una defensiva eternamente feroz en la fortaleza más intimidante del futbol americano, y el resultado fue un conjunto de jugadas impresionantes, mismos que no recordaremos porque no se puede contar con las repeticiones para revisar una interferencia de pase. En lugar de eso, todos los sistemas de redes sociales están enloqueciendo sobre el hecho de que Richard Sherman se salió con la suya interfiriendo con el intento de Julio Jones de atrapar un pase que les haría ganar el juego.

Así que no importa que Julio haya tenido un día espectacular, atrapando siete pases logrando 139 yardas. Olvidemos que los Seahawks aumentaron su marcador cuando el pase que lanzó Matt Ryan se deslizó por sus dedos y cayó en las manos de Earl Thomas:

No, vamos a olvidarnos de todo eso, porque necesitamos debatir sobre la liga y sus oficiales, y ponderar sobre qué tan difícil es oficiar un juego moderno y cómo es que todos los que vimos el juego notamos que fue una interferencia de pase excepto las personas cuyo trabajo es marcar las jugadas en los partidos. La única conclusión razonable es que cualquier jugada que marque un oficial debería ser sujeta a una revisión.

Como lo indica esta publicación en Twitter, “La CFL lo hace y los niños en Canadá siguen seguros”.

Pero en lugar de deleitarnos con la primera mitad tan dominante que tuvieron los Seahawks o destacando la actuación de Matt Ryan en el tercer cuarto, nos quedamos con una gran duda. En lugar de que los Falcons tuvieran un primera y diez en la yarda 35 de los Seahawks cuando restaban 1:32 minutos en el reloj, nos quedamos con ganas de más juego.

En lugar de que todos hablen sobre el mejor juego de futbol americano que sucedió este fin de semana, todos están hablando sobre la liga, sus oficiales y la manera en la que se oficia un partido.

Eso debe ser bueno para los ratings de televisión, ¿no es así?