Cuando mi tía nos recogió en el Aeropuerto de San José a Jade y a mí, nos presentó a su buen amigo Hitch. Nunca nos imaginamos que sería uno de los mejores compañeros de viaje.Nuestra aventura con Hitch comenzó oficialmente cuando nos perdimos en las montañas durante dos horas. Nos comenzó a ganar con sus chistes, canciones y trucos de magia. Cinco horas más tarde, llegamos a una tienda donde Hitch compró su comida gringa favorita con dinero centroamericano. A partir de ese momento, hemos vivido muchas cosas con el querido amigo de mi tía. Ha sido una semana de locura en Costa Rica. Hitch nos ha llevado de playa a playa, vimos un jaguar, y tuvimos una probadita de la vida nocturna costarricense. Es, sin lugar a duda, el mejor compañero de viaje que podríamos desear. ¡Gracias, Hitch!
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Fotos y texto Taji Ameen y Jade Katz.@RedAlurk