Canadá legalizó la marihuana. ¿Ahora qué?

Artículo publicado originalmente por VICE Canadá.

Durante mucho tiempo, en VICE, el cannabis ha sido un aspecto fundamental de nuestro periodismo.

Hemos hecho pipas con diferentes productos de cocina, acabamos con una cadena de productos de marihuana que supuestamente estaba abusando de sus trabajadores, entrevistamos a Justin Trudeau sobre la desigualdad en los arrestos por cannabis, hicimos que uno de los integrantes de la banda "Fucked Up" probara el yoga con marihuana y hemos creado un montón de programas de televisión sobre la marihuana.

Sí, la última oración suena un poco presumida, pero también es para mostrarle al mundo que la marihuana significa cosas distintas para diferentes personas. Para algunos es inofensiva, una diversión ocasional. Para otros es una diversión importante. Para mucha gente, es medicina. Algunas personas argumentarán (incorrectamente) que es una droga que te llevará a una vida de crimen o peor, a una vida que te hará aportar muy poco al capitalismo tardío. Y, finalmente, hay un grupo de personas a las que realmente no les interesa en absoluto.

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Pero sin importar de qué lado estés, ahora la marihuana es legal en Canadá, y es uno de los cambios en las políticas de drogas más profundos que se ha visto en ese país.

Hoy es el Día de la Legalización en Canadá o el 10/17 o Miércoles de Hash y hasta ahora, todo va bien. El cambio más notable que se observa hoy en día es que un grupo de personas (aproximadamente uno de cada cinco canadienses) que consumen cannabis con regularidad tienen una opción aprobada por el gobierno para comprar su marihuana. Pero lo más importante es que los canadienses ya no serán criminalizados innecesariamente por usar un producto relativamente benigno.

La legalización es solo el siguiente capítulo de nuestra cobertura de marihuana. Canadá es el país más grande y más rico que ha legalizado el cannabis recreativo y será observado de cerca por el resto del mundo. Si bien los miles de millones de compañías de cannabis serán un punto importante de cobertura, hay muchas otras historias que deben ser contadas. Los comestibles necesitan ser regulados; las provincias aún están implementando sus planes de distribución. El mercado negro seguirá existiendo; y la amnistía por marihuana podría ser una opción. Y, por supuesto, hay un país llamado Estados Unidos que tiene al mando a una estrella de reality temperamental y comparte unos 9,000 kilómetros de frontera con Canadá, y eso podría representar algunos problemas.

Como saben, la legalización del cannabis no significa que la perjudicial "Guerra contra las drogas" ha terminado. La respuesta a la crisis de opiáceos de los gobiernos federal y provinciales en todo el país muestra que ni siquiera miles de muertes pueden cambiar las opiniones frívolas de muchos políticos y policías, que valoran la "ley y el orden" por encima de la reducción de daños.

Pero si tienes opiniones progresistas sobre las drogas y un interés en la reducción de daños, hay razones para ser optimista. Muchos profesionales médicos y asociaciones están presionando para la despenalización de todas las drogas y la puerta parece estar abriéndose hacia la legalización de los psicodélicos como medicina. Canadá tiene el potencial de ser un líder mundial en estos frentes, especialmente si la legalización del cannabis tiene éxito. (Y aunque, ciertamente, habrá problemas en los próximos años, hay pocas razones para pensar que no tendrá éxito a largo plazo, especialmente si tu definición de éxito es un montón de gente de negocios enriqueciéndose).

Informar sobre todos estos temas es vital no solo para los lectores canadienses, sino también para la comunidad internacional que nos está observando de cerca. Continúa siguiendo la cobertura de VICE para el periodismo de inmersión desde la frontera de la regulación progresiva de las drogas.

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