Paquín Estrada, ileso: crónica de un secuestro… telefónico

Franciso “Paquín” Estrada apareció ileso en León, luego de haber sido víctima de un secuestro virtual, según explicó el propio timonel en una conferencia de prensa organizada la tarde del jueves por el club Bravos de León.

“Me da gusto estar otra vez por acá”, fueron la primeras palabras del mánager multicampeón.

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Fue poco después de las tres de la tarde cuando Alvar Cabeza de Vaca, secretario de seguridad pública de Guanajuato, informó desde su cuenta de Twitter, que Paquín Estrada había sido localizado.

Unos minutos después, la cuenta oficial de los Bravos de León confirmó la liberación de Estrada y publicó la primera foto del timonel luego del secuestro virtual del que fue víctima.

A las 18:00 horas, inició la conferencia de prensa organizada por los Bravos de León, ya con Paquín Estrada portando la gorra del equipo. Ahí, el timonel explicó en qué consistió el secuestro virtual del que fue víctima.

“Yo estaba en el hotel”, asegura Paquín. “Ellos (los secuestradores) llegaron. De ahí me llamaron. Ten cuidado, me dijeron en la llamada. Hay unos señores que traen metralletas. Nosotros venimos a limpiar esto porque pueden suceder muchas cosas. Si tú oyes cualquier sonido de bala, tírate al suelo. Ten cuidado”.

Esa fue la forma en que el timonel explica que los secuestradores virtuales se ganaron su atención. Asegura que nunca vio a ninguno de ellos, pues todo fue por teléfono. Ante el aparente peligro de la balacera que podría darse, los secuestradores le indicaron que saliera del hotel.

“Sal, pero vente por acá al hotel de enfrente. Ahí te vas a hospedar para sacarte de tu cuarto”, explica Estrada. “Fui, pero el hotel estaba cerrado. No había nadie. Me dijeron que me diera la vuelta y me fuera al Holiday Inn”.

Ese momento, en que Paquín abandona el hotel en el que estaba hospedado, es la última vez que se le vio antes de su desaparición. Por teléfono, le ordenaron irse a otro hotel, y fue ahí donde estuvo recluido mediante engaños en el tiempo en que nadie tuvo noticias de él.

“Me tenían en el cuarto del hotel”, continúa Paquín. “Pero todo fue por teléfono. Me daban instrucciones. Me ordenaban que no me acostara, no me durmiera. Me controlaban por medio de la television. Me pedían que les dijera qué estaba viendo”.

Mediante engaños lo tuvieron en el hotel, y al presionarlo a decirles lo que estaba viendo en la televisión, los secuestradores se aseguraban de que no saliera del cuarto, mientras ellos se contactaban con la familia para hacer la extorsión. Paquín asegura que fueron tres noches sin dormir.

El timonel aceptó también que hubo un pago monetario para ser liberado, lo que coincide con las versiones que habían dado en la tarde sus familiares mientras Paquín estaba desaparecido. Una sobrina de Estrada había dicho a la prensa en Sonora que su tio estaba secuestrado, que les habían pedido apagar sus celulares, y que les pedían también una cantidad económica, que al final se pagó.

Las autoridades informaron que Paquín Estrada fue encontrado cerca del hotel en el que había estado hospedado originalmente, después del mediodía, en un estado de crisis nerviosa. Para las 6 de la tarde en que se dio la conferencia de prensa, Paquín Estrada lucía mucho más sereno, y enfocado a su nueva tarea deportiva como mánager de los Bravos de León en la Liga Mexicana de Beisbol.