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El gobierno de Venezuela está cumpliendo su amenaza de poner tras las rejas a los dirigentes políticos que se han rebelado contra el presidente Nicolás Maduro. Ahora, el máximo tribunal del país arremetió contra el alcalde opositor del municipio de Chacao y lo sentenció a 15 meses de prisión. La razón: no cerrar los caminos de la ciudad, donde se han llevado a cabo numerosas protestas antigubernamentales.
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La sentencia fue dada a conocer en la cuenta de Twitter de Tribunal Supremo de Justicia de la República Bolivariana de Venezuela, un órgano que ha sido acusado de estar al servicio del gobierno, en vez de actuar de manera independiente, como establece la Constitución.
El alcalde Ramón Muchacho no acudió a la audiencia, que se extendió por más de nueve horas, ya que se encuentra prófugo desde que inició el juicio en su contra hace unas semanas.
El abogado de 44 años es el cuarto alcalde opositor en ser condenado en los últimos días por la justicia. Carlos García y Gustavo Marcano huyeron del país ante la inminente persecusión; y Alfredo Ramos está preso en los calabozos del servicio de inteligencia en Caracas.
“Todo el peso de la injusticia revolucionaria ha caído sobre mí y sobre Chacao”, dijo Ramón Muchacho en su cuenta de Twitter.
“Se nos condena por hacer nuestro trabajo, por garantizar el legítimo derecho a la protesta pacífica”, agregó. “Mis pensamientos están con millones de venezolanos que sufren y padecen las inclemencias de este régimen, sin acceso a justicia”.
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Otros dirigentes opositores están en el limbo del arresto domicilario: la noche del sábado 5 de agosto, el dirigente Leopoldo López regresó a su casa después de pasar cuatro días encarcelado por supuestamente violar su libertad condicional al llamar a la desobediencia civil. Leopoldo López apenas había salido de una reclusión de tres años y medio en una cárcel militar por presuntamente instigar a la violencia en las protestas contra el presidente Maduro en 2014, cuando los muertos llegaron hasta 43.
Actualmente, Venezuela atraviesa una grave crisis con una inflación de tres dígitos, escasez de medicinas y recesión económica, por la que la oposición culpa al presidente Nicolás Maduro. Desde abril, millones de venezolanos han salido a las calles a protestar y los enfrentamientos han dejado más de 120 muertos.
El presidente asegura que las protestas son parte de un plan internacional para desbancarlo, pero sus adversarios sostienen que en Venezuela se ha instaurado una “dictadura”, consumada tras la instalación de una polémica Asamblea Nacional Constituyente que reescribirá la Carta Magna, que podría darle poderes casi absolutos al mandatario.
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