Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:Quiero empezar puntualizando que dos partidos no son suficientes para medir el nivel competitivo de un equipo, ni menos aún las capacidades de un entrenador. Las locuras que suelen publicar los medios en estos casos, hablando de revolución total y de perfección, me parecen no solo exageradas, sino además potencialmente negativas para el equipo en cuestión.Dicho esto, está claro que el Real Madrid ha mejorado enormemente bajo Zinedine Zidane. Sea porque los jugadores se han liberado y han empezado a jugar con menos ataduras o porque el mítico ex jugador francés está empezando a imponer su credo, lo cierto es que el conjunto madridista completó una primera mitad de fútbol espectacular el pasado fin de semana frente al Sporting de Gijón.El 4-0 fue un buen ejemplo. El tanto llegó tras una larga jugada de elaboración durante la cual el balón pasó prácticamente por los pies de todos los jugadores madridistas; el Sporting apenas si podía oler el cuero, que se movió rápidamente de jugador a jugador… hasta que la defensa asturiana se descompuso, Isco mandó la pelota al espacio a Dani Carvajal y este centró para que Cristiano Ronaldo solo tuviera que empujarla.
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La jugada entera dura más de un minuto que vale la pena disfrutar: es una sinfonía de pases y movimientos que culmina con un merecidísimo gol.No sé si el partido fue un espejismo o no, pero si Zidane logra que su equipo repita sus prestaciones partido tras partido, el Bernabéu tendrá motivos para llenarse cada quince días… y los aficionados, razones para volver a ilusionarse. Mucho.