Tengo que reconocerlo, no soy una persona a la que se le hagan muy simpáticos los gatos, aunque hay ocasiones que la regla se puede romper. Este es uno de esos casos en los que tenemos que hablar bien de ellos, elegir las palabras correctas y comprender que en ocasiones, estos mininos pueden llegar a ser buenos compañeros.Florida on my mind… pic.twitter.com/9lDdSqCNUl
— Chelsea Freeman (@chelseafree5) February 22, 2016
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