Este artículo fue consultado con un especialista de Doctoranytime.
Todas las tardes de la semana en la Universidad donde doy clases, la mitad de mis alumnos constantemente habla sobre los psicodélicos y cómo ayudan a expandir los horizontes de la percepción, a conocer aspectos del subconsciente e incluso a indagar y resolver problemas existenciales o heridas del pasado. Mientras que la otra mitad está en desacuerdo y piensa que las drogas solo alteran tanto la realidad que dejamos de “tener un buen criterio” sobre el tema.
Videos by VICE
Durante la época de los 50 y 60 los psicodélicos comenzaron a tener un gran auge, principalmente el LSD, sustancia que fue sintetizada por Albert Hoffman en 1938. Esto generó que diferentes especialistas en los años 50 comenzaran a usar el LSD en tratamientos psiquiátricos, así como la psilocibina, que es de la familia de los psicodélicos. Mientras esto sucedía en los laboratorios, diferentes bandas de rock contaban sus “increíbles experiencias” con los psicodélicos en sus canciones, entrevistas, etc.
Fue tanto el auge de los psicodélicos que las personas comenzaron a consumirlo para probar los efectos mencionados, cambiando así su forma de ver al mundo. Como todo en exceso es malo, esto tuvo sus consecuencias, generando la guerra contra las drogas en los años 70 impulsada por el gobierno de Richard Nixon.
El peyote, la ayahuasca y los hongos alucinógenos, que han sido usados durante miles de años con fines curativos y recreativos, eran muy comunes. Por lo que tanto ciudadanos como turistas visitaban diferentes lugares en México para poder consumir las sustancias y así “curar sus heridas” o “vivir la experiencia”. En los últimos 10 años se han multiplicado los estudios que mencionan que los psicodélicos son un tratamiento eficaz de trastornos mentales comunes como el síndrome de estrés postraumático, la depresión, la ansiedad e incluso adicciones.
¿Pero qué es la psilocibina?
Una droga psicodélica es un psicotrópico (químico que actúa sobre el sistema nervioso central) que tiene como efecto alterar la cognición y percepción de la mente, activando y desactivando ciertas partes del cerebro. Esto le permite dar lugar a alucinaciones o ilusiones que se describen como percepciones no ordinarias, por lo que también son conocidas como drogas alucinógenas.
Ahora bien, la psilocibina es el principio activo de las setas alucinógenas. Un estudio por la Universidad de Johns Hopkins Medicine ha informado que la administración de dos dosis del fármaco alucinógeno psilocibina en adultos con depresión mayor con una psicoterapia de apoyo, demostró grandes y rápidas reducciones de los síntomas depresivos. A las cuatro semanas de seguimiento, la mitad de las personas que participó en el estudio presentó remisión.
En otro estudio de la Universidad de Johns Hopkins, trataron a fumadores con psilocibina. El 80% de los participantes dejó de fumar y 6 meses más tarde, seguían sin hacerlo.
Efectos de la psilocibina
Muy probablemente, si estás leyendo esto, te den ganas de querer probar algún tipo de psicodélico como la psilocibina, o tal vez ya tenías la idea de hacerlo. Pero es importante que entiendas los efectos de la sustancia y la razón por la que puede ser usada por un especialista en una terapia.
Después de la ingestión la psilocibina es desfosforilada y convertida en psilocina, que produce a continuación el efecto enteógeno, siendo excretada posteriormente por el riñón a través de la orina. La psilocina es un compuesto bastante inestable que no se mantiene activo durante mucho tiempo en los hongos después de cortarlos. También es importante mencionar que la estructura bioquímica es muy similar a la de la serotonina, importante neurotransmisor que participa en la regulación del estado de ánimo, las emociones, el apetito, el flujo vascular y la digestión.
Los efectos de la psilocibina comienzan entre 15 y 50 minutos después de su consumo oral y pueden durar hasta 8 horas. Entre sus efectos se encuentra el cambio de percepción del tiempo, la expansión de la conectividad neuronal, es decir, que ciertas partes del cerebro que normalmente no están conectadas entre sí, intercambian señales con mayor frecuencia, logrando el cambio de la calidad de la percepción. También genera alucinaciones visuales, auditivas, táctiles, etc., y lo que algunas personas viven como “experiencias místicas”. Para entender el último efecto mencionado, pon mucha atención: Un alumno asegura que durante los efectos de la psilocibina logró implicarse emocionalmente con todo lo que escuchaba, tocaba y veía, generando una sensación de creer que todo era más real que lo que ha vivido antes de su experiencia. Cuando una persona percibe esta sensación, se le conoce como “experiencia mística” o rotura de la realidad.
Para terminar, realmente aún no hay resultados concluyentes sobre la efectividad de los psicodélicos como tratamiento para tratar trastornos mentales, pero sus blancos terapéuticos son objeto importante de estudio para la elaboración de nuevos y más efectivos fármacos. No podemos dar una recomendación para usarlos, sin embargo, puedes consultar a un especialista antes de consumir cualquier sustancia para estar seguro o segura y saber cuáles serán sus efectos y sus probables complicaciones.
Este texto fue creado en alianza con doctoranytime, una red de contenidos de corte médico, en ella contamos con la colaboración de José Manuel Torres Zazueta, médico general e investigador del Laboratorio de Filogenia del Sistema Inmune de Piel y Mucosas, de la Facultad de Medicina en la U.N.A.M.