Hace mucho que el futbol dejó de ser cuestión de disputa en la cancha. Cada verano, y ya hasta en invierno, observamos cómo los clubes hacen de sus fortunas herramientas de batalla en el mercado para demostrarle al mundo que pueden más que el otro, “golpes en la mesa”, le llaman. Lo hizo Manchester United con el regreso de Paul Pogba a cambio de una ridícula suma que lleva sobre la espalda mientras persigue el balón cada semana, lo había hecho antes el Real Madrid con Gareth Bale y ahora es el Paris Saint-Germain quien espera vencer al Barcelona terminando con la MSN que tantas alegrías les ha entregado. Quieren a Neymar a cualquier costo.
El ambiente está tenso, las imágenes que circulan en últimos días son la muestra de que la decisión del brasileño no está tomada, como aseguró Gerard Piqué en aquel tuit que se volvió viral bajo el apodo de “Señor presidente”. El equipo parisino le ha dado tiempo para arreglar sus pensamientos, suficiente para despertar las sospechas sobre la violación al Fair Play Financiero impuesto por la FIFA. A pesar de que la UEFA dijo en días pasados que el pago de 222 millones de euros por la cláusula de rescición de contrato no causaría problemas, será La Liga quien busque castigo para el PSG y lo harán a través de denuncias en cualquier instancia posible.
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Javier Tebas, presidente de la competencia, aseguró que no lo hacen a petición del Barcelona: “Lo haremos porque infringe las normas del ‘fair play’ financiero de la UEFA y las normas de competencia de la Unión Europea. Vamos a denunciar en la UEFA y si no hace caso, lo llevaremos a tribunales suizos de la competencia y en Bruselas y no descartamos los propios tribunales de Francia y España”.
“Lo que leo me preocupa y La Liga no puede estar de brazos cruzados. No es un tema del Barça, es un tema del fútbol español, hoy es el Barça, pero mañana puede ser el Real Madrid, el Atleti u otro”, continuó en entrevista para Mundo Deportivo.
Mientras tanto, en Francia aseguran que el Paris-Saint Germain tiene claro el impacto inmediato que Neymar causaría en sus finanzas por su poder mediático y entonces, la solución al conflicto del Fair Play Financiero.