Sorpresa electoral en Argentina: Macri, el ‘perdedor’ que ha ganado una segunda vuelta

Síguenos en Facebook para saber qué pasa en el mundo.

“Un terremoto político”. Esa fue la metáfora que utilizaron los analistas para describir el resultado electoral que definía el sucesor de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, después de ocho años en el poder. Contra todos los pronósticos, la ciudadanía votó ayer por el cambio en la argentina y el peronismo tuvo la peor derrota de toda su historia.

Videos by VICE

En 20 días habrá una nueva elección en la que se enfrentarán el candidato del Gobierno, Daniel Scioli, defensor de una intervención virtuosa del Estado y el líder de la oposición, Mauricio Macri, asociado a las políticas de libre mercado.

Si bien el candidato que impulsaba el partido de Gobierno, Daniel Scioli, consiguió ganar la elección con el 36,38% de los votos, lo hizo por un margen muy inferior al esperado. Su principal rival, Mauricio Macri, el candidato de la alianza opositora Cambiemos, consiguió crecer varios puntos y obtener el segundo puesto con el 34,33%. Él fue el gran ganador de la elección. En tercer puesto y con un nivel de adhesiones nada despreciable de cara a la batalla que se viene, quedó Sergio Massa, con el 21,34%.

Y esa batalla que se viene es la del balotaje. Una instancia que se concretará por primera vez el 22 de noviembre, desde que que fue habilitada en la reforma de la Constitución Nacional en 1994. Ese domingo 22, el gobernador bonaerense, Scioli, y el alcalde de la Ciudad de Buenos Aires, Macri, competirán voto a voto por la presidencia de la argentina hasta 2019.

El ex comediante Jimmy Morales gana la elecciones presidenciales en Guatemala. Leer más aquí.

En Argentina todos miden sus palabras respecto a la elección de ayer. “Había mucha gente que quería un cambio y evidentemente Scioli perdió ese halo de ser parte de una transición hacia una peronismo más moderado. Macri ganó en esta cosa del cambio, de mostrar una cuestión distinta”, aseguró a Vice News, Mariel Fornoni, directora de Management & Fit.

Para ella, desde ahora Scioli basará su campaña en el planteo de “continuidad con cambios” y la construcción de su oponente como el gran candidato de los mercados que querrá terminar con la justa intervención del Estado si llega a la presidencia.

En efecto, la noticia del resultado electoral de ayer impactó hoy en la Bolsa, registrando un aumento del 20″ de las acciones argentinas en el mercado de valores. Macri, sin embargo, se esforzará por fortalecer su discurso del pragmatismo y garantizarle a la población que no irá en contra de las conquistas sociales que logró el kirchnerismo.

Recién un minuto antes de que termine la jornada electoral en Argentina, se conocieron los resultados provisorios de la elección presidencial con dos sorpresas muy importantes.

La primera fue que el candidato del kirchnerismo y favorito en las encuestas, Daniel Scioli, había ganado por apenas un punto. Los sondeos aseguraban que ganaría casi por diez. Fue un triunfo con sabor amargo. Es que pese a haber quedado segundo en los números, el candidato de la alianza opositora Cambiemos, Macri, fue el gran ganador de los comicios de ayer.

Y la segunda novedad fue que el peronismo perdió la provincia de Buenos Aires, donde se libró la madre de todas las batallas. En ese distrito vota el 37% del electorado nacional, casi doce millones de personas. Allí, la candidata María Eugenia Vidal, alineada a Macri, se impuso por cinco puntos sobre el candidato del Frente para la Victoria, Aníbal Fernández.

El triunfo de Vidal fue, tal vez, lo más celebrado de la noche. Después de 28 años consecutivos un candidato no peronista gobernará la provincia más importante del país. 

Esta vez sí: Haití vota en paz tras las violentas elecciones del pasado agosto. Leer más aquí.

Además de haber ganado la gobernación de la provincia de Buenos Aires y la mayoría de sus municipios, la oposición se quedó también con las gobernación de Jujuy. Asimismo, logró quitarle al kirchnerismo la mayoría en la Cámara de Diputados de la Nación. Esto significa que si Scioli logra vencer a Macri el 22 de noviembre, a la hora de gobernar necesitará negociar con las fuerzas opositoras para la sanción de leyes en el Congreso Nacional.

Esta madrugada, mientras se terminaba el recuento provisorio de los votos, todos coincidían en que el resultado electoral de ayer dejó plantado un nuevo escenario político en el que se advirtió un claro repliegue del partido de gobierno. Se vienen cuatro duras semanas de campaña en las que los votos del peronista opositor Sergio Massa serán clave para definir quién es el próximo presidente de la argentina.

Lo que viene será difícil tanto para Macri como para Scioli, pero el candidato oficialista carga con una mochila más pesada. A partir de hoy deberá definir si se desmarca de Cristina Kirchner y se dedica a convencer a los independientes. Uno de los grandes enigmas es saber qué hará el Partido Justicialista. Para Ricardo Rouvier, director de Rouvier y Asociados, “el poder del peronismo se sienta sobre las provincias. El peronismo no va a desaparecer ni entrar en una fase final. Es un desafío nuevo que tiene por delante, se va a reagrupar y va a intentar ganar el balotaje con Scioli”, afirmó a Vice News.

Poco después de las diez de la noche en la ciudad de Buenos Aires, Scioli habló ante una multitud que lo arengaba en el estadio Luna Park y dio un discurso anticipando lo que vendría. “Convoco a los indecisos e independientes para esta agenda del gran futuro del desarrollo argentino”, dijo Scioli y, sin decirlo, inauguró un nuevo período de campaña, la del balotaje.

Candidatos presidenciales argentinos prometen calma tras la convulsa era Kirchner. Leer más aquí.

Una hora después, Macri, festejaba bailando música tropical entre globos celestes y blancos. “Lo que sucedió hoy cambia la política de este país. A los que me votaron sin estar convencidos les voy a demostrar que pueden confiar en mí”, aseguró. La elección de Cambiemos, la alianza que formó Macri con su partido Propuesta Republicana y la Unión Cívica Radical, fue una sorpresa hasta para el mismo Macri.

Más allá de los números, el clima que se vivió en cada centro de campaña fue claro. Las caras largas que escuchaban a Scioli mostraban el descontento con el resultado. Todo lo contrario pasaba en la sede de Cambiemos, donde los militantes desbordaban de alegría y casi no podían creer los números que veían.

“Ahora arranca una campaña nueva. Macri tiene que mostrar capacidad de gobernabilidad porque mucha gente cree que en este país solo puede gobernar el peronismo”, aseguró el analista político, Sergio Berensztein.

Sigue a Gastón Cavanagh en Twitter: @gastoncavanagh