El próximo viernes el presidente de Estados Unidos, Donald Trump se realizará un control médico, con lo que intentará poner fin a las especulaciones sobre su salud mental y física.
Información publicada por el diario Telepraph en su portal, revela que el mandatario será examinado por el mismo médico de su predecesor, Barack Obama, y se hará público un resumen de los resultados.
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La prueba física durará alrededor de dos horas e incluirá análisis de sangre y orina, controles cardíacos e incluso preguntas sobre sus hábitos de sueño y vida sexual, según médicos expertos consultados por el medio de comunicación.
El diario dice que al someterse a su primer control médico formal desde que ingresó a la Casa Blanca, Trump espera poner fin a las acusaciones sobre su estado mental que surgieron esta semana tras la publicación del polémico libro “Fuego y Furia”.
El autor, el periodista Michael Wolff, aseguró que sus “facultades mentales patinaban”.
Este examen aumenta las esperanzas de que algunos misterios que rodean a Trump finalmente puedan ser resueltos. ¿Mide realmente 6 pies (1.82 metros) de alto, como el presidente ha afirmado a pesar de que la evidencia demuestra lo contrario?
¿La dieta, que según sus ex asesores, incluye comer hamburguesas con queso y KFC tuvo algún impacto en el bienestar del hombre más anciano que haya sido elegido presidente de los EE.UU.?
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“Pero el presidente tiene el poder de retener cualquier detalle que desee, al igual que Obama, cuya carta de sanidad limpia apenas tuvo un punto negativo”, dice la nota.
“No será la primera vez que Trump, de 71 años, haya publicado registros médicos. Frente a las llamadas a la transparencia durante la campaña electoral de 2016, el médico personal del candidato hizo una declaración”, agregan.
El examen se llevará a cabo el próximo viernes en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed en las afueras de Washington DC, el hospital militar más grande del país.
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