Foto: Olivier Morin/AFP
Sigue a VICE Sports en Facebook para descubrir qué hay más allá del juego:El frío del Ártico es proporcional a su belleza natural: muy grande. Sus olas heladas son un atractivo enorme para miles de surfistas de todo el mundo, aunque son pocos los que llegan a disfrutar de ellas.En las Islas Lofoten, un archipiélago situado al norte de Noruega, se practica el surf bajo condiciones tan extremas como increíbles.
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El lugar es un paraíso por las razones opuestas a la convención, ya que se encuentra muy cerca del círculo polar ártico. Los surfistas cambian los tiburones por las focas y las orcas; también cambian el sol y la arena por la nieve que cubre la mayor parte de la costa escandinava.El calor (relativo) de la corriente del Golfo es el que permite que en la playa de Unstad el agua no se congele. Sin duda es uno de los paisajes más bellos que ofrece Escandinavia, un paisaje que se fusiona a la perfección con la acción de estos intrépidos surfistas.El viento en estas latitudes es terrible y la temperatura se mantiene a cero grados, mientras que el mar noruego ronda los cinco. Sin duda es la mejor época del año para surfear. Eso sí, lo recomendable es ir bien abrigado: un neopreno con capucha de entre 5 y 7 milímetros de grosor, los botines y los guantes.La inclusión del surf en las islas escandinavas no nada nuevo. Hace ya más de cincuenta años que las islas nórdicas reciben a surfistas de todo el mundo, aunque ha sido en los últimos veinte cuando la práctica de este deporte se ha popularizado.Más surf: Por qué los sucesores de Neymar ya no juegan a fútbol