Siempre habrá una nueva oportunidad: Seattle Seahawks

A final de cuentas, no nos sorprendió que Seattle se haya caído en los playoffs. Por una parte, a la NFL le encantan los partidos con el horario del este. Por otra, al equipo le faltó constancia en gran parte de la temporada, especialmente a la defensiva.

Los Seahawks, en los últimos dos años, han sido un equipo exasperante —increíblemente talentoso, pero igual de disparejo— Russell Wilson nos regaló una racha de seis semanas la temporada pasada que lo colocó como candidato para el MVP. Es solo que emparejó las cosas jugando horriblemente a principios de temporada cuando los Seahawks utilizaron un plan de juego que parecía destinado para una victoria de 17-13, el cual pudo haber resultado si la defensiva hubiera hecho su trabajo.

Como si no fuera suficiente, Seattle desperdició múltiples selecciones en primera ronda para capitalizar su ventana de transferencias a corto plazo. Percy Harvin y Jimmy Graham no tuvieron un impacto real. Harvin hizo lo que está acostumbrado a hacer, es decir, demostró mucho talento y después se quedó sentado en la banca porque estaba cansado. Graham nunca fue integrado al cien a la ofensiva —el coordinador ofensivo Darrel Bevell se negó a verlo como algo más que un ala cerrada—.

Este equipo cuenta con la juventud y las piezas necesarias para detener su caída (incluso cuando solo les demos la posibilidad de que lleguen a la ronda divisional). pieces they need to stop the slide (if you can call making only the divisional round this year that). It's just hard to square that with what might have been.

Calificación de confianza entrenador/quarterback: 9/10

Es difícil mejorar en un territorio sin Belichick/Brady que Pete Carroll y Russell Wilson.

Wilson es único. Tiene el brazo y toque para ser considerado el mejor lanzador profundo del futbol americano moderno. Nadie hace lo que él puede hacer fuera de la bolsa de protección, inclusive cuando a veces abusa. Basta verlo dirigir una ofensiva conservadora, el tipo parece estar encadenado.

En cuanto a Carroll, ha hecho todo lo que un entrenador en jefe de la NFL y NCAA podría hacer para estas instancias. No es perfecto, pero está bastante cerca de serlo.

Decisión clave de temporada baja: ¿Acaso esta línea ofensiva necesita un cambio en su filosofía?

A pesar de que creo que Russell Wilson merece ser culpado por crear sus propias capturas, los Seahawks han tenido problemas a la ofensiva. No son particularmente buenos en la protección de los pases. Suelen seleccionar atletas con pinta de linieros ofensivos, y después intentan moldearlos para dicha posición, siempre con distintos grados de éxito.

Esto les ha provocado quedarse sin el centro Max Unger que se fue a los Saints; el tackle izquierdo Russell Okung es agente libre, al igual que J.R. Sweezy. Ha habido muy poca inversión en este equipo como regla general.

¿Es tiempo de un cambio? Es fácil sentarse y decir que los Seahawks tiene una mala formación. Es fácil aventar nombres de jugadores y mencionar que eso solucionaría sus problemas. Pero el problema real no son los jugadores: es la filosofía. Si los Seahawks creen que pueden continuar desarrollando buenos jugadores por poco dinero, es muy probable que no gasten mucho en su línea ofensiva una vez más.

Agentes libres importantes: LT Russell Okung, DT Brandon Mebane, OLB Bruce Irvin, WR Jermaine Kearse, P Jon Ryan.

En los últimos años Okung ha sido proclive a las lesiones, y no ha jugado al nivel que todos esperaban. Sin embargo, aún posee las cualidades atléticas para jugar de tackle izquierdo, y además tipos como él en el mercado de agencia libre son solicitados. Sería un duro golpe para Seattle reemplazarlo inmediatamente sin una selección en el draft.

Mebane e Irvin son chicos que en 2013 pintaban para ser piezas mucho más importantes a la defensiva de lo que realmente fueron en 2015. Irvin debería buscarse otro equipo donde juega como pass-rusher. El desgarre del ligamento de la corva de Mebane en 2014 lo llevó a una salida en 2015. Aún puede regresar, pero con 31 años es entendible que Seattle lo deje marcharse.

Kearse es un sólido receptor en un mercado donde no abundan muchos como él, y Ryan es un buen despejador. Ninguno de los dos son piezas fundamentales, pero definitivamente se les extrañará.

Situación de tope salarial: $23, 299, 279, lugar 17 en la NFL

Esto no tiene en mente lo que pase con Marshawn Lynch. Una salida directa le ahorraría a los Seahawks 6.5 millones de dólares. Seattle también ha expresado su apoyo a Graham para estas alturas, pero darlo de baja les ahorraría 9 millones.

No hay mucho espacio que pueda producirse de las bajas. Los Seahawks podrían reestructurar algunos contratos para firmar bonos si es que es necesario, pero es más probable que no lo hagan.

Fuera de la línea ofensiva, Seattle podría mejorar en el segundo puesto de esquinero. Cary Williams fue un gran fracaso en 2015. Tampoco deberían pasar por alto a cualquier receptor o tackle medio con la capacidad para cambiar un partido.