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¡Oye, idiota! Tienes que ver el juego entre el Barcelona y el Real Madrid este sábado

Si no intentas entender el concepto "fuera de lugar", no será tan malo.

El Barcelona y el Real Madrid se enfrentan este sábado a la una de la tarde. Son equipos de futbol con los mejores jugadores del mundo. También es el más grande clásico en este deporte, y este partido en particular podría definir al ganador del título de la liga española. ¿Tienes que verlo? En vista de que no soy tú, y por lo tanto no puedo (ni quiero) tomar decisiones por ti, no lo sé. En lugar de eso, tuve una plática con una persona imaginaria. Quizá esto te ayude.

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Por lo geneal paso mis tardes sabatinas haciendo algo que yo descibiría como "no ver futbol". No puedo ser más específico, porque… Me entiendes. ¿Por qué no habría de hacer lo mismo este fin de semana?

Bueno, estoy seguro que lo que sea que hagas te llena de alegría y, probablemente, no es un crimen, pero estamos hablando de dos de los mejores equipos de futbol del mundo; es como ver un partido entre los Yankees y las Medias Rojas, o un duelo entre los Capuleto y los Montesco. Esta rivalidad, este clásico, se remonta a la guerra civil española, y estos dos equipos se han llevado los últimso siete títulos de la liga. El Real Madrid ha cometido algunos errores, y esta temporada sólo le lleva cuatro puntos de ventaja al Barça. Hay tres puntos en juego, y una victoria del Real podría asegurarle el título, pero si pierde, el Barça estaría, con cuatro partidos por jugar, a un error más del Madrid de llegar a la cima. En el futbol español no hay partidos de eliminación. Para ser una liga profesional (¡lo sé!) es bastante extraño que no decidan al campeón de forma completamente aleatoria con una mini temporada después de meses de juego en la temporada regular, pero los europeos son muy raros. En esencia, este juego es la final del campeonato: ¡Trofeos! ¡Personas que ganan! Y, lo mejor de todo, ¡personas que pierden!

De hecho vi un partido de futbol hace poco. Creo que fue la final del Mundial… espera, ¿qué? ¿Eso fue hace dos años? Bueno, no importa, igual nadie metió gol, ¿cierto? ¿O me quedé dormido a la mitad del juego? Eso no me puede volver a pasar. Hablo cuando estoy dormido.

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No te preguntaré de qué hablas porque sería muy grosero de mi parte. Pero este juego no será aburrido. En los últimos tres juegos anotaron 13 goles. Este año, el Real Madrid ha anotado 107 goles en 33 partidos; el Barcelona tiene apenas 96. Más allá de saber apreciar las complejidades del deporte, es muy fácil reconocer que estás viendo algo muy especial cuando ves a Lionel Messi haciendo esto o a Cristiano Ronaldo haciendo esto otro. También es muy probable que alguien en el Barcelona salga lastimado/devorado por este güey. Ah, y si eso no sucede, entonces es muy probable que Jose Mourinho, el director técnico del Real Madrid, le saque un ojo a alguien.

Odio cuando estos güeyes se echan un clavado, y actúan como si les hubieran disparado. Pero en cuanto el árbitro les da la razón, se levantan como si nada. ¿Qué pasó con los valores familiares y con SER UN HOMBRE? Malditos europeos.

Lo sé, lo sé. Los jugadores del Barcelona se echan clavados y fingen estar heridos. A los jugadores del Real Madrid les gusta mostrar que los tacos sirven mejor para perforar la piel y romper los huesos de los jugadores del Barcelona, que para patear el balón y meter un gol. Los jugadores del Real Madrid también se echan clavados y fingen estar lastimados. Perto esto ocurre en casi todos los deportes. Por más que los clavados manchen la reputación de este noble deporte, quizá sea mejor que los aceptemos como algo que pasa, así como la noche y el día, y  los ataques de osos. Fuera de eso, el defensa del Barça, Carlos Puyol, escucha death metal y tiene una melena increíble; ese güey si es un hombre.

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Está bien, digamos que termino viendo el partido. Los comentaristas van a estar hablando en español de España, ¿cierto? ¿O tendrán acento anglosajón? No importa, no voy a entender lo que dicen, ¿verdad? ¿Quién es quién? ¿Qué me importa?

Según el canal en el que lo veas, puede que escuches al comentarista narrando un gol como si se tratara de un "sueño húmedo de proporciones orgásmicas", pero tienes razón. Los acentos son para comunistas y gatos que hablan. En fin, está Messi, el mejor jugador del mundo, y Ronaldo, el güey que sería el mejor jugador del mundo si viviera en cualquier otra época. Ronaldo tiene bonitas piernas, y le gusta enseñarlas. También están Xavi e Iniesta, dos mediocampistas de metro ochenta que se coordinan con el balón mejor de lo que tú te coordinas con tus piernas. Está Mesut Ozil quien es genial, pero que parece una niña de 15 años, pero eso es divertido, así que está bien. Y también están todos los demás, porque una de las razones por la cual estos equipos son tan importantes es porque tienen y se gastan un chingo de dinero. Así que, como es de esperarse, todos los jugadores son ridículamente buenos. ¡Libre mercado! ¡Capitalismo! Todo es increíble, ¿cierto? Quizá hasta te gusten los directores técnicos. Está Pep Guardiola de 41 años, quien se convirtió en el director del Barcelona en 2008, sin experiencia alguna como director, y que básciamente ha ganado todos los trofeos existentes más de una vez. No te gustará como se viste (increíblemente bien), ¿pero a quién le importa la "ropa"? Y también está el antes mencionado Jose Mourinho, (conocido como "El Especial” en Inglaterra) un hombre que ha ganado títulos con todos los equipos que ha dirigido excepto, eh, el Real Madrid.

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Está bien, está bien. Lo haré. De hecho no suena tan mal. Por cierto, ¿qué hay del fuera de lugar? ¿Ya se deshicieron de eso? Tienen que quitar esa pendejada.

Sí… eh… verás… es… entiendo por qué lo dices… carajo. Olvídalo.

@rwohan

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