Hablamos con Wendy Sulca sobre su futuro

El fenómeno empezó por ahí en 2008, cuando dos vídeos de YouTube, "La tetita" y "Cerveza, cerveza", catapultaron el nombre de Wendy Sulca. En una época en que los memes y el fenómeno de lo "viral" todavía era incipiente, la voz aguda de Wendy Sulca logró atravesar toda Latinoamérica sin discográficas ni patrocinadores y llegar también hasta España.

Wendy tenía ocho años cuando grabó los dos vídeos que la convertirían en el ídolo  kitschlatinoamericano que es hoy. Había empezado a cantar a los seis, en parte gracias a la influencia de su padre, un artista de música popular peruana. Tenía 12 cuando se enteró de que esos vídeos eran un fenómeno mundial. No tenía ordenador en su casa, por eso la noticia de su fama le llegó por sus amigas del colegio. Fue en un cibercafé donde se dio cuenta de que millones ya conocían su nombre. Actualmente el vídeo de "La tetita" tiene más de 17 millones de vistas, y el de "Cerveza, cerveza" supera los 14 millones.

Hoy, a diferencia de muchos de los que hacen clic en sus vídeos, Wendy se lo toma muy en serio. Está a punto de lanzar su último álbum, y ha escrito un libro y protagonizado una película. Además ha formado parte de varias campañas en su país y en Latinoamérica por la despenalización del aborto, en contra de la discriminación y a favor de la equidad de género. Su plan, sin embargo, es volver al lugar desde el que empezó: la música folclórica peruana.

VICE: Wendy, ¿alguna vez te has arrepentido de ser famosa?
Wendy Sulca: Yo creo que sí. Sobre todo cuando chiquita, porque yo empecé mi carrera a esos años. Antes de los vídeos de YouTube había hecho un disco que se escuchó mucho en el ámbito folclórico de Perú. En esa época hacía muchas giras en provincias y por eso faltaba mucho al colegio. Normalmente me iba los fines de semana, pero a veces me demoraba más o me iba por una semana entera. Dormía pocas horas, comía a deshoras, tenía que completar las tareas rápido e ir al colegio muy temprano. Era una vida un poco agitada para una niña. Ahora no me afecta tanto.

Y en este punto, ¿estás cansada de hablar de "La tetita"? 
No sé, tal vez sí. Pero creo que la canción es muy tierna. Mi mamá se inspiró en mí cuando la compuso porque creo que yo era una niña inusual (risas). Yo siempre quería tomar la tetita todo el día, como dice la canción, "de día y de noche". (Risas). Hasta los cuatro años, más o menos. Pero la canción tenía el claro objetivo de dar un mensaje sobre la lactancia materna. Porque la leche materna es primordial en la salud de los bebés. Pero bueno, en internet se distorsionó el mensaje, porque entiendo que el nombre de la canción llame la atención. De cualquier manera creo que fue una etapa de mi vida y no me arrepiento de nada.

¿Te sientes estancada en la imagen de "la pequeña Wendy"? ¿Crees que mucha gente se quedó con la imagen de ti en ese vídeo?
Yo creo que hay mucha gente que sigue pensando que todavía sigo niña, que sigo cantando "La tetita", que no he grabado canciones nuevas. No se han actualizado: hay una nueva Wendy que ya tiene 20 años, que está en otra etapa de su vida y en un nuevo género. Hay mucha gente que no está enterada de eso y eso es lo que estoy tratando de hacer. Muchos medios ya lo han hecho también, y han mostrado que Wendy ya creció, ya dejó de ser niña.

Parte de tu camino a la fama incluyó cantar en cantinas a las 3:00 de la mañana cuando solo quedaban borrachos. ¿Fue una experiencia traumática?
No es la experiencia más bonita, pero creo que todo artista que empieza desde muy abajo tiene que vivir cosas duras. Lamentablemente yo lo quise hacer desde muy niña, en parte porque mi papá era músico. Creo que en ese camino de tocar puertas dimos con productores que organizaban los eventos pensando en lo económico y que decidían qué artista iba primero para que la gente bailara y bebiera más. En ese momento no era común ver a una niña cantando folclor, yo tal vez fui la primera. Entonces no era el mejor ambiente. Creo que mis papás tampoco se imaginaron que iba a ser tan difícil. A veces ni nos pagaban y encima yo tenía que esperar hasta la madrugada para cantar, muriéndome de sueño.

Todo eso lo cuentas en tu autobiografía. ¿Había cosas que querías contar y que la fama no dejaba ver? ¿Qué te llevó a escribirlo?
Bueno, la idea surgió de una propuesta de la editorial. Algo se sabía de mi historia a través de entrevistas y por lo que contaba mi mamá. A la editorial, y a otra gente que la conocía, les parecía una historia de perseverancia que valía la pena contar. Por eso decidimos escribir el libro. Y ahí está todo.

¿Y cómo es llegar a la adolescencia cuando eres un icono de la música popular? ¿Te dejó de gustar lo que hacías?
No, no fue así. Obviamente, cuando era adolescente ya no escuchaba solo lo que escuchaban mis padres. Pero empezar a cantar pop no fue enteramente mi decisión. En realidad fueron unos productores argentinos que nos propusieron hacer una versión de Madonna en una gira allá. Estaba muy nerviosa por cantar Like a virgin pero la gente se sorprendió y les gustó. Me empezaron a pedir que lo grabara en estudio, que hiciera un videoclip, que lo subiera a las redes. Y tuvo mucho éxito, ya tiene más de cuatro millones de vistas. Creo que mi paso al pop fue por petición del público. (Risas).

¿En algún momento te arrepentiste o sentiste vergüenza de los primeros momentos de tu carrera?
Mucha gente piensa que dejé eso atrás, que me avergüenzo de mis polleras, o de lo que hacía y del folclor. Yo jamás me avergoncé de hacerlo. Reconozco mi identidad y mis raíces y las valoro mucho. Además, es el género que aprendí de mi papá y de mi mamá. Lo aprecio mucho. Es más, no estoy haciendo pop totalmente, quiero fusionar la música que yo hacía en mis inicios con el pop.

Hace un año participaste en una campaña que apoyaba el aborto en varios países latinoamericanos. ¿Por qué?
A esa campaña, #PoderElegir me invitaron para hacer una canción con muchos otros artistas latinoamericanos. El objetivo de la campaña era promulgar la ley de que la mujer pueda decidir si quiere tener o no al hijo en caso de violación. Me gustó la campaña y su mensaje y acepté. Creo que el tema puede ser difícil y es controvertido en todo el mundo pero me parece que el tema del aborto en caso de violación es muy importante porque es una agresión muy traumática. Ojalá que en mi país y en esos otros países se apruebe la ley.

Hace poco participaste en otra campaña en contra de la discriminación. ¿Eso te ha tocado? ¿Te sientes víctima de discriminación?
Sí. Anteriormente he dicho que no, pero sí me ha pasado. Cuando era niña, iba a un colegio de clase media que mis papás no podían pagar. Entré becada por un concurso que gané. En ese colegio hubo un compañero que me trató supermal y que en una ocasión me dijo que no sabía por qué yo estaba en ese colegio, que yo era una chola y que no pertenecía allí. Eso fue muy duro porque yo era muy tímida y casi no hablaba con nadie.

Luego empezó en las redes sociales. Cuando mis compañeras me dijeron que mis vídeos en YouTube eran populares fui a una cabina de internet y lo comprobé. Fue muy sorprendente y emocionante, mi mamá lloró. Pero luego yo empecé a ver los comentarios y vi gente muy maliciosa, que era racista, que escribían insultos y que me discriminaba. Yo todavía era chiquita, tenía 12 años, y no entendía por qué la gente me trataba así. Yo no les había hecho nada, solo era una niña que hacía lo que le gustaba. Eso fue muy duro para mí. Le dije a mi mamá llorando que ya no quería cantar. Pero ella supo aconsejarme y me dijo que no debía importarme lo que dijeran los demás sino hacer lo que a mí me gustaba. Esos comentarios siguen pero ya no trascienden tanto en mí.

Vi en varias entrevistas que no te gusta contestar si tienes novio o no. ¿Por qué?
Creo que no es un tema relevante sobre mi vida. Yo estoy muy enfocada en mis cosas, en mi carrera, en mis estudios, en mis proyectos personales. No me parece importante hablar sobre mi vida muy íntima y personal.

¿Cuáles son esos proyectos? ¿Qué estás estudiando?
Aparte de canto, estoy estudiando también Administración de Empresas. Quiero prepararme porque quiero crear mi propia empresa. Quisiera tener una marca de ropa del estilo que llevo. Un estilo folk, étnico, juvenil. Y a mucha gente le gusta, mucha gente me ha dicho que le gustan mis polleras y me preguntan cuándo voy a sacar mi línea de ropa.

Por ahora estoy trabajando en lanzar mi disco. Ya se pueden escuchar algunas canciones como "La magia del amor" o "Me voy a enamorar". Pero mi mayor plan es conservar mi identidad y difundirla. Dar a conocer en el mundo la música peruana. Siento que esa es mi misión.