Una extensa investigación llevada a cabo por Indianapolis Star ha descubierto que a lo largo de 20 años, más de 360 gimnastas fueron víctimas de abuso sexual por un entrenador, dueño de gimnasio o algún otro adulto involucrado en sus carreras como gimnastas. Según un experto, esa cifra es muy baja. Las víctimas incluyen a gimnastas amateur y olímpicas. Las cifras son alarmantes, pero tal vez es peor que la institución que regula el deporte en los Estados Unidos, USA Gymnastics, parece poco dispuesta a hacer algo al respecto.La situación descrita por el diario Star parece el escándalo de abuso sexual de la iglesia católica, en el que sacerdotes abusaron de niños durante años o décadas. Muchos de los entrenadores y demás acusados de abuso fueron despedidos y se les permitió encontrar trabajo en otras partes del país, sin que nadie supiera sus antecedentes. Esto es debido a que la USAG trabajó para mantener esto en secreto, pero debido a que no llevan registro de estos crímenes. USAG tiene a más de 125 mil atletas afiliados y 25 mil miembros, entre ellos entrenadores, y no tienen manera de monitorear hacia donde van los entrenadores o la razón por la que alguno fue despedido.Aquí más de las conclusiones de Star:• Dueños de gimnasios tienen conflictos de intereses cuando se trata de reportar un abuso. Cuando son confrontados por los abusos, muchos han despedido a los sospechosos pero no avisaron a las personas que podrían contratarlos. Algunos de los entrenadores peligrosos continuaron trabajando con niños.• Algunos entrenadores fueron despedidos de gimnasio a gimnasio sin que USA Gymnastics les siguiera los pasos o perder su membresía. USAG no tiene idea de cuando un gimnasio despide a un entrenador y no tienen manera de seguirles la pista. Ray Adams fue despedido u obligado a renunciar de seis gimnasios en cuatro estados. Pero algunos entrenadores contrataron a Adams pensando que su récord estaba limpio.En varias ocasiones USAG declaró que no podía monitorear todos los gimnasios, específicamente debido a que son empresas privadas. Supuestamente lo más que podían hacer era ofrecer guías para que los gimnasios las apliquen contra comportamientos inadecuados.Pero hay atletas que no están de acuerdo con que la USAG diga no tener medios para ayudar, y dicen que fueron ignorados y a veces sintieron que estaban siendo interrogados por algo que hicieron sus entrenadores. Específicamente el Director de Operaciones de la organización, Steve Penny, fue atacado por su manera de tratar a las víctimas.En 2009, la gimnasta Charmaine Carnes junto con siete otros presentaron una queja contra su entrenador Doug Boger, y declararon que Penny había tratado el caso como si no fuera nada. "Parecía que él pensaba que estábamos exagerando", dijo de Penny.Las mujeres creyeron que no las estaban tomando en serio. Cuando se estaba llevando a cabo la investigación, USAG nombró a Boger como "Entrenador del Año" y lo mandó con el equipo nacional al campeonato mundial en St. Petersburg, Rusia en 2009.Muchas gimnastas sienten que USAG no las apoyó para poder buscar medallas y reconocimiento internacional como organización. En lugar de volver al deporte en un lugar seguro, USAG estaba en busca de más campeonatos. Lo que no puedes hacer, si como lo dijo Carnes, "estás corriendo a todos tus entrenadores".[IndyStar]
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