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A esta mujer vegana le han denegado la ciudadanía por pesada

La activista por los derechos de los animales Nancy Holten está haciendo campaña contra el uso de cencerros y los suizos se lo han tomado como una afrenta personal.

A una antigua residente de Suiza le han denegado el pasaporte por protagonizar una campaña contra los cencerros. La activista por los derechos de los animales Nancy Holten, nacida en los Países Bajos y residente en Suiza desde los ocho años, ha sido calificada de "bocazas" por el comité de residentes de su pueblo, que ha rechazado su solicitud de ciudadanía dos veces.

Según Holten, el peso de los cencerros que les ponen a las vacas en Suiza les causa dolor y sufrimiento. Según Suiza, las vacas quedan estupendas con los cencerros, sobre todo si están pastando libremente en los bucólicos paisajes alpinos. Además, son un gran atractivo para los turistas.

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Las solicitudes de ciudadanía en Suiza son valoradas parcialmente por un comité de residentes que viven en el mismo distrito que el solicitante. Por tanto, parece que Holten no es muy popular entre los habitantes de Gipf-Oberfrick. A eso hay que añadir las declaraciones de la representante del Partido del Pueblo Suizo Tanja Suter a los medios del país, en las que asegura que Holten molesta a todos los vecinos y no respeta sus tradiciones".

Pero Holten está convencida de que los cencerros no son la única razón. La autodenominada periodista autónoma, escritora, modelo y estudiante de teatro ha llevado a cabo varias campañas en contra de otros pasatiempos populares y muy apreciados en Suiza, como la caza y las carreras de cochinillos. Según informa el sitio web de noticias suizo The Local, a Holten también le irrita el sonido de las campanadas de la iglesia del pueblo. Uno pensaría que lo de esta mujer llega hasta el punto de que incluso se niega a comer bombones Lindt.

Holten, que se expresa en un perfecto alemán, no es la primera persona a la que se deniega la ciudadanía suiza por razones culturales. En 2016, una familia kosovar que llevaba diez años viviendo en la localidad de Bubendorf recibió una negativa a su solicitud porque el comité consideró que vestían chándales con demasiada frecuencia para ir por la ciudad. En 2014, se negó la ciudadanía a un estadounidense que llevaba 43 años viviendo en Suiza. El argumento fue que el hombre no era capaz de enumerar correctamente todos los lagos que había en su distrito.

Pese a que afirma sentirse desolada por la negativa, Holten no piensa renunciar a su campaña contra el uso de cencerros. "Sigo comprometida con las causas que considero importantes, sobre todo si atañen a los animales. Su bienestar es muy importante para mí", explicó. "Si dejara de hacerlo, no estaría siendo sincera conmigo mismo, así que no voy a parar solo porque me hayan denegado el pasaporte suizo".

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Traducción por Mario Abad.