vivir de alquiler
Intenté alquilar un armario de mi casa por 400 euros
El mercado inmobiliario está tan mal que me hizo plantearme: ¿cómo de mal tiene que estar una habitación para espantar a la gente?
La pesadilla inmobiliaria del mes: Un piso con sillones de cemento por 500 € al mes
No se aceptan mascotas y necesitas un contrato indefinido para vivir dentro de estos 25 metros cuadrados horrendos.
La pesadilla inmobiliaria del mes: vive en un parking por 149 000 euros
Los coches no necesitan luz, ni aire, ni cocina ni sitios donde ducharse y ser felices. Tú puede que sí.
La pesadilla inmobiliaria del mes: caga donde cocinas por 590 euros al mes
El piso que parece que ni su propietario quiere alquilar (y con razón).
La pesadilla inmobiliaria del mes: compra una casa de Los Sims por 125.000 euros
Este piso es un auténtico tugurio, pero con un poco de imaginación y la magia de un ordenador, el vendedor pretende hacernos creer que merece la pena.
La pesadilla inmobiliaria del mes: duerme en esta ranura por 675 euros
El piso es normal pero, en fin, tienes que dormir en una jodida ranura en la pared.
La pesadilla inmobiliaria del mes: vive en el peor dúplex de España por 690€ al mes
La obsesión por tener dos plantas empieza a resultar preocupante.
La pesadilla inmobiliaria del mes: cómprate un vertedero de 23 m2
Es imposible vivir en este piso y lograr que no parezca la casa de un auténtico chalado.
La pesadilla inmobiliaria del mes: ¿pero qué mierda es este piso?
850 euros al mes por vivir dentro de esta cosa rara. ¿Es un piso? ¿Una máquina del tiempo? ¿Una sala de ceremonias de una secta?
La pesadilla inmobiliaria del mes: vive en un amasijo de hierros por 970 euros
Vivirás en un altillo y podrás llevar a tus visitas al altillo de invitados. Maravilloso.
Ser joven en Tenerife, la isla a los pies del Teide
La distancia respecto a la Península ha creado una situación singular en las Islas Canarias, hablamos de ello con los jóvenes de Tenerife.
La pesadilla inmobiliaria del mes: 800€ por vivir en una tienda china destrozada
La verdad es que el titular lo tiene todo. Tiene un precio alto, tiene el exotismo y el cutrerío de vivir en un espacio donde había una tienda, y por último, contiene el precioso detalle de que está destrozado.