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Música

Hablamos par cosas con No Regular Play antes de su toque en Billares Londres

Antes de pisar tierra colombiana para presentarse este viernes en Bilares Londres, hablamos un rato con este dúo de Minnesota que se ha encargado de impregnar de jazz su sonido house.

Una oleada suave ha cogido fuerza dentro de la música electrónica y es la del jazz. Sonidos orgánicos, emocionales, que en los lives dejan algo más que la típica experiencia de un set. Si nos metemos a escarbar dentro de esos grupos que han seleccionado el jazz como influencia vamos a encontrar sonidos muy distintivos, y en medio de esos sonidos distintivos se encuentra No Regular Play. Este dúo, formado por Greg Paulus y Nick DeBruyn se conoció hace ocho años en St. Paul, Minnesota, y desde entonces no han querido dejar de hacer música. Sin embargo, ni el house ni el techno eran lo suyo, era el Jazz. Artistas como Herbie Hancock, John Coltrane y Miles Davis eran los ídolos de estos dos, que después de ir a un Festival de música electrónica, ampliaron mucho más la perspectiva de la música que los rodeaba.

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De ahí en adelante, se vino una época de ensayo y error para No Regular Play, que querían su entrada al sello Wolf+Lamb después de haberlos visto en acción durante una fiesta. Finalmente, tras varios intentos musicales que no se ajustaban a lo que realmente este par, No Regular Play empezó a encontrar su sonido de la mano de este sello, y se dieron cuenta de que este no estaba muy distante de sus raíces jazzeras, al punto de involucrar una trompeta que se volvió el sello de la agrupación en sus lives. Así, después de algunos trabajos previos, publicaron en 2012 su álbum Endangered Species, que la gente se gozó y bailó en varias latitudes del mundo. Porque eso es lo que incita el sonido de No Regular Play, un baile fácil, animado, en medio de una fiesta acogedora. Un sonido que invita.

Ya los habíamos tenido este año tocando en el Estéreo Picnic, y no se quedaron con las ganas de volver otra vez. Este viernes los tendremos de nuevo en Billares Londres, y antes de que aterrizaran decidimos preguntarles por el jazz y el hip hop, por su fiesta perfecta y por qué les gusta tanto nuestro país.

¿Cuales son los pasos que se necesitan dar en el gusto musical para pasar de J Dilla y Herbie Hancock al house y el techno?

El house definitivamente ha sido influenciado por el jazz y el hip hop, entonces son caminos cercanos. Lo primero que notamos al hacer la transición al reino del house y el techno es que hay que estar cómodos con grooves más hipnóticos y repetitivos, que son un poco más estáticos. Esto no es algo para nada malo ni que haga a la música menos interesante. Es simplemente una mentalidad diferente.

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De lo que sabemos, una de sus primeras experiencias con la cultura electrónica fue ir al festival Decibel en Seattle. ¿Qué experiencia específica de ese festival fue el punto crucial en su carrera que determinó lo que están haciendo ahora?

Nos influenciaron bastante los artistas de ambient que se presentaron en esa versión del festival como Fennesz y Tim Hecker, pero cuando vimos las presentaciones de artistas que son más para la pista de baile como Apparat o Green Velvet, nos tomó por completo este nuevo sonido que no habíamos experimentado antes.

¿Tim Hecker y Green Velvet? comenzaron con el pie derecho. También nos enteramos por algún medio que fueron a Cuba a estudiar la cultura musical afrocubana. ¿Por qué Cuba?, ¿De qué manera los marcó esta experiencia?

Nuestro profesor de español, que es cubano, había conseguido una visa para llevar estudiantes a un intercambio cultural y educativo. Nos había interesado la música cubana desde hacía mucho tiempo, por su conexión con el jazz en la era del bebop. Este interés nos llevó a descubrir lo maravillosa y rica que es la cultura de la gente cubana. Los viajes a este país realmente han influenciado todos los aspectos de nuestro ritmo, desde la primera vez que fuimos.

Wolf + Lamb no aceptaron sus primeras producciones. Sin embargo, ustedes continuaron trabajando, hasta que finalmente el selló aceptó su trabajo y los guiaron a través de una línea musical definida. ¿Cómo ha sido trabajar con ellos?, ¿qué han aprendido?

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Le enviamos a Zev, de W+L, algunas de nuestras primeras canciones y nos respondió que siguiéramos enviándoles música, que si mejoraba íbamos a conectar. Entonces seguimos trabajando y mandándoles música más influenciada por el jazz jazz y ubicada en las líneas del house. No éramos tan buenos haciendo techno, a pesar de que nos encantaba el sonido. Trabajar con ellos ha sido grandioso. Nos han enseñado lo importante que es la comunidad para el proceso creativo y las presentaciones.

Apenas comenzaron con Wolf+Lamb consiguieron la residencia en el Hotel Marcy. ¿Cómo es el ambiente en las fiestas del Marcy?, ¿cual es la diferencia entre estas fiestas y una fiesta en un club, un festival o incluso tocando con alguna orquesta?

El Hotel Marcy fue un lugar fantástico para vivir y trabajar. Los eventos eran cómodas fiestas de house con nuestros amigos y visitantes de otras ciudades. Eran tranquilas, nunca muy ruidosas, siempre con la música apropiada para la ocasión y el lugar. En esencia, era hacer una fiesta en nuestra sala.

Cuando escuchamos No Regular Play nos imaginamos precisamente eso que acaban de decir: una fiesta con amigos cercanos, bebidas finas, un lugar bonito y baile suave. ¿Cómo se imaginan ustedes la noche de fiesta perfecta?

¡La que describes suena perfecta!

¿Qué importancia le ven a tocar instrumentos en un live act de música electrónica? ¿o lo hicieron porque se ajusta a su estilo y sonido?

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Lo hicimos porque es lo que mejor conocemos. Durante años estuvimos intentando replicar algo que nos gustaba, pero no era lo que conocíamos y no era nuestra base. Tan pronto como volvimos a hacer las cosas en las que sobresalíamos, todo empezó a mejorar para nosotros.

Ya vinieron este año a Colombia a tocar en el Estereo Picnic. ¿Cómo estuvo esa experiencia?, ¿qué es lo que más les gusta de venir a nuestro país?

Venir al Estereo Picnic fue fantástico. Fue una plataforma enorme para nosotro,s y quedamos realmente sorprendidos de ver cuánta gente vino a apoyarnos. Ese día nos dimos cuenta de que tenemos algo grande aquí en Colombia. Muchos de nuestros amigos son de aquí y el apoyo que nos han dado en estos años ha sido inspirador. La gente es extremadamente acogedora, ustedes son excelentes anfitriones, la comida es deliciosa y la herencia cultural y musical es mucho más rica de lo que imaginábamos.

Siempre es un placer verlos visitar la tierrita. Ustedes hacen parte de una movida musical que es considerada música electrónica pero que a veces incluye la interpretación de instrumentos en vivo. Es el caso de Claptone, Nicolas Jaar, Slowhands, etc. Artistas de sonidos muy jazzy, groovy, experimentales, con muchos seguidores que no son amantes de la música electrónica. ¿Qué piensan de la importancia de esta escena?, ¿creen que son el punto de entrada para que mucha gente comience a amar la música electrónica?

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Nosotros solo estamos muy felices de poder combinar todas las cosas que más nos gustan del jazz, hip hop, house, clásica, etc. Y esta escena es importante porque puede unir a una mezcla muy ecléctica de personas y mostrar la belleza que hay en todos los tipos de música. Siempre hemos apoyado el pensamiento de que cada género musical tiene algo sorprendente, ya sea country, rap, folk… puedes encontrar cosas muy buenas, solo tienes que buscarlas y tener la mente abierta. Ojalá seamos una parte importante de eso.

De seguro que sí. ¿Qué tienen preparado para 2016, nos traerán cosas nuevas?

Actualmente estamos terminando nuestro segundo álbum, y tuvimos varios shows en los que incluimos un baterista, saxofonista y alguien que toca el teclado. Grabamos el show entonces ojalá se convierta en un live record que también sacaremos pronto. Aparte de eso, más y más gigs, ¡y seguir en el estudio!

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Si ya vio a No Regular Play, vale la pena repetir este viernes 2 de octubre en Billares Londres. Asista al evento por acá.