FYI.

This story is over 5 years old.

Actualidad

Temer a las películas de terror hizo que John Krasinski dirigiera una de las mejores de 2018

John Krasinski nos contó cómo "The Office" y sus miedos lo ayudaron a desarrollar "A Quiet Place".
The Office y A Quiet Place | Imágenes via YouTube. 

A John Krasinski casi le da un ataque de ansiedad antes de ver Nightmare on Elm Street.

"¿Por qué me asusto tanto? La verdad, no sé por qué", me dice antes de soltar una carcajada. En teoría, uno creería que alguien que admite ser asustado fácilmente no tiene nada que hacer como director de terror. De hecho, no tiene cómo ser uno bueno. Pero hace unos cuantos días, Krasinski enloqueció cuando el mismísimo Stephen King le dio a su nueva película, A Quiet Place, su sello de aprobación.

Publicidad

El aclamado thriller de terror ha ganado 50,8 millones de dólares desde esta semana que acaba de pasar y se dirige a los 100 millones este mes. La mayoría de los involucrados, incluyendo a Krasinski y a su coestrella/esposa Emily Blunt, nunca lo esperaron. Una estrategia de mercadeo inteligente, un buen voz a voz, y una historia con un buen concepto detrás (una familia que no puede hacer ruido para sobrevivir a monstruos que cazan por medio del sonido), transformaron una pequeña película de 17 millones de dólares en uno de los filmes más importantes de lo que lleva 2018.

Aunque puede que Krasinski siempre sea conocido como el adorable Jim Halpert de The Office, él se encuentra en algo completamente diferente por estos días. Así que lo contacté ahora que está por lo alto para hablar de cómo un autoproclamado niño llorón logró hacer la mejor pelícua de terror de 2018 hasta el momento.

VICE: OK. Un tipo de The Office logró que Stephen King dijera que A Quiet Place es una obra maestra. ¿Te sientes bien?
John Krasinski: Es abrumador. Uno ni siquiera lo puede concebir como algo posible. ¡Él es literalmente el rey del terror!

Y no para. James Corden, Lebron James, Chris Pratt y muchos más están diciendo lo mismo, y además tiene una calificación de 96% en Rotten Tomatoes. ¿Cómo estás procesando todo esto?
Es una gran pregunta. Todavía lo estoy procesando. Lo llevo procesando desde la primera proyección en SXSW. Me siento como en el colegio, cuando uno cree que algo es cool, pero espera que los otros también lo consideren cool, y que por el hecho de que otros lo crean, se vuelve cool. Tanto Emily como yo estamos sumamente sorprendidos por las reacciones y, la verdad, no podríamos estar más felices.

Publicidad

¿Crees que al no ser una persona de películas de terror —como lo has dicho varias veces— has podido hacer un film de este género que se sienta diferente?
Puede que sí, porque no me propuse a hacerla como una película de terror, sino como una película sobre una familia, y simplemente me aseguré de hacer que eso se sintiera muy real y muy orgánico para mí. También ayudó el hecho de Emily y yo tuviéramos a nuestra segunda hija tres semanas antes de leer la primera versión del guion. Quería recrear ese tipo de experiencia. Todavía recuerdo a Greg Daniels en The Office diciéndome que mi trabajo no era decir mis líneas de una manera chistosa, sino decirlas de forma honesta. Si a la gente le parecían chistosas, problema de ellos. Si les parecían emotivas, igual. Tenía que hacer lo que sé que puedo hacer, y mi trabajo era hacer que la familia de A Quiet Place se sintiera tan real como cualquier grupo de personas.

También estuve viendo un montón de películas de terror para prepararme. Encontré mi fortaleza en eso que creía que era mi debilidad. Cuando veía estas películas, no buscaba técnica ni cosas para sacar de ellas, simplemente le ponía atención a mis reacciones. ¿Cuándo me sentía asustado? ¿Cuándo sentía tensión? ¿Cuándo funcionaron mejor para mí esos momentos? Me sentí como mi propio grupo focal.

Es gracioso, porque en muchas entrevistas has dicho que te asustas muy fácil. ¿Por qué?
Para mí se trata de las cosas importantes, como las de esta película. La idea de que no pudiera estar ahí para mis hijos cuando más me necesitaran. Que no pudiera estar cuando mis hijos estuvieran en peligro o en situaciones difíciles. ¿Pero por qué me asusto tanto? La verdad, no lo sé (Risas). Soy una de esas personas que cuando está en la ducha, y de la nada Emily entra para decirme que va a salir con los niños, como que mi mente se concentra por completo en lo que estoy haciendo en ese momento, y pierdo consciencia de todo lo que me rodea. No soy de esas personas que duermen con un ojo abierto (risas), así que ella diciéndome que va a ir de compras o algo, me hace saltar y gritar.

Publicidad

¿Pero entonces no recuerdas cuándo empezó ese temor? Una película con la que dijeras: no, esto del terror no es lo mío…
¡Claro que sí! Yo crecí en los ochenta y noventa: la era de los slashers, Fredy Krueger, Jason. No tenía ningún interés por meterme en ese mundo. No había nada bueno ahí para mí (risas).

Recuerdo estar en la casa de un amigo, y ellos iban a ver Nightmare on Elm Street, y justo antes de que él pusiera la cinta en el VHS —sí, eran épocas de cintas de VHS—, él la estaba poniendo y a mí me empezó un ataque de ansiedad serio. Mi hermano mayor se dio cuenta y me sacó de ahí y dijo, '¿saben qué?, John está muy joven para esto, lo voy a llevar a casa'. Muchos años después me di cuenta de que él había hecho esto solo para salvarse a sí mismo (risas). Me usó para salir de esa situación, porque el tampoco quería tener nada que ver con Freddy. Fue un genio, en realidad.

Es interesante. Jordan Peele amaba el terror, pero también le tenía miedo. Su carrera estaba centrada principalmente en la comedia antes de Get Out. Y es como si entendiera lo que se necesita construir para llegar al remate de un chiste. Las películas de terror como A Quiet Place necesitan esa misma construcción. ¿Crees que tu relación con la comedia intervino aquí?
Eso es muy interesante. Creo que la idea del ritmo fue primordial ahí, y ya había escuchado a alguien sugerir eso mismo en el pasado. También cumple un rol muy importante en la comedia, obviamente, y es una parte crucial para lograr sustos. Recuerdo que faltando 24 horas para mi corte, cortábamos cuadros y cuadros antes del susto, y todo lo hacíamos pensando en la construcción y el remato, justo como con un chiste. Creo que hay algo ahí. Definitivamente me beneficié mucho de mi experiencia en la comedia. Lo que Jordan hizo con Get Out fue fenomenal, y me encantó la película, pero además ahí había un tema más grande en juego. La comedia hace lo mismo. No solo estás haciendo un film sobre chistes [o sustos], Peele hizo eso, pero también incluyó algo mucho más grande y profundo que tenía que ser discutido. Creo que pasa lo mismo con A Quiet Place.

Publicidad

Una de las mejores cosas de esta producción es poder ver las sutilezas que se pueden describir por medio de los rostros. Si mi pareja hace cierto tipo de mirada, yo ya sé lo que significa. ¿Qué tan valioso fue tener a tu esposa de la vida real, Emily Blunt, como parte de esta historia?
(Risas) ¡Es muy valioso en muchas maneras! También en la forma que tú describes. Uno se puede identificar con la idea de que hay este lenguaje secreto entre esposos o personas con algún historial romántico. Eso es genial, porque es básicamente el único lenguaje que tuvimos que usar, así que hubo mucho de eso. El estar casados en esta película tanto como en la vida real, ayudó mucho.

Y además Emily fue muy solidaria conmigo y estuvo a mi lado literal, física y figurativamente, y fue increíble. Poder depender de ella no solo como actriz, sino para que estuviera ahí y me calmara durante todo el proceso, de verdad ayudó. Esto ha sido lo más comprometido que he estado en una película. Ha sido mi riesgo profesional más grande. Poder tener a la persona en la que puedes confiar completamente en esta situación fue muy bueno.

Cortesía de Paramount Pictures.

Es obvio que para ti la familia es importante. Es por esta razón que hiciste este film, y que hiciste The Hollars. ¿Qué extraes de ser padre de familia?
Wow, todo. Cuando mi hija nació tres semanas antes, tenía la sensación de que todos los padres pasaban por una temporada de puro terror. No solo el terror de poder mantener vivo y a salvo a tu hijo, sino de todos los atributos físicos que llegan con las experiencias del día a día. También está la idea de nunca estar listo. Que no eres lo suficientemente bueno como para ser padre. Que esto es una responsabilidad y una iniciativa muy grande. Esperar ser lo suficientemente bueno. Todo eso influyó. La relación entre Millicent Simmonds y yo, la idea de la culpa, la responsabilidad y la protección fue algo realmente hermoso y honesto.

Publicidad

Debo decir, mucho de lo que haces ahora es muy diferente de lo que hacías antes. Tu primera actuación en teatro con Dry Powder, por ejemplo. Pareciera que estuvieras haciendo un esfuerzo por alejarte de tu papel en The Office pero, ¿qué tanto lo extrañas?
Lo extraño en todos los niveles. Y lo diré ahora, no estoy intentando alejarme de Jim ni de The Office. Sé que cuando mi carrera esté llegando a su fin la gente probablemente me reconocerá como Jim, y eso es un honor. Eso no me abandonará y es, de hecho, gracias a The Office que creo que puedo tomar estos riesgos. The Office es ese tipo de cosa que puedes apreciar de lejos y decir que nunca vas a tener algo tan bueno como eso, porque sencillamente no puede ser replicado.

Le puse a mi productora Sunday Night porque cuando vivía en Nueva York y era mesero, una de las cosas que la gente me decía en ese entonces, y que ahora entiendo, es que la única cosa que no haces cuando eres un actor, es actuar. Estás trabajando en seis o siete trabajos, juntando las monedas para poder pagar las cuentas. Así que mis amigos y yo nos reuníamos los domingos en la noche y ese era el único momento que teníamos para nosotros. Nuestro grupo se llamaba el Sunday Night Crew, y simplemente hablábamos de películas, obras, libros y música que nos gustara. Era el único momento en el que podíamos ser artistas, ser creativos. En esa época todos jurábamos que, si lo lográbamos, si teníamos la oportunidad, haríamos esto y lo otro. Honestamente siento que, por la oportunidad que tuve, por The Office, debo hacer lo que les prometí a mis amigos. Tengo que tomar riesgos. De eso se trata para mí.

Publicidad

Cortesía de Paramount Pictures.

Y vaya riesgo. Te metiste al género del terror y rompiste dos reglas temáticas desde el primer momento. Tuviste que saber que esto pudo haber salido muy mal.
¡Sí! Tú lo has dicho. Esto fue todo un acto en la cuerda floja. Es por eso que dije que esta había sido mi experiencia más personal, y lo más comprometido que había estado jamás. En términos profesionales, estaba arriesgándome mucho, pero también lo hacía personalmente, porque esto es como una especie de carta de amor a mis hijas. Siendo honesto, sabía que si no triunfaba con esta película, estaba listo para terminar mi carrera como director. Entré a esto con la actitud de, o triunfo o me hundo. Así que fue sumamente desafiante, especialmente al no haber diálogo. Los realizadores de cine te dirán que el diálogo es el metrónomo para saber cuándo cortar. Puedes editar ritmo, tensión e historia con diálogo. Pero es cuando remueves esto, que quedas con una cosa mucho más desatada, a la que tienes que encontrarle un camino. Eso fue aterrador.

¿Qué tomarían las audiencias de esto? ¿A qué estarían dispuestas? En verdad pensaba que esto era todo o nada. Al entender eso, me sentí lo suficientemente osado como para tomar las decisiones de hice porque, si no funcionaba, nunca más lo iba a volver a hacer. Y estaba bien.

Y bueno, hablando de riesgos, escuché que vas a intentar dirigir Life on Mars
Ni siquiera sabía que esa historia iba a salir. Ni siquiera sé de dónde vino el título Life on Mars (risas). Pero en conclusión, el cuento me pareció muy interesante. Es como una semilla de una idea, algo similar a lo que pasó con A Quiet Place. Mi compañía la compró a Paramount y a Platinum Dunes, y era una pieza que nos encantaba y queríamos explorar. Si la dirijo, será genial, pero si no, será una historia increíble de todas formas, es un relato abierto que puede terminar en muchos lugares diferentes.

¿Entonces todos entendieron mal?
Si, no se llama Life on Mars (risas)… nada de eso es real.

Sigue a Noel Ransome en Twitter.

Este artículo apareció originalmente en VICE CA.