La nueva cantante de Puerto Candelaria es la cura contra la sequía y la fiebre boreal

Magaly Alzate es más paisa que comer fríjoles y pasarlos con mazamorra. Su acento es marcado y su voz suave y juguetona. Fue la mujer que se adueñó del micrófono para encantar oídos con su melodioso instrumento, su voz, en la agrupación Gordo´s Project, donde estuvo cantando durante 8 años. Hizo lo propio con Sereno: Paisajes sonoros de Antioquia , un proyecto basado en la investigación de ritmos tradicionales y músicas de las nuevas generaciones. Desde hace aproximadamente 10 años es invitada especial en Merlin Producciones en los proyectos dirigidos por Juancho Valencia como: La Trópico Big Band y Banda La República.

A finales de junio de este año, se hizo un cambio estructural tan profundo que no se veía desde hace diez años cuando los integrantes de Puerto Candelaria decidieron tirar el jazz por la ventana y convertir a la banda en una papayera con instrumentos de viento y una batería desmembrada. La transformación se dio con la salida del segundo percusionista de la banda, Juan Guillermo Aguilar, alias"Kosso", quien, en el lenguaje candelario, decidió emprender su aventura en busca del tesoro de la mina de tautenio, ese mineral precioso que sólo existe cuando no se ve. Esta vacante la ocupó Maga la Maga para renovar el espíritu del Puerto, no sólo desde la percusión, sino desde la voz encantadora y surreal.

En la historia que narra el Puerto se dice que proviene de una isla del sur, cuyo nombre es guturalmente impronunciable. Se le conoce como Maga la Maga. Habla poco, sonríe mucho y en su mirada se alcanza a atisbar un misterio profundo. «Es tan pura su voz y su melodía tan penetrante, que las matronas le atribuyen a Maga La Maga, el regreso de la cosecha de mango que hace ya más de mil lunas no volvía. Sin exagerar, han aseverado que cuando Maga la Maga camina por la antigua carretera hasta el astillero, donde está construyendo su casa, las vacas que escuchan sus melodías entregan leche más dulce. Dicen que oírla desde lejos alivia el corazón, las penas, incluso el tifo y la fiebre boreal. Que los niños de la única escuela del pueblo, por fin logran pasar sus pruebas de matemáticas. Dicen que cuando ella canta cerca de la reja del salón, los estudiantes parecen entender aritmética», dice el comunicado de prensa que nos envió Puerto Candelaria.

Básicamente es como si todo el ambiente se transformara cada vez que esta mujer abre la boca, dejando que el aire sea parte y se mezcle con su melodiosa voz. Finalmente su llegada al Puerto es eso, una transformación. «Puerto Candelaria recibe a La Maga como son recibidos tradicionalmente los visitantes del Puerto, es decir, con alegría, cariño, admiración y muchas expectativas. Con el agravante de que Maga llegó para quedarse, entonces la fiesta se extendió por todo el Puerto y se declaró que todos los días de la semana de este año, sin excepción, son feriados y de carnaval. Del público puedo decir que se han escuchado buenos comentarios al respecto, coinciden en que ya era hora de que una mujer se quedara en el Puerto», dice Eduardo González, "El Caballero", bajista de la banda.

«Antes de pensar en Maga, pensamos en alguien que hubiera trabajado con nosotros desde los inicios. Alguien que tuviera la misma energía , experiencia, estética y propósitos de los candelarios. Estos y otros detalles humanos, hicieron que la decisión de convocar a Maga fuera unánime. Además, la versatilidad en su voz, su facilidad en la percusión, la guitarra, el bailarina y un abstracto sentido del humor encajan perfecto en el engranaje de la geografía del Puerto. Todo esto sin olvidar que Maga es una de las voces mas bellas y enigmáticas de la historia de Colombia, la cual combina perfectamente con el pop rosadito, el melisma bosa novero , el vertigo jazzero y la fritanga chucu chuquera de la banda. Además el dúo fatídico, delirante y embelesador que forma con "El Caballero", nos recuerda a los mejores dúos hispanos como Pimpinela y podemos llevar a nuestro público el tan apetecido formato telenovelero a la tarima, los shows y las próximas canciones», dice Juancho Valencia, el director de Puerto Candelaria.

Para saber un poco más de esta nueva joyita en la corona de la banda, decidimos charlar con la mujer que tiene a los habitantes del Puerto en un perpetuo asombro.

¿Quién eres y qué haces ?

Soy Maga la Maga, hablo poco y sonrío mucho.

Llegué a Puerto Candelaria en días de fiesta, días cálidos. Me sentí atraída por la gente que encontré alrededor, la música rara y juguetona. Me imaginé que éste sería un buen lugar para llevar a cabo lo que más disfruto hacer, cantar, bailar, imaginar y crear, así que decidí quedarme.

¿Cómo llegaste a la banda? ¿Cómo conociste a Juancho Valencia, el director musical del Puerto? Estaba en Sydney, Australia, y recibí una llamada, era Juancho Valencia proponiéndome ser parte de Puerto Candelaria y por esos días coincidió con mi decisión de no quedarme a vivir en Sydney, así que acepté la propuesta. Para mí fue una muy buena idea y una muy buena oportunidad tanto para mi carrera como cantante, como para mi vida personal.

Yo creo que Juancho me conoció primero cantando en otras de mis bandas, eso fue como en el 2003-2004. Después de unos años nos reencontramos hasta que por fin empezamos a trabajar juntos gracias a Gordo's Project, mi anterior grupo, con el que grabamos nuestro primer disco en Merlin Producciones, que es la productora de Juancho. En ese momento empezamos a trabajar juntos haciendo jingles y cualquier cosa que este genio de la música se inventara, como cuartetos, guías cantadas y participaciones como cantante o corista en sus diferentes proyectos.

¿De dónde vienen los referentes de esa mujer que ha llegado a darle un nuevo color a los días del Puerto? Mis referentes vienen desde esa primera información que te llega cuando eres niño, pues es la música que escuchaba mi madre y en casa de mi abuela. Así que desde ahí, intentaré darte mi lista: Rocío Durcal y Amanda Miguel (muy expresivas y románticas ellas), escuchaba también a Matilde Diaz y al mismo tiempo a Cynthia Johnson con su "Funkytown", Celia Cruz, Mercedes Sosa, Lauryn Hill, Gina María Hidalgo. Yo escucho de todo desde muy pequeña. Andrea Echeverry es la más cercana y a ella la escucho por decisión propia desde hace muchos años, ella fue la que me hizo cantar pronunciando bien la L (si escuchas "Luz azul", por ejemplo).

Más adelante me enamoré profundamente de un género musical en particular en el cual Bebel Gilberto y CéU, me llevaron a un bossa nova más contemporáneo. En México hay unas cantantes con unas voces y composiciones hermosas, son bastante jóvenes además, empecé con Eli Guerra, Julieta Venegas y Natalia La Fourcade, ahora a la que más escucho es Carla Morrison. Me pasa lo mismo que con Bebel y CéU, las voy dejando por ahí y vuelvo a ellas, retomo su música en cualquier momento de mi vida. Ahora estoy pegada a Mariel Mariel, sobre todo con esa canción "Noche, noche". Me adapto fácil a los diferentes estilos musicales, pero a veces, aunque lo intente y quiera cantar algunos de ellos, mi voz no funciona, (carita triste)

¿Qué tanto de Magaly tiene Maga la Maga, tu personaje en el Puerto, y viceversa? ¿En qué se diferencian?

Tanto a Magaly como a Maga la Maga, los cambios nos gustan, no nos asustan y nos adaptamos fácil. Maga la Maga tiene de mí la versatilidad, la sonrisa, el gusto por el baile y la memoria selectiva y a corto plazo, jajaja. Yo tengo de La Maga el gusto por cantar y viajar. Hasta ahora nos estamos conociendo. Nos diferenciamos en la estatura, el maquillaje que usamos, el lugar de donde venimos y vivimos.

¿Qué se siente ser la única mujer en el grupo? Aparte de ser la consentida y dueña de todos los piropos, deben haber pros y contras.

Ser la única mujer es bueno pues tienes privilegios a la hora de la acomodación de los hoteles, me dan una habitación para mí solita.

No me siento rara, en la mayoría de los grupos en los que he estado he sido la única mujer, así que ya es normal para mí, no es que te falten al respeto, pero me pasa siempre y es que te empiezan a hablar sin filtro, sin pensar que hay una mujer y tienen que hablar y actuar de cierta manera, simplemente soy "una amiga más".

Contras: A la hora de necesitar cosas de chicas esa es mi desventaja, en ese momento pienso: ¿por qué no hay otra mujer en el grupo?

Mi personaje es Maga la Maga, le doy el toque femenino al grupo, según ellos ya les hacía falta. Eso está muy bien para mí. Soy el toque misterioso y llego cargada de cambios y sorpresas.

¿Cómo te ha recibido el público?

De mis primeras apariciones con Puerto Candelaria, todas han sido muy importantes, en Medellín, Brasil y Pasto me han recibido muy bien. Todas las presentaciones han estado cargadas de muchas emociones, retos y nuevas experiencias.

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Maga la Maga llega en el momento en que Puerto Candelaria celebra sus 15 años de sabrosura por todo el mundo. Todas las revelaciones del Puerto durante este año las encuentras aquí.