FYI.

This story is over 5 years old.

Identidad

Un hombre posesivo podría matarte

Entrevistamos a uno de los académicos detrás del estudio más grande sobre hombres que matan mujeres.

Cuando lees historias de terror en los periódicos sobre hombres que asesinan a sus esposas o novias, pueden llegar a parecerte tragedias aisladas a las que jamás se les encontrará una explicación apropiada. ¿Pero te has preguntando si hay un patrón en los asesinatos de mujeres a manos de hombres?

Un equipo de profesores (marido y mujer) querían respuestas a ese pregunta, y han dedicado toda su vida laboral a encontrarlas. Los profesores Rebecca y Russell Dobash, criminólogos de la Universidad de Manchester, pasaron 10 años entrevistando a asesinos sentenciados a cadena perpetua en cárceles británicas y llevaron a cabo el estudio más grande sobre hombres que asesinan mujeres.

Publicidad

Su estudio reveló varios problemas sociales perturbadores. Lo más importante es que su investigación mostró que muchas mujeres son asesinadas por hombres celosos, posesivos y controladores. Las ideas de que hay un derecho de apropiación ligado a la masculinidad son, en algunos casos, mortales.

Hablé con el profesor Russell Dobash sobre el libro que él y su esposa publicaron como producto de su estudio sobre estos tipos de asesinatos, When Men Murder Women (Cuando los hombres asesinan mujeres).

VICE: ¿Por qué era importante hacer un estudio tan profundo sobre las razones que llevan a los hombres a asesinar mujeres?

Profesor Russell Dobash: La mayoría de los estudios de homicidios sólo tienen en cuenta variables como la edad y el género del criminal y de la víctima. Nosotros no creemos que esto diga mucho sobre las razones por las que las personas cometen asesinatos y queríamos ir más lejos.

Obtuvimos información sobre hombres que han asesinado a hombres, mujeres y niños. La mayoría de los estudios se enfocan en asesinatos de hombres hacia hombres, pero queríamos asegurarnos de saber más sobre las mujeres, porque en Gran Bretaña el 30 por ciento de las víctimas son mujeres y en Estados Unidos, el 20 por ciento.

¿Puedes resumir en qué consiste el estudio?

Fuimos a siete prisiones británicas, buscamos los expedientes de asesinatos e identificamos tres tipos principales de asesinatos con víctimas femeninas. Examinamos 105 casos de asesinato de cónyuge (esposas, compañeras, novias); 98 casos de asesinatos sexuales (asesinatos de una mujer individual que no era una compañera sentimental, pero fue asesinada en un homicidio sexual), y el asesinato de mujeres mayores de 65, en 40 expedientes. También comparamos 424 expedientes de asesinatos de hombres hacia hombres.

Publicidad

Estudiamos 866 expedientes en total y recolectamos información estadística sobre la naturaleza de los asesinatos, el número de lesiones, los tipos de arma usada, etc. También recogimos información sobre sus vidas, como problemas que hubiesen tenido durante la infancia y la adultez —si había alguno—, y entrevistamos nosotros mismos a 200 asesinos hombres y mujeres.

¿Cuáles fueron sus hallazgos más importantes?

Encontramos que en la gran mayoría de los casos, los hombres asesinan a sus compañeras por celos sexuales. O en el punto en que la mujer dice "Ya tuve suficiente de tus golpes, me voy"—porque el 65 por ciento de los hombres ya ha usado la violencia previamente contra sus compañeras— o después de que se ha ido. Lo que generalmente pasa es que ellos quieren a la mujer y piensan que es suya, entonces tratan de recuperarla. A menudo, tratan de persuadirla o, irónicamente, de golpearla. En estos casos, finalmente se dan cuenta de que ella no va a volver y cambian el proyecto a aniquilarla.

Los asesinatos de cónyuges fueron perpetrados por algunos de los asesinos más intencionados que vimos. Muchos tenían infancia y adultez problemáticas, muchos tenían problemas de alcohol y eran desempleados. Pero había una porción de ellos que no tenía ninguna condena ni problemas de alcohol, y estaba empleada. Estos tipos tenían la misma orientación a sentirse los dueños de sus parejas. Ya fueran de clase media o de clase baja, se trataba de casos en que los habían dejado y se habían cansado. También encontramos 62 asesinatos colaterales. Estos involucraban el asesinato de los hijos de la mujer, o de sus "protectores" como amigos, parientes, nuevos novios y esposos, lo que muestra lo importante que es este sentido de posesión.

Publicidad

Ese es el asesinato de cónyuge. ¿Qué pasa con el asesinato sexual?

Los asesinos sexuales son generalmente, pero no siempre, depredadores sexuales. En la mayoría de los casos, lo que pasa en los asesinatos sexuales es que él está haciendo lo que habitualmente hace, o bien ataca a la mujer en un área apartada, o bien la ve al otro lado de la calle y trata de tener sexo con ella y ella se resiste. Entonces él lleva a cabo un ataque muy violento, que a menudo involucra estrangulamiento, pero también patadas, puños y pisadas.

Los asesinos sexuales usualmente tienen pasados muy problemáticos, mucho más que los asesinos de cónyuge. Por lo general toman mucho alcohol y son dependientes. Cerca del 37 por ciento de las mujeres asesinadas eran desconocidas, y el resto conocían al perpetrador: era su vecino, pariente o amigo. Sólo cerca del 20 por ciento de los asesinos fue condenado por agresión sexual, lo que es muy preocupante. Algunos fueron llevados a la corte pero la acusación no fue posible, o la mujer retiró los cargos porque no podía continuar con el proceso.

Se cree que las drogas son un factor importante de los homicidios, una idea que probablemente procede de Estados Unidos y allí podría ser importante, pero en Europa y en Gran Bretaña es más frecuente el alcohol. Con los asesinatos sexuales pasa que a menudo estos tipos están en el pub, deciden que quieren una mujer, salen tambaleándose, encuentran a una caminando del trabajo o del pub a su casa y van tras ella.

Publicidad

Y la tercera categoría que identificaron fue el asesinato de mujeres mayores.

En el caso de los asesinos de mujeres mayores, el 40 por ciento de ellos eran desconocidos que la vieron por ahí y sabían que vivía sola. Otros eran vecinos, amigos o parientes. Principalmente, estos tipos ficharon a mujeres mayores porque eran vulnerables. La mitad de ellos perpetró asesinato sexual a una mujer mayor de 65 años. Sólo un par fueron asesinatos en hogares de ancianos. Los asesinatos sexuales de mujeres ancianas fueron por lo general de mujeres mayores de 80 años. A menudo el hombre allanaba su casa con la intención de robarla o de tener sexo con ella, ella intentaba resistirse y él se volvía violento. Sólo unos pocos tuvieron la intención de cometer una agresión, pero luego no pensaron consecuentemente y la golpearon a muerte. Los ladrones eran a menudo abusadores en el fondo, a diferencia de otros. Los asesinatos de mujeres mayores sólo representan alrededor del 6 por ciento de los homicidios, pero esto podría crecer con el envejecimiento de la población.

¿Puedes dar ejemplos de algunos de los casos de estudio?

En un caso de asesinato a cónyuge, la mujer había dejado al hombre hace siete años y estaba casada con una nueva pareja. El ex era posesivo con ella, pensaba que ella todavía le pertenecía y la mató.

En otro, la pareja se había separado y ella tenía la custodia de los hijos. El exesposo estaba con ellos un fin de semana, dos niños, y los mató. No porque odiara a los niños, sino porque estaba enojado con ella.

Publicidad

Un tipo empezó a usar la violencia contra las mujeres cuando tenía 12 años. Cuando trabajaba en un geriátrico golpeó y robó a una anciana, y ya siendo adulto asesinó a una mujer.

¿Te sentiste afectado al trabajar en este proyecto?

Haciendo las entrevistas estaba a veces muy alarmado. La manera en la que hablan del asesinato, como "mataron a alguien", o "un cuchillo surgió", o decir "eso se murió", refiriéndose a la mujer, era muy perturbadora. Los hombres se veían a sí mismos como sujetos a través de los cuales se había ejercido la acción y raramente como actores. El remordimiento estaba ampliamente ausente. No seríamos humanos si no nos afectara esto, pero la policía, los psicólogos y los oficiales que supervisan a los presos en libertad condicional son los que realmente están en el frente de batalla.

¿Qué ha cambiado, si hay algo que lo haya hecho, durante las décadas en que ustedes han estado haciendo este trabajo?

En los años 80 solíamos darle lecciones a los policías sobre los asesinatos de cónyuges y asesinatos sexuales, y la actitud difundida era que la mujer se lo merecía por la forma en que se vestía o se veía, o que no era culpa del perpetrador y que éste había sido influenciado.

En los últimos diez años, las revelaciones en los medios sobre abuso infantil y los sobrevivientes hablando en público, hicieron que la gente empezara a reconocer que esto es algo real. Se empezaron a dar cuenta que no era el producto de la imaginación de la mujer o del niño. Los reportes criminales indican que ha habido un alza del 17 por ciento en la acusación exitosa de casos de violencia física y sexual contra mujeres. La policía rinde cuentas ahora, mucho más de lo que lo había hecho antes. Los movimientos de mujeres —y más específicamente organizaciones como Women's Aid, Rape Crisis, y otros— deberían estar orgullosas del impacto positivo que han tenido en la policía, en las acusaciones y en los servicios carcelarios.

Publicidad

¿Qué podemos hacer como sociedad para prevenir más asesinatos de este tipo?

Tenemos que identificar a estos tipos que son violentos con sus parejas y/o sexualmente violentos y tenerlos bajo control y vigilancia, y dependiendo el caso, en un programa que los obligue a encarar la manera en la que piensan antes de que lleguen a asesinar a alguien. Tienen que entender la negación, el remordimiento y la empatía, y empezar a trabajarlo. La seguridad de las mujeres es lo más importante cuando estamos hablando de este tipo de violencia y debería guiar la manera en que lidiamos con ello.

Los programas para los abusadores que les da la posibilidad de hablar con alguien antes de asesinar a una persona son muy importantes. También necesitamos empezar a educar a los jóvenes sobre las rupturas de relaciones y cómo lidiar con ello, porque generalmente los hombres lidian con estas rupturas peor que las mujeres, y una minoría se vuelve violenta. El año pasado un joven de 15 año asesinó a su exnovia y a otros niños en un tiroteo en un colegio después de que ella lo dejara.

El problema real es que los hombres sientan que tienen derecho de apropiación. La idea de que tienen que tener el control. Esto está presente en gran parte de la cultura popular, no sólo en el rap, aunque también en éste. Hay muchos ejemplos que son alarmantes y, además, un indicativo del problema más amplio. Un ejemplo es la letra de la canción Every Breath You Take de The Police. El hombre posesivo, celoso es una figura muy presente en la cultura pop. Pero no deberíamos aprobar o alentar esta mentalidad, porque es ese tipo de mentalidad la que tienen muchos asesinos.

Muchas gracias, profesor.