FYI.

This story is over 5 years old.

Furia travesti

Necesitamos creatividad y argumentos contra "el bus del odio"

El bus que buscaba dividirnos, paradójicamente, nos está uniendo.
Via Twitter

El sábado llegó a Colombia un bus lleno de odio que dice: "Los niños nacen siendo niños (XY). Las niñas nacen siendo niñas (XX). Esto es biología, no ideología". El bus estará en varias ciudades de Colombia durante 10 días y aunque, en apariencia, es un ataque contra los niños y niñas trans, parece parte de una estrategia más amplia y populista: el pánico sexual.

El pánico sexual ha sido utilizado varias veces en el pasado para generar miedo en la opinión pública: al utilizar ciertos prejuicios, busca que la gente vote o actúe teniendo como principal motivación el miedo. En Colombia hay al menos tres casos recientes: el montaje del escándalo de las cartillas sobre educación sexual, la invención de que en los Acuerdos de Paz entre Colombia y las FARC-EP había una "ideología de género" que iba a mariquear y trasvestir a los niños y el referendo de la senadora "liberal" Viviane Morales. Las tres campañas han sido utilizadas para fines electorales. Las tres utilizan prejuicios sociales para hacer populismo por medio del miedo.

Publicidad

Lea también: 'Viviane Morales, lo tuyo estaba destinado al fracaso'

Todas utilizan y explotan los derechos de los niños. Los niños son instrumentalizados y deshumanizados en sus tácticas del susto. Fingen que les importan sus derechos pero, en realidad, sólo los utilizan porque saben que aún nos asusta la idea de pensar en sexo y niños al mismo tiempo. El objetivo del bus es utilizar el miedo que sienten las familias de que sus hijos puedan ser trans porque cuando la gente está asustada no piensa tan claro y hace lo que le digan. Eso es lo que ellos quieren. Debemos encontrar el vínculo populista entre las elecciones que se avecinan en 2018 y el bus, las cartillas, la saboteada a los Acuerdos de Paz y el Referendo.

Estas campañas han sido tan sucias que han buscado desprestigiar a movimientos sociales y activistas. Saben que necesitan inventarse un enemigo para mover los odios colectivos de la gente. Por ejemplo, cuando se inventaron lo de las cartillas, atacaron a la organización Colombia Diversa directamente y con nombre propio. Lo que necesitan es un papayazo para lograr sus fines. Por eso, su principal arma para relacionarse con el movimiento LGBT (personas lesbianas, gay, bisexuales y trans) es la provocación. Necesitan hacernos ver como personas que no están dispuestas a dialogar, radicales, violentos, irracionales e insensatos.

Es muy difícil no caer en la trampa porque su estrategia es echarle limón y meterle el dedo a las llagas y a las heridas que nos ha producido el odio y la transfobia, las mismas heridas que provocan que un gran número de personas trans intente quitarse la vida. De acuerdo a un estudio en Estados Unidos, al menos el 41% de las personas trans encuestadas reportaron intentos de suicidio. Decir que los niños nacen siendo niños y las niñas nacen siendo niñas es el mensaje que nos han dicho toda la vida para negarnos el amor y para negarnos nuestra humanidad. Nos duele mucho ese mensaje y necesitamos que nuestros amigos entiendan nuestras reacciones como producto de ese dolor. El bus es violento y nos hace daño: los que diseñaron la campaña se aprovechan de que tenemos menos derechos y de que eso nos hace más vulnerables. Entienden muy bien que el movimiento trans es un movimiento sin recursos que ha respondido a la transfobia con el cuerpo y las emociones, porque no ha tenido otros recursos y quieren desprestigiar nuestra forma de lucha.

Publicidad

El sábado, activistas lesbianas, gay, bisexuales y trans decidieron hacer plantones y manifestarse en contra del bus en la Plaza de Bolívar. Estas acciones generaron discusiones porque la gente que la planeó sintió la necesidad de hacer algo y no quedarse callada, mientras que otras personas consideraban que la mejor respuesta era ignorarlo para evitar el show mediático que ellos buscaban escenificar.

En el blog de Silvia Forero, Doce Reflexiones sobre la Visita del Bus del Odio, se hacen varias preguntas y aproximaciones que comparto. Una de ellas es sobre la relación que hay entre el movimiento LGBT y el movimiento trans, ya que muchas compañeras trans se sintieron incomprendidas y solas durante esta acción. Se hicieron evidentes las tensiones y desacuerdos históricos entre lo LGB y la T, y algunas activistas trans sintieron que los desacuerdos sobre la estrategia se plantearon de forma condescendiente o infantilizada.

Sin embargo, estos "encontrones" se convirtieron en una oportunidad de oro para mejorar nuestras alianzas y, el bus que buscaba dividirnos, paradójicamente, nos está uniendo. Vimos la necesidad de mejorar nuestra relación y comunicación con activistas lesbianas, gay y bisexuales y empezamos a comunicarnos más y en mejores términos. Estamos ante una oportunidad de oro para mejorar nuestras alianzas políticas con el movimiento LGBT porque, a diferencia de otros momentos, creo que hay un interés genuino de escucharnos, de actuar de forma unida. Todas las alianzas son imperfectas y vamos a necesitar mucha paciencia, pero nuestro objetivo debe ser permanecer unidos y no dejar que nos dividan porque eso nos va a debilitar en las elecciones de 2018.

Publicidad

Es hora de abrir los corazones y recordar todo lo bueno de nuestra relación, recordar —como me dijo una profesora— el orgullo y el amor que ha existido entre nosotros. No nos enfrasquemos en lo malo, nuestro punto de partida en estos momentos debe ser el reconocimiento de las buenas intenciones para colaborar.

Tenemos que mejorar nuestra comunicación, vernos como iguales en las discusiones sobre estrategias y activar al máximo nuestro nivel de empatía para entender de dónde vienen los argumentos del otro. Sobre todo, necesitamos aprender a organizarnos y a utilizar la creatividad que caracteriza a nuestro movimiento para responder de forma efectiva, contundente y divertida. Ellos quieren tomarnos la foto tirando pintura o siendo groseras y agresivas para descontextualizarlas en redes sociales con el fin de lograr su objetivo: desprestigiarnos como sujetas políticas. No les demos papaya. Necesitamos ideas de cómo movilizarnos, y eso lo podemos aprender de la experiencia de otros movimientos.

Ellos podrán tener un mensaje de odio, pero no tienen nuestra creatividad, porque su motivación principal es el terror y eso eventualmente aburre. Nosotros debemos responder con furia y con amor porque nuestra motivación es la justicia social y una preocupación real por los derechos de los niños. El amor de las familias trans debe ser nuestro motor y debemos poner a los niños trans y a sus familias en el centro del debate. Es hora de que ellos hablen, pero también es hora de darles prioridad real en nuestras agendas políticas.

Publicidad

La solución no es demandar al bus: limitar la libertad de expresión podría ser contraproducente para nuestro movimiento. Hay limitaciones a la libertad de expresión, pero son excepcionales y en el caso del bus lo que ellos buscan es posar como víctimas. Pedir que saquen de circulación el bus les ayudaría con su objetivo. No seamos tan predecibles y no nos casemos con esa idea todavía.

Hay diferentes recursos que pueden ayudarnos a rastrear ideas diferentes. Bella Rebeldía es una plataforma que contiene principios, metodologías, historias, tácticas y teorías del activismo creativo. Esta página sistematiza y analiza diferentes campañas diciendo por qué fueron o no fueron efectivas. Una de las historias documentadas en esta plataforma es la de calzones poderosos: después de una dura represión contra protestas democráticas en 2007, se le solicitó a todas las mujeres de Myanmar enviar por correo calzones femeninos a los generales para protestar contra el régimen y contra su uso de la violencia sexual: "Durante un periodo de violencia estatal extrema, cuando las reuniones públicas estaban prohibidas, la acción 'calzones poderosos' permitió una forma sencilla y de bajo riesgo de expresar el desacuerdo. La acción utilizó de manera brillante la superstición y los tabús culturales para inyectar humor en una situación difícil, y socavar a un oponente sumamente poderoso".

También está la Base de Datos Global de Acciones No Violentas (en inglés) que incluye estudios de caso de acciones de movimientos sociales alrededor del mundo. Una de ellas fue la acción de un grupo de activistas en Filadelfia que hacía shows de drags en las vías públicas con el fin de presionar a las autoridades de transporte para que descontinuara la utilización del sexo femenino/masculino en los pases del transporte público. Los shows lograban buen cubrimiento mediático y lograron posicionar el tema, ganándose —con puro humor trans— la empatía de la opinión pública.

Publicidad

Otro recurso muy útil es la guía para la organización comunitaria Cómo Construir un Movimiento Social para Abolir en Nuevo Jim Crow, donde uno de los capítulos está dedicado a explicar cómo diseñar una campaña teniendo en cuenta los objetivos, las audiencias y la claridad en los mensajes que se transmiten. El libro incluye varios ejemplos de casos exitosos en Estados Unidos del movimiento que busca abolir el sistema carcelario y racista.

Si queremos evitar pánicos sexuales tenemos que utilizar dentro de nuestras estrategias todo lo contrario al miedo: el humor, la irreverencia, la diversión, los argumentos y la evidencia científica. La música de fondo de nuestras reacciones debe ser Aterciopelados. Para la furia con humor, los insultos chistosos de Baracunata: decirles hasta cucharamí, pero de forma socarrona. Y para la guerra de ideas, un Ataque de Risa:

Disparo flores, Bombardeo amores
Ataque de risa invasión de sonrisas
Le canto y le baile las milicias
(…)
En vez de combates, prefiero chocolates
En vez de pelear, propongo enamorar
En vez de una guerra, millones de estrellas
En vez de balas, yo quiero alas
En vez de muerte, prefiero suerte

Es hora de organizar la furia travesti desde el amor que el mundo nos ha negado.

*** Mati es la travesti peligrosa de la que tanto te advirtieron, síguela en su Twitter: @matigonzalezgil


*Esta es una columna de opinión, por tanto no compromete la postura de VICE Media Inc.