Ojo, mucho ojo: Cristina de Middel

Cristina de Middel (Alicante, España, 1975) se formó como fotoperiodista pero el mundo "real" de la prensa la empujó a buscar la realidad a través de la ficción. En 2013, el Internacional Center of Photography de Nueva York le otorgó el Infinty Award por su su libro The Afronauts sobre el programa espacial de Zambia en los años sesenta que tenía como objetivo poner al primer hombre africano en el espacio. Tuve la oportunidad de tomar un café con Cristina, y aunque tenía la intención de hablar sobre una serie en específico terminamos hablando de su visión sobre la fotografía y su trabajo en general. Aquí un fragmento de nuestra charla.

¿Cómo dejaste el fotoperiodismo?
Lo hice porque me decepcionó; me desencantó. A lo mejor soy muy apasionada y me di cuenta que si puedes cambiar al mundo con una fotografía desde luego no es en un periódico; es en otras plataformas. No quería formar parte de la prensa tal y como está, como funciona ahora. Entonces decidí probar otras cosas, hacer las cosas de otra manera. Probé con la ficción porque hay muchas veces que la realidad no explica bien la realidad, que es lo que a mí me interesa, que la gente comprenda el mundo en el que vivimos.

Como fotoperiodista tienes que respetar ciertas reglas, y yo decidí no respetarlas más y priorizar que la gente comprenda la historia a todos los niveles y que se abra el debate. La prensa diaria está meramente basada en apoyar, ya sea con imágenes o texto, una opinión que ya viene marcada por intereses editoriales, publicitarios, políticos, etcétera. Lo último que se prioriza es que la gente entienda lo que está pasando y cuáles son los agentes que intervienen para que así puedan formar su propia opinión.

¿Crees que tus fotografías son un tipo de "periodismo" que cumple con lo que el periodismo tradicional debería de ofrecer?
No, yo no hago periodismo. Si acaso puedo hacer una especie de documental, una crónica o ensayo. Así como los ensayos están basados en algo real, mi fotografía también lo está. No es que yo esté hablando de sirenas y unicornios; realmente todos mis trabajos parten de algo que me interesa y que está sucediendo. Me parece que muchas de las cosas que suceden en la actualidad y que consumimos en los periódicos se podrían explicar mejor. Creo que hay muchos problemas en este mundo que se podrían solucionar con más información y mejor entendimiento.

Hay una fuerte conexión entre tu trabajo y el cine.
Sí, para mí es un referente, pero lo que a mí me interesa es aprender del cine. Es lo mismo; está basado en el mismo sistema óptico y químico de captar la imagen y hacerla a la par ¿no? Siempre pongo este ejemplo: cuando por primera vez se proyectó una película en una sala, la proyección era de un tren entrando a una estación y todo el mundo salió corriendo de la sala pensando que morirían atropellados por el tren. Claro, eso fue hace 120 años; ahora estamos viendo en 3D como aliens vienen y nos usan como baterías y no pasa nada. Hay una evolución de cómo se entiende y cómo se asimila el cine. ¿Qué ha ocurrido en la audiencia? ¿Qué ha ocurrido en la sociedad? Algo ha permitido que el cine pueda ser documental sin complejos y pueda ser animación 3D sin complejos. En cambio, ¿qué ha pasado con la fotografía?, ¿por qué seguimos esperando que llegue el tren y nos atropelle a todos?, ¿por qué no se ha podido desarrollar tan rápido como lenguaje?

¿Y qué es lo que piensas?
Que hay que fijarse mucho en el cine. Además es buen ejercicio ir al cine para luego saber editar tus propias fotografías ¿sabes? El cine es cómo un gorgoteo continuo de ideas, de encuadres, de ritmos, de historias, de todo. Yo sé mucho más de cómic y cine, que de fotografía.

¿Qué haces en tu trabajo para dar ese paso?
A ver, a nivel de entrenamiento lo que hago es ver muchísimas películas. Luego, algo que es más típico del cine que de la ftografía es adaptar la realidad a lo que yo quiero. Es decir, no significa que sea lo mismo. No es que necesite un unicornio ni una sirena ni nada de eso. Pero a lo mejor necesito que la gente baile en la calle y tengo dos opciones: o trato de hacer un documental y espero a que alguien pase delante mío bailando, aunque podría pasarme toda la vida esperando; o puedo parar a una persona y decirle "Oye, ¿te importa hacer un paso de baile exactamente así, exactamente aquí?" Y entonces hago la foto.

¿Haces un mezcla entre documental y ficción?
Sí, cuando lo necesito. Yo trabajo con un guión, hago storyboards y todo eso. Por ejemplo, hice un trabajo que se llama "Snap Fingers And Whistle", que es un libro que salió hace dos años. Es una versión de "West Side Story" pero contada con el lenguaje de la fotografía callejera. Me fui a Nueva York y empecé a para gente "Oye, te importa bailar" o "te importa…". También cogía planos de la película y se los enseñaba y les decía "¿puedes hacer esto?", y es así, adaptar la realidad a lo que yo quiero. A veces se produce una confusión, porque si es un lenguaje de foto de calle, entonces también abre el debate sobre cuál es el valor de foto de calle si está montada, si realmente lo puedes distinguir o no y todo eso. También yo estoy explorando en ese sentido, y me la estoy pasando re-bien.

Estás a nada de hacer cine.
¿Sabes lo que pasa?, que el cine requiere un equipo enorme, y a mí me gusta trabajar muy rápido porque estuve muchos años en prensa. Estoy acostumbrada a ser así; absorbo el consumo y hago las cosas rápido, todo rápido. En cine no podría trabajar así porque no puedo hacerlo todo sola. Necesitaría a alguien de sonido, y más cosas. Es muy grande; si el cine lo pudiera hacer yo sola en un día, ya lo estaría haciendo.

En la fotografía puedo crear lo mismo y decir lo mismo. A mí lo que me interesa es contar historias con imágenes. Hay muchas cosas que ofrece el cine y que me estoy perdiendo por no hacerlo. Tengo muchas ideas para hacer películas pero lo que es más importante para mí es contar la historia visualmente, y lo puedo hacer con fotos, cómics o dibujos. Quizá algún día necesite contar algo que solo se puede lograr con imagen en movimiento.

¿Qué opinas de las exposiciones fotográficas?
No soy una gran consumidora de exposiciones de foto en general. No me gustan; por lo general no voy.

¿Qué sería lo que une a todas tus series? ¿Qué es lo que te llama la atención?
La relación entre todo mi trabajo es una crítica directa a la prensa y a los medios. No es una crítica a los medios de comunicación en general, pero sí a cómo se reduce y se simplifica el mundo en "10 artículos, 15 imágenes y esta es la verdad". Me gusta reflexionar sobre los clichés, que son el resultado de este tipo de prensa. África se convierte en elefantes al atardecer; India, en mercados de flores, señoras con un pendiente en la nariz, gente bañándose en el Varanasi; Alemania, en gente bebiendo cerveza. Esa reducción no deja tiempo para el análisis, ni para la crítica, ni la opinión. Eso ha acelerado la creación de clichés. En cambio, a mí me gusta ponerlo sobre la mesa, es decir, esto existe, que sepas que existe

A eso me refería con que de alguna manera sigues haciendo periodismo.
Sí, de cierta forma. Pero sí digo que soy periodista se me echa el mundo encima. Pero yo hago crónica.

El fotoperiodista debería salir, empaparse de los artistas para aprender a contar las historias de otra manera, para educar a su público, para aprender a explicar mejor. Su responsabilidad es que la gente entienda lo que está pasando, porque con lo que están haciendo no se entiende nada. Siempre es lo mismo, que es igual a nada. Por otro lado, el artista debería empaparse mucho más del mundo del periodista, que está totalmente entregado y que está totalmente comprometido con la realidad para dejar constancia y explicar el mundo en el que vive. Yo estoy tan en contra del periodista que se va a Siria a hacer fotos en blanco y negro, como de un artista completamente conceptual al que no le interesa nadie y que además nadie lo entiende.

¿Qué es lo que me gusta?
Estar en el medio, entender el lenguaje de unos pero la temática de otros. Supongo que porque me llamo De Middel y estoy en el middle (en medio).

¿En que proyecto estás trabajando actualmente?
Acabo de llegar de Brasil y estoy haciendo un proyecto que se llama "sharkification". Es sobre las favelas y la estrategia del gobierno brasileño para poner las Unidades de Pacificación Policial (UPP) para controlaras. Esto significa una casi militarización de las comunidades en las que de repente todo el mundo es sospechoso. Ese es el tema. Sé muy bien cómo se está tratando y lo que yo hice fue hacer una metáfora, que es lo que hago para intentar explicar cuál es la dinámica en este sitio. Usé el simil de un mundo submarino para imaginar que las favelas son un arrecife de coral y que hay depredadores, bancos de peces y peces que se camuflan. Digamos que es como un hábitat en el que está el pez grande, el pez pequeño, y eso no significa que todos los peces pequeños mueran. A veces también muere un pez grande. Trato de usar un modelo que todo el mundo entiende para explicar la favela.

¿A través de la ficción buscar mostrar una realidad más verdadera que la supuesta "realidad"?
¡Claro! Que se entiendan más niveles y que se acerque mucho más. Voy a intentar que se abra mucho más el debate. Voy a decir que el tiburón es bueno y que el tiburón es malo para que entiendas la dinámica. A mí no me interesa que tú estés de acuerdo conmigo; lo que me interesa es que entiendas un problema y saques tus propias conclusiones, y para eso necesito darte muchos más elementos de los que salen en la prensa.

¿Por qué lo haces de una manera tan lúdica?
No puedes intentar sensibilizar a la gente o intentar que se motive echándoles la culpa, que es en lo que se basa casi todo el fotoperiodismo. Están jugando continuamente con tus sentimientos. Yo entiendo que el sentido del humor es una manera más inteligente de hacer crítica y que la gente se acerque y tenga curiosidad. ¿Por qué tiene que ser todo tan dramático? Realmente también se están riendo de nosotros, todos.

Muy bien, pues creo que eso es todo.
Ya está.