Las tres cosas que nos deja la nueva regulación para espectáculos públicos en Colombia

Este artículo fue publicado originalmente en Noisey*

Ya han pasado un par de meses desde que en NOISEY y THUMP nos comenzamos a adentrar en el tema de los operadores de boletería para eventos en Colombia. En ese camino nos encontramos con las acusaciones entre Tuboleta y el festival de música electrónica Storyland por una plata perdida del aforo que tuvo el evento y la complicadísima relación de TuTicket Colombia con promotores de conciertos y un gran número de clientes que exigía el dinero de devoluciones.

Como dijimos en el Editorial Noisey a propósito de todo eso, no queremos que el tema de las tiqueteras se nos olvide tan rápido y pensamos que es importante hacerle seguimiento a la industria del espectáculo, tanto por el lado de los privados como el de los públicos. Fue por eso que aprovechando que el pasado 30 de marzo el Ministerio de Cultura expidió una actualización para la Ley 1493 de 2011 -en la que está inscrito todo lo relacionado a realización de espectáculos públicos en el país- les explicamos tres puntos claves relacionados al tema de boletería y escenarios culturales que vienen en este nuevo decreto.

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Ya hay una regulación para que podamos entrar a conciertos con tiquetes electrónicos

En la parte de la Ley 1493 de 2011 dedicada a la "Emisión, control y validación de la boletería física y electrónica de espectáculos públicos de las artes escénicas", se añadió una parte dedicada específicamente a la facturación electrónica de boletas compradas por Internet. Ahí se explica que desde ahora las facturas deben incluir en un solo precio el cobro de la boleta y el del servicio de la tiquetera, que las boletas tienen que tener una representación gráfica digital clara y que a través de sistemas informáticos, las tiqueteras deben enviar reportes a la DIAN y al Ministerio para validar el ingreso de la gente a los eventos y así evitarse líos fiscales. Unas medidas que finalmente, tienen como objetivo regular de una vez por todas la adquisición de boletas por Internet y que podamos entrar a los conciertos con solo pasar la boleta electrónica guardada en el celular por un lector, así como se hace con los tiquetes de avión hoy en día.

Las alcaldías ahora están obligadas a darle recursos a los escenarios sobre ruedas

Para los que no están muy familiarizados con el tema, la contribución parafiscal se creó con la Ley 1493 y básicamente se trata de un cobro del 10% de la boletería de un evento que hace el Ministerio de Cultura cuando el precio de la boleta por unidad es mayor a los 3 UVTs (que este año está en $95,577 pesos ). Un dinero que según el Ministerio, se gira a municipios y distritos por todo el país para que desarrollen proyectos dedicados a la construcción, adecuación, mejoramiento y dotación de escenarios culturales. Pues bien, una de las mejores noticias de este nuevo decreto es que ahora las alcaldías no se van a poder hacer los de la vista gorda y estarán en la obligación de meterle platica de los parafiscales a las tarimas sobre ruedas o "escenarios itinerantes" que se usen para conciertos, bailes, obras de teatro y espectáculos de circo sin animales. También le da un lugar en la ley a este tipo de espacios que si bien no son manejados por organizaciones culturales -un requisito que tenía la anterior regulación-, están dedicados a las artes escénicas y son abiertos al público.

El dinero de los cobros parafiscales ahora se va a repartir más democráticamente en los municipios

Con la vieja norma, la plata de los cobros parafiscales que llegaban a cada municipio quedaba en manos de la alcaldía y ellos veían como la repartían. Ahora para poder siquiera tocarla, tienen que armar comités con productores de eventos y representantes de los sectores del arte para que entre todos puedan discutir cuál es la mejor manera de usarla. Es importante porque le va a quitar todo el poder de distribuir esta plata al sector público y los privados, que pagan parafiscales cuando hacen eventos, tengan una voz, haciendo de todo esto un proceso mucho más democrático.

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