FYI.

This story is over 5 years old.

Vice Blog

SACANDO LA SOPA CON TODD SOLONDZ

En 1998, el desfile de pedófilos y muestrario de depresiones de la comedia familiar disfuncional Happiness provocó una pequeña conmoción. Ahora Todd ha rodado su continuación, echando la vista a la misma familia una década más tarde. Vida Durante la Guerra es una brillante película-hermana en la que Solondz, poniéndoselo difícil a quienes admiraron la primera, ha puesto a un actor distinto en cada papel protagonista. En la mezcla, esta vez, tenemos grandes actuaciones de, entre otros, Charlotte Rampling, Michael Kenneth Wiliams (el Omar de The Wire) y Paul (Pee-wee Herman) Reubens.

Publicidad

Vice: Ayer vi Vida Durante la Guerra y se dio la coincidencia de que mi novia me había comprado un muñeco de ventrílocuo de Pee-wee Herman. Ha sido fantástico ver a Paul Reubens de nuevo en pantalla. Soy fan suyo y me ha encantado que le contrataras. Todd: También yo soy fan suyo desde siempre, aunque no tengo en casa un muñeco de Pee-wee envuelto en celofán. Siempre he encontrado muy triste la historia y el peso que Pee-wee ha tenido que cargar sobre sus hombros. Se me ocurrió que eso precisamente añadiría intensidad a su rol en la película. Nadie le había visto hacer algo remotamente parecido a este papel. Resulta muy conmovedor. Tu película demuestra que merecería una carrera como actor mejor que la que ha tenido. Sí, es cierto. Hay más en él de lo que hasta ahora hemos podido ver. Pero al mismo tiempo sigue haciendo su espectáculo de Pee-wee en directo. Puede que más adelante lo haga en Londres.

Así lo espero. ¿Surgió de la nada esta continuación o estuviste pensando durante años en estos personajes? Es una pregunta difícil de responder, ya que, evidentemente, mi carrera no sigue ningún plan preconcebido. De tener un plan, en primer lugar no habría hecho Happiness. Escribir esta me ha dado más miedo que escribir Happiness, porque sabía que la gente, inevitablemente, iba a comparar una con otra. Tuve que quitarme eso de la cabeza. Esta película está pensada para sostenerse por sí sola aunque no hayas visto nada de lo que he hecho con anterioridad.

He leído que te preocupó que hubiera gente que creyera que habías retratado de forma comprensiva el personaje de Bill, el pedófilo. Yo imagino que nadie a quien le gustara y profundizara en Happiness pensaría algo así. No costaba ver que lo que estabas haciendo era un estudio tridimensional de un personaje. La gente ha empleado palabras como "comprensión" para definir mi actitud respecto a este personaje, y aunque no haya sido ésta la razón de que haya hecho esta película, no cabe duda de que hacerla ha supuesto para mí una oportunidad de dejar clara esa actitud. Mi material tiene la dificultad de que trata a la persona de distintas formas. Hay gente que apreciará en él una exploración seria de lo que significa ser humano, mientras que otros interpretarán que se tratan simplemente de juegos mentales misántropos. La comedia y la tragedia están tan estrechamente ligadas en mis películas que resulta difícil contener y controlar las respuestas del público. Llamarme misántropo es reduccionista y fácil. Es fácil ser un amante del género humano demonizando a una personaje como Bill, pero es bastante más complicado serlo incluyendo al mismo tiempo a tipos como Bill. Es una prueba más ardua a tu humanismo ser capaz de aceptar qué y quiénes somos realmente. Eso es exactamente lo que intento explorar en mis películas, pero al mismo tiempo sé que hay preguntas que están más allá de nuestra capacidad de comprensión.

Los tabúes culturales, sobre todo en el cine, han cambiado mucho en los últimos diez años. ¿Crees que Happiness causaría menos controversia de haberse estrenado hoy? No creo que una película como Happiness se pudiera hacer hoy de no haber sido porque hace diez años se hizo una película como Happiness. Creo que esa película tocó la fibra sensible de unas cuantas personas, activó en ellas un mecanismo que ya no se puede desactivar. Vivimos tiempos histéricos. Cuando yo era niño, recuerdo que había en el parque un cartel que decía, "Prohibida la entrada a menores no acompañados por un adulto". Ahora sería: "Prohibida la entrada a adultos no acompañados por un menor". El de hoy es un paisaje muy diferente. Creo que debe existir algún tipo de daño en la psique de cada uno cuando se mira con algo más que precaución a un adulto que juega con un niño.

Iba a preguntarte si te ves a ti mismo retomando estos personajes de nuevo dentro de diez años más, pero después pensé que lo que a mí realmente me gustaría ver es algo como Happiness: la serie de televisión. ¡Ja! Debería estar pensando en la televisión porque ahí es donde yo realmente podría ganarme la vida, ése es el problema. Pero en vez de eso pienso en las películas y en la experiencia de estar en una gran sala oscura con una gran pantalla. Eso es lo que a mí me gusta. Tengo otro guión ya preparado en el que no aparece ningún personaje de trabajos anteriores míos, pero nunca puedes decir "nunca". Hace diez años me habría resultado chocante saber que haría una secuela de Happiness, y me chocaría aún más encontrarme a mí mismo explorando esos personajes todavía un poco más. Pero, ya te digo, no puedes decir "nunca". Ya veremos lo que ocurre dentro de diez años.