El mal servicio de TransMilenio, la concentración de las masas, la cotidianidad y la locura que se vive diariamente a través del sistema de transporte masivo bogotano despertaron el interés del fotógrafo Sebastián Comba. Sumergido en el aglutinamiento trata de contar lo que percibe y manifiesta, su propia observación. El esfuerzo se tradujo en Bogotá Comprimida, una serie seleccionada para el Tercer Salón Universitario de Fotografía (2017) que hoy publica VICE Colombia.
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En Bogota, cada día cientos de miles de personas se enfrentan a un sistema de transporte apretado e ineficiente y a una realidad tristemente cotidiana. Durante cada recorrido, y comprimidos entre el vidrio, el acero y la multitud, los ciudadanos se dirigen a cumplir sus labores diarias.El confinamiento, la cotidianidad, las masas y su aprisionamiento incitaron a Comba a sumergirse en lo más profundo del sistema y a observarlo mediante la técnica fotográfica.
Ah, y ahora el pasaje cuesta 2.300 pesos. Feliz retorno a la capital.