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Esta escuela es algo así como el Harvard de los travestis

Bienvenidos a la escuela. Esta es la historia de la academia travesti más grande de Nueva Orleans. Sus estudiantes representan el espectro completo del mundo travesti y la amplitud brillante de aquello que puede ser el género.

Todas las fotos por Rachel June.

Cuando los legendarios travestis de San Francisco Visantos y Defonte llegaron a Nueva Orleans hace cinco años, se sorprendieron por la falta de intérpretes en los bares y clubes de la ciudad. No había un medio por el cual aumentara el número de intérpretes travestis o “altas reinas”, como las llama Defonte, y no podían encontrar una sola “reina faux” –una mujer biológicamente mujer, que se viste como si fuera un travesti–.

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Más allá de eso, Defonte se dio cuenta que no había un espacio para que los intérpretes jóvenes o inexpertos aprendieran los trucos del oficio. Rápidamente se puso a trabajar, empezando con lo que se puede considerar la primera escuela de alta envergadura para aspirantes a travestis. El programa que dura tres meses, que ahora está en su tercer ciclo, es un curso intensivo que te adentra en el mundo travesti. Algunos estudiantes duran más de 20 horas a la semana perfeccionando sus interpretaciones y dominando las muchas capas que involucra su oficio: desde seleccionar y estilizar sus pelucas, hasta encontrar el tamaño perfecto para sus tetas falsas.

Defonte también trajo a “profesores adjuntos”, como estilistas de pelo profesionales y expertos en rellenos de cuerpo, que instruyen a los estudiantes en diversas técnicas. Raja, quien ganó la tercera temporada de RuPaul’s Drag Race, en una ocasión dio una conferencia especial.

Después de completar el extenuante semestre hay un examen final para los estudiantes: un show real de travestis con boletería agotada, frente a una audiencia enorme. A la graduación van buscatalentos y bares locales que buscan potenciales intérpretes de tiempo completo.

Parada en el escenario con un vestido azul de lentejuelas y un pequeño ventilador para darle efecto de viento a su pelo, Defonte, cuyo personaje travesti es una mezcla entre Harley Quinn (la novia del guasón de Batman) y Phyllis Diller (una famosa comediante norteamericana de los 60), introduce a los intérpretes de la noche.

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“Esta noche todos van a ver los diferentes ángulos que puede haber en el mundo de los travestis”, presenta Dafonte. “Van a ver a muchos niños como niñas, niñas como cosas, y algunas otras cosas que ni sé cómo decirles. Pero todo es travesti y todo me encanta”.

Nota: los pronombres utilizados en este artículo corresponden a las identidades de género de los personajes travesti, que no son necesariamente la misma identidad de género con la que se identifican los intérpretes en sus vidas diarias.

Drop Dead Darling.

La primera intérprete que conocí fue a Drop Dead Darling, que parecía como si acabara de salir de una película de David Lynch. Me dijo que nunca antes se había presentado en un  escenario y que este era un “momento de los grandes”.

Antes de conocer a Defonte y entrar a la academia, Darling tenía una excusa para faltar a la escuela de medicina, más que todo por razones médicas. “Me tuvieron que operar de la rodilla, y después me tuvieron que hacer otra operación… y me van a operar nuevamente en dos semanas”, dijo. “Ha sido una experiencia para madurar”.

Hasta consideró abandonar la escuela de travestis en un punto. “Estaba pasando por un muy mal momento. Me había rendido a la mitad del programa”, me dijo. “Y Defonte me mandó un mail preguntándome si estaba segura, y en este punto me sentí más deprimida de lo que me he sentido en toda mi vida. Pero ella me hizo reconsiderar todo, entonces decidí continuar. Puede sonar muy cursi y cliché pero creo que la academia me ayudó mucho”. Describió su experiencia como un “proceso transformativo”.

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“Realmente no esperé aprender tantas cosas sobre mí misma y ganar tantas cualidades personales de la forma en que lo hice”, dijo. “Esa noche cambió la manera en la que iba a proceder con mi vida, así no decidiera continuar con mi carrera de intérprete travesti”.

Glamdromeda Strange.

Glamdromeda Strange es una de las dos estudiantes biológicamente femeninas y la única faux reine en haber completado el curso, aunque no siente particularmente que los hombres de la clase hayan adquirido un entendimiento real sobre el género opuesto.

“Obviamente no es lo más fácil del mundo caminar en tacones si nunca lo has hecho antes, pero siento que esas cosas son muy triviales en muchos sentidos”, afirmó. “Como una mujer, tienes muchas cosas con las que tienes que lidiar todos los días –por ejemplo, las mujeres tienen que lidiar con que les chiflen a diario, y muchos hombres, especialmente los hombres heterosexuales no entienden porqué eso es un problema”.

Rápidamente añadió “pero estoy segura que todos los hombres en mi clase son gays, o por lo menos bisexuales. No había ningún hombre heterosexual en el grupo, entonces ellos de por sí, tienen una lista entera de cosas con las que tienen que lidiar, en términos de género y sexualidad. Siento que estaba tratando de aprender lo que más podía sobre sus experiencias, al mismo tiempo que ellos aprendían sobre ser mujer.

Dasani C. Waters es una de las únicas estudiantes con experiencia previa como intérprete travesti. En su adolescencia y a principios de sus 20 años se volvió amiga de un grupo de travestis del nororiente de Arkansas y empezó a subirse al escenario con ellos. “Era algo divertido y que me entretenía, pero nunca pensé que se podría volver una carrera, hasta ahora”, dijo Dasani.

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Después de una audición muy exitosa la semana pasada está trabajando medio tiempo en un club de travestis de la zona. “El club dijo que podría trabajar con ellos según mi horario de clase, y balanceando con mi otro trabajo, también”.

HanniBelle Spector.

A continuación tenemos a HanniBell Spector, adornada con un collar de perlas rosado brillante y una peluca rubia gigante. Cuando le pregunté que si algunos de sus familiares estaban en la audiencia, me dijo “realmente no les dije acerca del grado. Si se enteraran, simplemente sería un evento más”.

Le pedí que me explicara. “Estoy segura que tendrían muchas preguntas, como si lo que quiero es ser una mujer, y cosas así. Creo que tendrían que familiarizarse con la idea. Me he encontrado con mucha resistencia de su parte. Son un poco ignorantes acerca de lo que esta vida significa”.

Eileen Dover (derecha).

Eileen Dover nunca se había presentado en un escenario de ninguna clase. “En mi primer día de clase todos nos sentamos en una mesa y nos presentamos y contamos un poco sobre nuestras vidas. Me di cuenta de que muchos en la clase tenían, por lo menos, algo de experiencia en teatro –aunque haya sido una obra en el colegio o algo por el estilo–”, dijo.

“Yo nunca había estado en nada. Toda esta vida artística era completamente nueva para mí. Definitivamente fue aterrador”.

LiberRaunchy.

LiberRaunchy, la segunda graduada biológicamente mujer. Supo que quería inscribirse a la academia desde el momento en el que se enteró de las clases. “Es que había tanta variedad y es algo que he querido hacer durante tanto tiempo”, dijo, “pero realmente no hay mucho espacio para otro tipo de representaciones en el mundo travesti”.

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El personaje “salió de un estilo pomposo y andrógeno de Luis XIV o Luis XV… y no es travesti. Creo que muchas veces, cuando la gente ve algo andrógeno piensa más en algo como David Bowie. Piensa en un hombre que tiene más cualidades masculinas que las cualidades femeninas rosadas y brillantes… a través de este personaje, estoy tratando de imaginarme lo andrógeno desde una cualidad casi prepuberta, como si se pudiera jugar con el género de alguien que no tiene género, o con un infante que todavía no ha desarrollado su género”.

A través de la clase, LiberRaunchy también pudo superar algunas cuestiones de género que lo habían confundido a través de su vida. “Cuando estaba creciendo, solía hacer algunas cosas de travesti antes de que supiera qué era un travesti. Me vestía como niño y hacía cosas para tratar de borrar o esconder mi género. Y solía pensar ‘de pronto se supone que tengo que ser un niño’, pero he madurado y siento que es algo que va más allá del género. Realmente no soy niño ni niña. Siento que es algo más sobre el pre y post género de alguna manera.

Para clarificar todo eso, me contó una historia:

“Cuando era pequeño, estaba en un concurso de castillos de arena en un campo de verano. Y decoré mi castillo con las cosas más hermosas que encontré en la playa, que eran unos pescados secos de color plateado. Cuando las otras niñas vieron lo que había hecho con mi castillo, dijeron algo como ‘¡qué asco! Está cubierto de pescados muertos’. No se me había ocurrido que había construido un castillo lleno de pescados muertos. En mi cabeza, solo era algo que le daba belleza”.

“Y aunque sabía que se estaban burlando de mí, no me importaba. Siento que la academia es una experiencia similar. Me voy a subir al escenario a hacer algo extraño. De pronto nadie lo va a entender y van a decir algo semejante a ‘¡qué asco, una pila de pescados muertos!’. O de pronto la gente lo va a ver desde mi perspectiva y va a pensar que aquí hay algo muy hermoso, aunque también haya algo extraño y grotesco”.

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