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Selfies yihadistas: a los extremistas les encantan las redes sociales

Durante las últimas semanas, los combatientes extranjeros del EI y la Brigada Muhajireen, han estado ocupados posteando fotos en Instagram, Facebook y Twitter, en un esfuerzo por dar publicidad a su causa.

Tras ser expulsado públicamente por el líder de Al Qaeda Aymann al-Zawahiri ydecapitar accidentalmentea un combatiente de uno de sus principales aliados en Siria, podríamos decir sin miedo a equivocarnos que, durante las últimas semanas, el Estado Islámico de Irak y el Levante ha sufrido bastantes golpes en su campaña de relaciones públicas. Así que, como todo grupo de extremistas militantes que se precie, están más que dispuestos a limpiar su imagen. Desgraciadamente, los medios de comunicación tradicionales no son una opción, dada la política del EI de secuestrar periodistas, así que han recurrido, como muchos otros antes que ellos, a las redes sociales.

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Durante las últimas semanas, los combatientes extranjeros del EI y su subgrupo, la Brigada Muhajireen, han estado ocupados colgando fotos en Instagram, Facebook y Twitter, en un esfuerzo por dar publicidad a su causa y ganar más adeptos a la lucha siria. Sus fotos ofrecen un retrato fascinante y curioso de las entrañas de uno de los grupos militantes más temidos y menos comprendidos.

En teoría, la Brigada Muhajireen es un colectivo independiente del EI, pese a que algunos analistas lo consideran el frente del grupo yihadista, y las pruebas en las redes sociales parecen corroborar esta idea.

Esta imagen muestra al combatiente británico Ibrahim al-Mazwagi junto a Omar Shishani, un checheno de Georgia que estuvo al frente de la Brigada Muhajireen y actualmente es comandante militar del EI en el norte de Siria.

Al-Mazwagi murió en combate el pasado febrero, a la edad de 21 años. Este es un collage que hicieron para honrarlo como mártir junto con sus otro camarada caído, Abu Qudama.

Dos mártires británicos recientes: Choukri Ellekhlifi, de 22 años, y Mohammed el-Araj, de 23. En la foto, ambos aparecen en un café de internet de Atmeh, una ciudad fronteriza de Siria bajo el dominio del EI. Después de su muerte, otro combatiente británico escribió estas palabras en Facebook como tributo a el-Araj:

«Este hermano no necesita presentación. Los que lo conocían sabían que siempre trabajaba para su gente. Tenía los mejores modales, ¡vino con un hermano y dejó este mundo con él! Eran los mejores de su clase y en un mes ya estaban graduados como comandos y enseñando a otros. Los dos se casaron y a la semana dejaron a sus mujeres y se fueron fi sabilillah, porque no podían estar parados con la Ummah en este estado. Fueron implacables contra los infieles y humildes con los que respiraban La ilaha illa Allah. ¡No se molestaban en discutir con un musulmán aunque tuvieran razón! ¡Wollahi destacaban de entre los mejores de nosotros en la yihad! Que Alá todopoderoso, el infinitamente sabio, el magnífico, señor de todas las cosas, rey de reyes, acepte todos sus esfuerzos, perdone sus pecados, nos permita reunirnos con ellos, mantenga íntegros a los que han dejado atrás, nos mantenga firmes ante la haqq. ¡Que obtengamos SUS placeres Allah stw hasta que ÉL, el supremo, nos mire y nos sonría! Que la paz y las bendiciones sean con el mejor de los hombres, nuestro amado muhammed s.a.w., su familia y la sahaba r.a. ¡Mi hermano philistini que nos superó hasta la línea de meta! Pronto llegaremos insha ALLAH ta'la».

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La elevada tasa de bajas sufridas por los yihadistas británicos y de otras nacionalidades europeas refuta, al menos parcialmente, las afirmaciones de los rebeldes del relativamente secularizado ELS de que el EI y sus aliados raras veces luchan contra el régimen:

Las acusaciones de que el EI prefiere combatir contra otros rebeldes antes que contra el régimen parecen haber hecho mella en el grupo, que ha respondido publicando nuevas imágenes del intenso combate de su cuenta oficial de Vimeo.

Al mismo tiempo, las cuentas de redes sociales vinculadas con Gran Bretaña hacen referencia a los combates contra el grupo del ELS Ghuraba al-Sham, quienes se han granjeado una mala reputación entre los civiles sirios por extorsión, saqueo y bandidaje.

Imagen de un lingote de oro presuntamente obtenido de «los criminales» tras el reciente asalto del EI a Ghuraba al-Sham. Posteriormente, el EI ejecutó a los comandantes del grupo, como muestra este perturbador vídeo.

El café de internet de Atmeh aparece con frecuencia en las publicaciones de las
redes sociales y es un indicativo de la relativa normalidad de la vida de los yihadistas más alejados del frente de batalla. Los combatientes británicos, en su campaña de reclutamiento, a menudo hacen alusión a la «yihad de 5 estrellas» de Siria y animan a sus compatriotas británicos que se unan a ellos mientras puedan.

Una cuenta de Facebook británica se mofa de la advertencia lanzada por la policía a las personas de las que sospechan que van a realizar un viaje a Siria:

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Más adelante, la misma cuenta se burla de la facilidad con la que los yihadistas extranjeros pueden cruzar la frontera turca para entrar en Siria:

«¿Quién cree que pueden saltar eso???… Subhan'ALLAH… 1 hora de vuelo desde Estambul, 30 minutos de coche desde hatai y pim pam pum, ya estás dentro!!!»

En la cuenta de Tumblr de otro yihadista británico aseguran que los guardias fronterizos de Turquía les facilitaron la entrada ilegal en Sitia, pese a que las autoridades turcas han negado en repetidas ocasiones haber prestado apoyo a los grupos yihadistas (las notas entre paréntesis son suyas):

«Un enorme vehículo del ejército turco apareció en la frontera que estábamos a punto de cruzar. Sobre él había montada una ametralladora, manejada por un soldado, y en el interior había otros dos hombres. Varios hermanos pensaron que ese era el fin, que íbamos a alcanzar el martirio o a ser arrestados. Sin embargo, mi corazón sentía alivio y regocijo. Nos ordenaron salir del coche y que abriéramos nuestro equipaje. Nos preguntaron si éramos jaysh al-hur [Ejército Libre Sirio] y le contestamos que no, que estábamos aquí por sadaqah y no mentíamos, ya que no queríamos saber nada del jaysh al-hur (ejército libre sirio), pues muchos de ellos son murtadūn (apóstatas).

El comandante se debatía entre mandarnos de vuelta o dejarnos cruzar la frontera, pero en cuanto nuestro conductor les dijo que era británico, sonrieron y nuestra presencia pareció inspirarles. Lo triste fue ver que sentían amor por la deen (religión / el camino de la rectitud) pro habían jurado lealtad a los tawagheet (gobernantes tiranos). Después de registrar nuestro equipaje y llevarse un par de guantes de recuerdo (no nos dieron otra opción), nos dejaron continuar nuestro camino. No podíamos ocultar nuestra felicidad, brillaba tanto en nuestras caras que provocó sonrisas en las suyas, pero hicieron que el vehículo en el que viajábamos diera la vuelta y se marchara, dejando que cruzáramos la frontera a pie».

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Una vez en Siria, la vida parecía bastante buena para los yihadistas británicos, que disponían de provisiones de casa…

Chucherías infantiles de Occidente…

Y varias casas de lujo en las que viven:

Un estilo de vida que recuerda extrañamente a las típicas vacaciones propias de los jóvenes. Y, al igual que sus compatriotas en Kavos o en Magaluf, los yihadistas británicos no tienen que soportar ninguna porquería extranjera como el tabulé o el humus, sino que comen pizza…

Y kebabs:

Tal como señala uno de los combatientes sobre el estilo de vida de los chicos:

«¡Qué bien vivimos AL-HAMDULILLAH! ¡He puesto algunas fotos de mi casa para enseñaros lo que nos ofrece Allah en la tierra bendita de shaam! Esta casa es solo para mí y tiene un dormitorio, pero las hay que tienen 5 o más dormitorios, piscina, etc. Una vez más, AL-HAMDULILLAH para ÉL, que nos ha provisto de todo aquí. ÉL sabe que me gusta un poco de Dunya en mi deen lol.»

Pero no todo es comida basura y dulces. También deben entrenarse en el uso de una amplia gama de armas entre los olivos que rodean Atmeh…

Exhibir sus pertenencias…

Y, en general, sacar el máximo partido al hecho de ser joven, despreocupado y miembro de la yihad:

«¡Tenemos internet, teléfonos, hamburguesas, piza lol, mercados, escuelas para los niños, clases para adultos, tribunales de la sharia y todo tipo de cosas!».

Aunque, como ocurre con cualquier grupo de jóvenes que conviven, a veces las bromas derivan en bravuconería:

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«Una pena que haya hombres maduros que vivan juntos y actúen como si fueran lo más. ¡Wollahi sois una broma! Me dais lástima y lo siento por vuestras esposas!».

Una de las ubicaciones comunes en las publicaciones de las redes sociales es una gran casa situada en la cima de una colina dominando Atmeh, coronada por una bandera negra del EI y que parece ser el hogar de los combatientes británicos. Aquí entrenan…

Y se relajan en la piscina.

Un lugar tan peculiar puede localizarse fácilmente mediante imágenes por satélite, lo que sugiere que o bien los yihadistas no tienen muy claro el concepto de seguridad de la información o que no temen ser bombardeados por el régimen ni rastreados por los servicios de inteligencia occidentales.

Los informes más recientes apuntan a que, acuciados por la crítica de Occidente, el Gobierno turco ha empezado a restringir el acceso a Siria a los yihadistas extranjeros, hecho que puede significar el fin de la «yihad de 5 estrellas».

Pese a ello, los mensajes para atraer nuevos reclutas hacen que unirse a la masacre de Siria parezca de lo más tentador:

«A los hermanos: ¿a qué estáis esperando? Hay un montón de armas esperando a que juguéis con ellas. Mucha comida, porque se sacrifica una oveja con frecuencia dependiendo de cuántos hermanos haya; hay muchas mujeres esperando a casarse ;), esperando a llevar la descendencia del ejército de Imam Mehdi por voluntad de Alá y aquí hay honor para los musulmanes.

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A las hermanas: ¿a qué estáis esperando? ¡La ropa de vuestros maridos espera para ser lavada! (Estoy de broma). En serio, ¿a qué estáis esperando? Aquí podéis llevar el velo sin que os acosen, no se hace daño a ninguna mujer y, si se le hace, el castigo es duro, ya que no se debe mancillar el honor de una mujer de ninguna forma. Hay muchos muyahidines deseando casarse con el carácter más cariñoso que jamás he visto, aunque luego son leones en el campo de batalla. Aquí hay huérfanos deseosos de una madre que les quiera como lo harían sus padres. Venid a la tierra del honor. Aquí se os necesita.

No solo necesitamos hombres y dinero. Necesitamos comunidades. Estamos construyendo el estado islámico. Uníos a nosotros porque se está complicando el acceso por la frontera».

Sin embargo, una a una, las cuentas de las redes sociales van silenciándose, supuestamente debido a la muerte de sus propietarios. Por ahora, los jóvenes británicos siguen viviendo y luchando en Siria, exhibiendo sus hazañas ante un público formado por amigos envidiosos y periodistas curiosos. Como señala el combatiente británico Abu Qa'Qaa en su cuenta de Tumblr en referencia al revuelo mediático que ha provocado la llegada de jóvenes voluntarios en Siria:

«Gran Bretaña publica nuestras fotos en los periódicos. No se dan cuenta de que eso infunde más ánimos para unirse a la yihad. Y no os preocupéis, porque no queremos volver nunca. :)».

Sigue a Aris en Twitter: @arisroussinos

Traducción por Mario Abad