Surrealismo y sonambulismo son los temas detrás de este nuevo videojuego inspirado, en parte, por la estética confusa del artista danés M.C. Escher y los estilos modernos de los maestros Salvador Dalí y René Magritte. El mayor contraste del surrealismo ha sido siempre la línea entre los sueños y la realidad, y la unión entre lo consciente y lo inconsciente. Es así que Back to Bed (Regreso a la Cama) sirve como una plataforma completamente inmersiva donde no solamente estudias, lees y admiras el surrealismo, sino que lo experimentas en vivo.
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Back to Bed tiene como protagonista a Bob, un narcoléptico que ciegamente navega un mundo de portales elusivos, escaleras y planos en patrones. En su camino para llegar a salvo a cama, Bob es ayudad por su subconsciente, representado como un pequeño perro guía llamado Subob quien emplea una gran manzana verde para prevenir que Bob caiga al infinito. Juntos luchan contra inocuos sombreros voladores, peligrosos y frenéticos relojes andantes y unos labios gigantes, además de otros curiosos, extraños e imposibles objetos.
Bedtime Digital Games/LOOT Interactive
El juego comenzó como un proyecto en el 2011 por estudiantes de la Academia Danesa de Entretenimiento Digital Interactivo (ADEDI). Los estudiantes crearon exitosamente una versión del juego como parte de sus estudios. Después de graduarse, Jonas Byrresen y Klaus Pederse decidieron continuar con el diseño y crecimiento del juego, así que formaron Bedtime Digital Games para realizar de manera completa el rompecabezas con elementos diseñados que ponen a prueba habilidades lógicas y creativas.Back to Bed salió a la venta el 2014 en Steam, iOS y Android después de una campaña exitosa en Kickstarter, pero no fue mucho tiempo después que LOOT Intercative, la empresa de desarrollo de entretenimiento independiente de California de Sur, los ayudará a diseñar una versión para consolas donde se pudiera apreciar todo el diseño del juego.
Bedtime Digital Games/LOOT Interactive
La versión para consola de Back to Bed debutó este año en la E3 únicamente para PlayStation 3, 4 y Vita. Se remasterizó a 1080p y 60fps con 30 niveles, así como un “modo pesadilla” para aquellos que realmente pueden terminar los imposibles niveles de este juego.
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Es cierto que hay una frustración imperante, pues cada nivel incrementa su complejidad, demandando mayor velocidad y sofisticadas habilidades para resolver problemas. Pero al final, todo termina por la oportunidad de explorar un mundo donde nada hace sentido—y no debería.
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