FYI.

This story is over 5 years old.

seis palabras

“Se quedó dormido y comí alitas”: Tu primera vez en seis palabras

Los que digan que fue bonito, la verdad, pueden joderse entre ellos.
Ilustración por @aca_ibanez.

Artículo publicado por VICE México.

Nadie sabe, hasta que lo hace, que normalmente perder la virginidad es caótico para casi todos los involucrados. No es “bonito”, ni “tierno”, ni siquiera es un momento “iluminador”. No, no es ninguna de esas cosas y, en términos prácticos, la estupidez popular de películas de Hollywood, producciones adolescentes latinas o ciertas religiones de que la vida te cambia por completo después de penetrar o ser penetrado, es una grande, gorda y perniciosa mentira.

Publicidad

Afrontémoslo: los pocos que tuvieron buenas experiencias la primera vez que tuvieron sexo es gente que, probablemente, lo sigue idealizando al día de hoy. Tener sexo sí puede ser especial, pero aprender a tenerlo requiere práctica, constancia y un poco de concentración que no se logra hasta realmente haber entendido de qué se trata el juego y cómo es complacer a alguien mientras te complaces a ti mismo.

Con temor a terminar haciendo una investigación que me haga sonar como un Jordi Rosado millenial, le pedí a amistades y desconocidos que me contaran, sin velos ni adornos, cómo fue perder su virginidad, aquí sus respuestas:


“Fue doloroso, extraño pero muy cagado”. Mariana, 24 años.

“Hasta el culo a las 7am”. Luis, 26 años.

“Vergonzoso, doloroso, se equivocó de lugar”. Adriana, 22 años.

“En un antro y sin condón”. Sergio, 25 años.

“Su mamá me la vio parada”. Gilberto, 30 años.

“Estaba en mis días y alcoholizada”. Rebeca, 24 años.

“Mis primos me pagaron una prostituta”. Irving, 29 años.

“Terminé masturbándome mientras él dormía profundo”. Susana, 20 años.

“De la chingada, me dolió cabrón”. María Fernanda, 30 años.

“Yo: ¿qué haces? Él: uuh. Yo: -o-”. Ximena, 25 años.

“No fue con el género correcto”. Sebastián, 26 años.

“Crush alcoholizado, sangre y cero orgasmos”. Daniela, 26 años.

“Se quedó dormido y comí alitas”. Montserrat, 24 años.

“Él feliz, yo no sentí nada”. Daniela, 25 años.

“Despedida de soltero, prostituta, amigos, pedísimo”. Sergio, 25 años.

“En una azotea con zapatos puestos”. Aida, 21 años.

“Abajo de un piano. Muy incómodo”. Ana, 23 años.


Sergio perdió su virginidad en Instagram.