Ideas para una cena navideña sin sacrificio animal

Tal vez una de las mejores cosas que tiene diciembre es poder darse la libertad de comer desenfrenadamente y sin remordimiento. La cúspide de la gula y de la comida en abundancia llega la noche de la Navidad, en Nochebuena. Pero el magno evento no es siempre sencillo cuando uno es vegetariano o vegano, especialmente si la cena es con tíos, abuelas y primos apasionadamente carnívoros.

Afortunadamente, para los que han decidido sacar la carne de su dieta —y los lácteos o cualquier otro producto animal—, cada vez existen más opciones en Navidad para no tener que pasar la nochebuena comiendo puré de papa y ensalada.

En Bogotá, por ejemplo, donde cada vez son más los restaurantes veganos, se encuentra una amplia variedad de cenas navideñas veganas que se venden con anticipación y que en algunos casos contienen hasta siete preparaciones distintas. También es cada vez más la gente que las busca y las compra.

“Durante estos años la persona que viene y pide una cena navideña, pide tres al siguiente año porque su familia quiso probar y al final no alcanzó. Entonces se lleva la suya, y una o dos más para compartir porque sabe que le van a pedir”, dice Radha, una de las propietarias de Maha, un restaurante vegano en Chapinero fundado hace 10 años. De hecho, cuenta ella, la idea de hacer las cenas navideñas nació porque ella y su esposo eran los únicos vegetarianos en su familia y saber qué comer en la noche de Navidad era siempre un problema. Ahora, dice, hay familias enteras que no son veganas que le piden la cena para todos.

Lo mismo dice Lorena, propietaria de Oki Market, otro restaurante vegano que lleva cinco años funcionando en Cedritos. Según ella, fueron más de 150 cenas veganas las que vendió en la Navidad pasada y no le sorprende que el número vaya en aumento pues, dice, son cada vez más las personas veganas y las que optan por una dieta vegana buscando una alimentación más saludable. "Es un día muy familiar y hay familias que se ponen de acuerdo para comer todos vegetariano para Navidad. Además, hay muchas familias veganas, cada vez hay más personas veganas en Bogotá", dice.

Lo que también dicen las dos es que cocinar vegano, contrario a lo que muchos nos imaginamos, no es difícil ni caro. Los ingredientes son en gran parte los mismos que se usan en cualquier otra preparación con carne, los que se encuentran en cualquier supermercado, lo único que hace falta es quitarse la idea de que es complicado y costoso.

Si usted es vegana o vegetariano y está cansado de que le den papa y arroz en Navidad, o está cansada de prepararse lo mismo cada diciembre, aquí le dejamos dos ideas de recetas veganas para su cena navideña. Y si le da pereza cocinar, al final de esta nota le dejamos los datos de cómo conseguir una cena navideña vegana completa para usted y su familia.

Ingredientes:

Receta para seis personas:

1 libra de papa pastusa
2 cucharadas de aceite de oliva o de coco
2 cucharadas de frutos secos pulverizados
1 cucharada de orégano en escama
100 gramos de remolacha cocida
100 gramos de arveja cocida
100 gramos de zanahoria cocida
60 gramos de quinua cocida
2 cucharadas de Veganesa (más adelante le explicamos qué es esto)
Brotes de alfalfa, para decorar
Sal y pimienta al gusto

Una vez esté cocinada la papa, tritúrela hasta volverla puré. Añada el aceite de oliva para que tenga una consistencia más suave. Agréguele los frutos secos triturados (que pueden ser nueces, almendras, etc). Triture el orégano con las manos y luego agrégueselo solo a la mitad del puré. El propósito de esto es tener dos tonalidades distintas para las dos capas de papa que lleva el plato.

En un recipiente mezcle la arveja, la zanahoria, la remolacha y la quinua, todo previamente cocinado. Lo más recomendable es cocinar la arveja con un poco de bicarbonato para que no pierda su color, y la zanahoria cocinarla apenas por unos minutos para que quede al dente. Deje un poco de remolacha y de quinua aparte si quiere decorar el plato al final.

La veganesa es la versión vegana de la mayonesa hecha a base de tofu. Se hace con tofu licuado, aceite, sal y pimienta. En cualquier caso, en Maha se puede pedir por encargo, pero es una mezcla que dura máximo un mes al no tener preservantes. En este punto hay que mezclar las dos cucharadas de veganesa con la zanahoria, la arveja, la remolacha y la quinua.

Antes de armar la causa es importante engrasar con aceite de oliva las paredes del molde para que la mezcla no se pegue. Primero, ponga en la base una capa del puré de papa sin orégano, luego ponga una capa de la quinua y los vegetales y aproveche para adornar por los lados con unos pedazos más de remolacha. Por último ponga una capa del puré de papa con orégano. Si no tiene molde puede hacerlo con un vaso, un pocillo u otra cosa tubular.

Retire el molde y adorne con trozos de remolacha, la quinua y los germidados de alfalfa. Y un plus: el plato también se puede hacer reemplazando la papa pastusa por papa criolla o por yuca o por batata.

Ingredientes:

Receta para cuatro personas:

1 libra de tomate chonto
¼ libra de papa criolla cocinada
¼ pimentón picado
½ libra de mazorca desgranada
3 hojas de albahaca fresca
50 gramos de maní picado
Queso vegano de su preferencia (en este caso queso de papa)
½ cucharadita de cúrcuma
1 cucharadita de paprika
4 cucharadas de aceite vegetal
Sal al gusto
Cilantro o perejil

Corte los tomates por mitades y con una cuchara vaciélos, sáqueles el corazón y las pepas.

Pique el pimentón en cuadros y mézclelo con el maní picado.

En un sartén caliente con aceite vegetal (no aceite de soya) mezcle el pimentón y el maní con la mazorca desgranda, la paprika, la cúrcuma y la quinua previamente cocida. Es recomendable que la quinua esté cocida muy poco, casi cruda, para que sea crocante y no se deshaga con el puré de papa.

Triture la papa criolla cocinada hasta hacerla puré, agregue el perejil y mézclelo y luego agregue el pure al sartén con el resto de los ingredientes y mezcle.

Parta las hojas de albahaca en tiras y agréguelas a la mezcla lejos del fuego. Luego rellene los tomates con la mezcla.

Encima ponga una capa del queso vegetal de su preferencia, en este caso el escogido fue un queso de papa. Ponga los tomates en el horno hasta que estén blandos, máximo 15 minutos a 200º. Si no tiene horno puede hacer un horno casero con un sartén hondo a fuego medio cubierto por otro sartén encima. La idea del horno es que el queso se gratine y el tomate se deshidrate un poco, así que 10 minutos pueden ser suficientes.

Los tomates rellenos pueden ser un principio en la cena o incluso un abrebocas.

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Si prefiere pedir la cena navideña ya hecha la puede ordenar en Maha, acá, o en Oki Market, acá.