Disidencia controlada. Entrevista a Anarquía Vertical

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Anarquía Vertical es un canto al movimiento agresivo, el insomnio febril, la carrera, el salto mortal, la bofetada y el puñetazo. Están en guerra con el inconformismo conformista y son un grupo claramente condenado a la incomprensión, la implosión, y a ser carne de cotilleos y especulaciones varias. 'Guerra Higiénica' es su primer 7".

NOISEY: Para empezar me gustaría comentar un poco por encima el concepto de "Guerra higiénica" a la que hace alusión el título del 7" ¿Una especie de solución final en versión anarquista?

ANARQUÍA VERTICAL: En la tradición hindú de las eras, al final del Kali Yuga -la que teóricamente es la última era antes de que la rueda vuelva al punto de partida- el decimoprimer avatar de Vishnu vendrá para acabar con los impuros. Nosotros a eso lo llamamos "Guerra Higiénica" porque es algo que aparece en algunas tradiciones políticas recientes y es una forma de demostrar como los conceptos superiores eternos se mantienen a lo largo de la historia y como siempre es el conflicto humano, la tensión vital, lo que lleva a la superación. Para el nosotros eso es lo importante, lo que en la mística musulmana se llama la pequeña yihad, la guerra espiritual, o como dice Coàgul, "la guerra major al enemic interior": dejar de lado los vicios y las bajezas que el sistema intenta grabarnos en el ADN a base de estímulos banales, hipersexualización y hedonismo barato. Es el combate eterno, lo heroico en lo cotidiano, es otro tipo de violencia.

Si pudiese materializarse no creo que fuese una solución final (anarquista o de cualquier tipo) porque no creemos que haya un "fin". Sería más bien una especie de revolución permanente, como las campañas inacabables de Mao pero sin ir a cazar pajarillos ni mariposas.

¿Y la 'Anarquía Vertical'? ¿Existen las jerarquías aún cuando no hay líderes?

Creo que hay mucha gente que cree que es una especie de broma o provocación y mucha otra que lo ve como un oxímoron, pero para nosotros la anarquía vertical es lo opuesto a la anarquía ácrata. Hoy en día los que se autodefinen como "ácratas" creen que eso hacen referencia a que no existe el poder ("a-kratos"), pero realmente para griegos y romanos (que fueron quienes usaron el término originalmente y algo sabían de lo que decían) hace referencia al dominio de las bajas pasiones sobre el hombre. Como te decía antes, lo importante es todo lo contrario y esa es para nosotros la base de la anarquía, el orden y no un caos en el que cada uno hace lo que le apetece. Eso es la anarquía vertical.

El tema del liderazgo y las jerarquías es más complicado porque el tiempo y la estupidez han deformado mucho los significados. Son algo natural que surge de manera orgánica: un líder al fin y al cabo no es más que una persona que, en base a unas circunstancias determinadas, es elegida por el colectivo para capitanear esa situación durante más o menos tiempo. Lo que los romanos llamaban un dictador. Durruti, por muchas piruetas dialécticas que hagan ahora, era un líder y era anarquista, en un momento determinado por su carisma, personalidad, poder o por lo que sea, se convirtió en quien dirigía. Si la gente aceptase que todos tenemos diferentes capacidades y que eso no es una limitación sino una invitación a desarrollarlas en plenitud, sin frustraciones ni pretender ser lo que no se es, no habría imposición. Eso es claramente imposible porque vivimos en la época del "yo quiero", "yo me siento" y no hay responsabilidad ni deber ni nada.

El 7" ha tardado mucho en salir, así que imagino que será un trabajo cuidadísimo y con una exquisita atención al detalle…

No queríamos hacer el típico artwork de mierda de las bandas de hardcore y punk; ni tíos musculados, rapados y pegándose o rompiendo algo, ni botas, ni tirantes ni ruinas ni mierdas. Oriol Roca -de Glam, Über, No Sex, Yumi Yumi Hip Hop y más- nos conoce desde hace bastante, de hecho el nombre del grupo salió hablando con él y pilló la idea de la banda instantáneamente así que el artwork no lo podía (ni podrá) hacer otra persona. Sabe perfectamente que queremos transmitir y como, y eso lo refleja todo lo que nos ha diseñado: la mezcla entre collage y una pintura minimalista muy violenta y a la vez colorida de una forma casi ridícula; es casi como un insulto en forma de disco.

Ahora acabamos de grabar un disco nuevo. Hemos vuelto a hacerlo con Dani Frutos -de Absurdo, Xm2 y ahora Ultra- y esta vez nos ha venido a echar un cable con la producción Jaume de Orden Mundial y esperamos que no tarde mucho en salir. Es algo bastante "barroco" para ser hardcore, totalmente recargado por la segunda guitarra y todo sigue igual de frenético pero con muchos solos, ruidos y efectos de guitarra.

Vuestro sonido me recuerda mucho a un grupo en concreto que no quiero mencionar porque, como criticáis vosotros mismos, el hardcore se ha convertido en un túnel de reciclaje de sonidos retro, pero a la vez establece ciertas limitaciones "de género" ¿cómo encarar la composición, entonces?

Es complicado, no te lo vamos a negar. Este último disco sea seguramente una de las últimas cosas que hagamos porque no tenemos muchas más ideas y no queremos ser una de esas bandas que siguen haciendo el mismo disco una y otra vez para justificar que siguen tocando aunque haga años que no le interesen ni a sus amigos.

Creo que la gracia a la hora de componer -hardcore o cualquier otra cosa- es tener claro que no deberías ser un refrito de nada en concreto porque simplemente nunca vas a poder repetir las condiciones de las que salió eso: a nosotros nos puede gustar mucho una u otra banda pero no queremos ser ellos, no nos creemos vivimos ni en el Detroit de 1981 ni en la Barcelona de 1986, así que directamente no lo intentamos.

Hace tiempo que la escena punk DIY de Barcelona está de moda a nivel internacional, ¿veis algún paralelismo entre esto y el progresivo engullimiento de la ciudad a manos de la burbuja turística y la gentrificación descontrolada?

Ahora que lo pienso, la primera vez que fui a un Caos a Gracia fue uno de los últimos conciertos de Destino Final y eso estaba lleno de guiris sacando fotos con analógicas y camisetas de Fucked Up, que entonces era un poco el look oficial de los punks del hype. La verdad es que nunca me lo había planteado pero tiene bastante sentido, al final y al cabo el turismo barato descontrolado lleva a gente a todo tipo de movidas, no es solo el turismo de sol, playa y discotecas; es también el Primavera Sound, el turismo pseudo-cultural para universitarios y demás, así que no es extraño que esto llegue también al punk y a la escena de Barcelona. Quizás esa sobredimensión de lo que pasa en el punk DIY local es una forma de justificar ese turismo punk, porque al fin y al cabo todo el mundo sabe que (como en casi todos los sitios) en Barcelona se salvan cuatro bandas contadas.

Sois un grupo terriblemente atípico a todos los niveles, y aunque en cierta medida servís como nexo de unión de subescenas muy diferentes, tampoco casáis netamente con ninguna, ¿cómo es ese encaje para vosotros? ¿En qué medida os sentís parte de algo o de nada?

Desde que vamos a conciertos, los que estamos en AV hemos sido los únicos que hemos ido a prácticamente todo. Aunque nuestros amigos y nuestras bandas estaban en la escena más hardcore (más "americana": AirMax en vez de botas y camisetas anchas en vez de chupas de cuero), siempre nos han gustado más bandas de la ciudad como Glam, Absurdo, Crimen de Estado u Orden Mundial (que son de Mallorca, pero como si fuesen de aquí) que la mayoría de bandas de nuestros amigos, que aunque nos gustan y nos lo pasamos bien, no nos dicen lo mismo. Así que para nosotros es normal estar en medio y tener otras referencias que quizás los colegas que se quedaron encerrados en algo mucho más concreto y ven con malos ojos el punk o cualquier cosa que salga de ahí no tienen.

Pero parte de algo tampoco creo que seamos, más bien estamos en un limbo, porque como ni tenemos muchos amigos en ninguna de las dos escenas ni somos populares. Estamos en una especie de nebulosa en la que parece que mucha gente nos vea pero no nos llame, que no es que nos moleste porque la gente que de verdad nos importa siempre nos ha felicitado por lo que hacemos, nos ha invitado a tocar y nos ha ayudado, pero vamos, es lo que hay.

El mensaje que parecéis transmitir con vuestras letras y textos varios es un poco más complejo de lo que suelen ofrecerse dentro del hardcore punk, son menos obvias y requieren de una cierta profundidad de análisis. Me consta que para algunas personas esto ha sido motivo para denunciar una cierta ambigüedad y falta de posicionamiento, y también ciertas simpatías con propuestas más reaccionarias.

No es muy difícil que sea más complejo que el resto de letras del hardcore y el punk. Hace unos meses hablaba con un reconocido punk cuyo nombre no diré para evitarle problemas, que me decía sobre este tema que lo que el más odiaba era la radioformula del punk, "estoy en mi habitación, no puedo dormir, solo pienso en la anarquía, me quiero morir", ponle una batería palera y una guitarra a lo Discharge y ya está, tendrás una horda de fieles seguidores hablando de "hardcore radical". No hay provocación, no hay debate real, no hay nada; solo se repiten los clichés y discursitos que más que autoreferenciales acabamos siendo autoparódicos. Lo peor es que la gente se cree que está haciendo la revolución cuando, aceptémoslo, no somos más que pequeñas (diminutas) burbujas de disidencia controlada. Hoy en día, los únicos que provocan y escandalizan, que es para lo que nació el punk, son Pxxr Gvng que tocan en un festival de indie y al día siguiente explota internet sobre si es moralmente aceptable o no que hagan lo que hacen. No si se harán la revolución, pero si al día siguiente los idiotas moralistas y pretendidamente intelectuales les dicen lo mismo que hace 40 años les decían a los primeros punks cuando salían con una esvástica a tocar o escupían a la gente o hacían ruido será por algo.

Cuando constatas eso, cuando te das cuenta de que no le importas a nadie, ni molestas a nadie y que ni siquiera eres un revolucionario, solo una herramienta del sistema (como todo hijo de vecino) solo te queda buscar la única revolución que se puede llevar a cabo, que es la de diferenciarse de la masa, porque al final del día a la masa la compra el sistema (llámalo becas comedor, vivienda social o llámalo como te de la gana) y cuando la gente tiene lo que quiere, se olvida de ti. Puede que estemos equivocados y puede que a veces nos pasemos de cínicos, pero bueno, prefiero ser un cínico que decir a grosso modo lo mismo que "el partido del cambio". Hay gente que a eso le molesta mucho porque tienen fe religiosa, pero lo que yo se es que estamos en el 2016 y la "victoria final" ni está ni se la espera, y todos los cuentos chinos que se han salido de ahí solo han servido para justificar la globalización total y el espejismo del progreso histórico que hoy en día es lo que sustenta al sistema, así que prefiero que me llamen lo que quieran a ser un "buenista".