FYI.

This story is over 5 years old.

Actualidad

Las bios de las redes sociales son detectores de gente gilipollas

22 · proyecto de sociologo · diseñador en mis ratos libres · dame cine francés y dime tonto · me consuela saber que Nietzsche me entendería · Albacete.

Imagen vía.

Nadie sabe muy bien por qué quienes diseñaron las redes sociales crearon esta sección, pero ahí está, coronando la parte superior del perfil de ese tío al que estas cotilleando, junto a su foto en la que aguanta una cámara de 3.000 € para que se sepa que, a parte de toda esa mierda sobre él que ha escrito, es fotógrafo, por qué es un tío muy cultivado y sensible. Ya sabéis de que tío hablo: ese tío que no deja de compartir frases pseudopoéticas o con las típicas proclamas progres adornadas con un esbozo de bandera tricolor por algún lado, el mismo tipo que está en contra de los toros pero le gusta mucho la McRib y que considera a Robe Iniesta como un poeta moderna ¡que coño! Seguramente, vosotros seáis uno de ellos.

Publicidad

Los más probable es que no hubiese nada pérfido detrás de las bios, se crearon con intenciones nobles y puras, solo se quería dejar a la gente presentase a través de una breve descripción personal. Pero como siempre ¡ay de quien confía en el ser humano! Los usuarios de las redes sociales han utilizado ese absurdo y estúpido encabezado para sintetizar sus absurdos y estúpidos pensamientos onanistas. Una visión hiperbólica de su ser que no se corresponde con la realidad: donde dice "ilustrador en mis ratos libres" realmente quiere decir que una vez hizo una cosa con el Illustrator (aunque estaba más pixelado que los juegos de Game Boy Arcade) y donde dice proyecto de sociólogo quiere decir… bueno ahí es exactamente eso, un proyecto, por qué lleva repitiendo segundo 5 años con la excusa de que el no cree en los exámenes como sistema de evaluación; una excusa de mierda que su madre le aguanta por qué es el "niño" de la casa.

Nadie sabe muy bien tampoco el propósito de ese acto masturbatorio que supone escribir una bio para una red social. No me malinterpretéis, esta bien que digas de qué trabajas, alguna cosa con la que estáis REALMENTE relacionados y todo eso, pero esta mal poner "dame cine francés y dime tonto" al lado de tu edad en números romanos. No hay ningún tipo de información útil en esa especie de haiku degenerado.

Las respuestas quizás deberíamos buscarlas en la psicología o la sociología, o algunas de esas otras "-logías" a las que todo el mundo recurre para explicar las cosas. Como no he encontrado (ni tampoco he buscado) estudios que expliquen este perturbador fenómeno y además no me cae bien la gente que cita estudios, me voy a basar en la mitología hindú, que me parece una fuente de conocimiento tan buena como cualquier otra, para explicar el por qué de este despropósito.

Publicidad

Resumiéndolo rápido: según los hindúes estamos viviendo en la cuarta era de la humanidad, el Kali Yuga, una edad dominada por las bajas pasiones y la degeneración humana, que acabará cuando llegué el último avatar de Vishnu y se cargue a todos los impuros con una espada (¿a que ya no os parece tan guay y open minded el hinduismo?).

Si miramos al mundo que nos rodea vemos que esta idea no es tan loca: ISIS cortando cabezas en streaming, sigue existiendo La Razón, VICE no deja de crecer, y en lo que ahora nos importa, la gente gasta tiempo de su vida en sintentizar sus personalidades de mierda en frases rápidas a ver si así (de refilón y sin muchos detalles), sus vidas pueden parecerles interesantes a alguien. Las bios representan la culminación definitiva del hombre del Kali Yuga, poner en un pedestal la degeneración humana y la estupidez para que todos puedan verla "¡eh, eh, miradme!, ¡se quien era Bela Lugosi!, ¡eh joder, miradme!"

Cliché tras cliché, pedantería y pseudointelectualidad a partes iguales. Es esa la forma que tiene de autorepresentarse una juventud que ha crecido con los gastos pagados por un estado-niñera que se ha pasado los últimos 30 años diciéndole a todo el mundo que era un ganador, que todo el mundo valía para todo y que todo el mundo podía ser lo que quisiera, dando como resultado la generación (mejor dicho generaciones) más hedonista y plástica que recuerda la historia reciente de nuestro país. El mundo le debe algo a esa gente, el mundo tiene que valorar lo especiales y diferentes que son, por eso tienen que imprimir su ego en la retina de todo aquel que ose abrir uno de sus perfiles.

Pero el mundo, el de verdad, no funciona así. El mundo de verdad te mete en dos trabajos por 500 euros al mes y te da una palmadita en la espalda mientras te tienes que conformar con gastar todo tu potencial en un clínex ya acartonado mientras ves a Audrey Bitoni montándoselo con Johnny Sins y tu madre te grita desde la cocina que las putas lentejas se están enfriando, así que te abres una cuenta y te recreas en todo eso que crees que eres mientras el mundo real sigue girando.

En ese mundo eres ingenioso, culto y si te sabes echar bien una selfie, incluso guapo. Por eso tienes una bio y por eso eres un gilipollas, pero si nuestro amigos de la India tienen razón, todo acabará más o menos pronto y no habrá más bios de mierda que aguantar, ni más "tuits ingeniosos", ni más memes, ni más artículos como este.