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Música

Según Father John Misty, el fantasma de Lou Reed le pidió borrar su cover de Taylor Swift

Según él, Lou Reed se le apareció en un sueño, y le dijo: “Borra esos tracks, no invoques a los muertos, no soy tu juguete”.

Desde que Ryan Adams sacó hace unos días su álbum cover a 1989, las cosas se han puesto extrañas. Primero, Father John Misty lanzó un cover del cover de Ryan Adams, pero inspirado en el Velvet Underground. Para tratar de ponerlo más claro: Father John Misty le hizo un cover al cover que Ryan Adams le hizo a Taylor Swift, pero al estilo de Lou Reed. Sin embargo, curiosamente, después de estar un rato en internet, los tracks desaparecieron de SoundCloud. Lo que pasó fue que, según lo que Father John puso en su Facebook, Lou Reed lo visitó en un sueño, en el que la leyenda de Nueva York le dijo: “Borra esos tracks, no invoques a los muertos, no soy tu juguete”.

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Así que ahí está la explicación. Y, ¿quiénes somos nosotros para burlarnos cínicamente de ella? Sin embargo, Father John Misty creyó necesario subir ayer a Facebook una explicación a detalle de su sueño, la cual nos hace dudar aún más de su cordura, y que al mismo tiempo es tan minucioso que llega a ser somnoliento:

“Tuve un sueño bastante raro en donde abruptamente despertaba a las tres de la mañana de hoy. Me encontraba caminando sin rumbo en un vecindario de Nueva Orleans que creí que no existía, resulta ser un lugar recurrente en mis sueños. Mi amigo de la infancia Brian Kawamura estaba diciéndome que aún debía $700 dólares de la renta de la cancha de tennis cuando el psicoanalista francés Jacques Lacan apreció de repente frente a mí y no paraba de repetir, ‘La única cosa más loca que un campesino que cree que es el rey, es un rey que cree que es el rey’. Luego me colocó una de esas coronas de fiesta de Burger King en la cabeza y de las nubes comenzó a escucharse algo parecido a “Switched on Bach” pero en una versión de “Ode To Joy”. Una multitud que se había formado a mi alrededor comenzó a cantar mientras las lágrimas salían de sus ojos. La multitud obviamente estaba hipnotizada y asumí que si me arrastraba discretamente lejos de ahí nadie lo notaría. La tierra se convirtió de pronto en una especie de banda caminadora y a pesar que las locaciones cambiaban (La Gran Muralla China, un Mc Donalds en donde festejé mi tercer cumpleaños, el pueblo de Michael Haneke en The White Ribbon, el restaurante Vignola en Rockville) “Ode To Joy” y la multitud permanecían alrededor de mí”.

“De repente ya era hora de la prueba de sonido, a la que iba tarde, por lo que Barack Obama me ofreció un aventón en el Air Force One. Y me dijo que necesitaba urgentemente asesoramiento con respecto a decisiones políticas importantes, y fue así como pasamos el día en Hawaii jugando basketball, acariciando a sus perros, jugando golf, ya que por fin la ansiedad se apoderó de mí, le dije que realmente necesitaba llegar al soundcheck así que ya era hora de discutir la forma de gobierno del mundo libre. Para ese momento él se había convertido en la forma obscena de mi padre y me dijo, 'Tengo un mandato para ti, hijo: Disfruta la vida. Es bajo este mandato que todo está gobernado. Esa es la verdadera tiranía; la fuerza igualadora que nos une a todos'. Salté del avión y aterricé en la cima de una burbuja brillante y masivamente rosa que se extendía por millas y millas, cubriendo ciudades enteras, y yo tenía que seguir tragando clorofila porque la cosa estaba emitiendo niveles demenciales de EMF, por lo que mi boca y manos estaban manchadas de color verde oscuro ".

“Debajo de la burbuja podía ver miles de rostros conocidos, entre ellos estaba Lou Reed en una pasarela esposado a supermodelos que tenían bebés adoptados esposados a ellas y Lou dijo, “Borra esos tracks, no invoques a los muertos, no soy tu juguete. La colección de almas es pasatiempo costoso.” Luego desperté.