El sureste mexicano ha sido cuna de legendarios caciques y de historias de depredación que harían palidecer a cualquier dictador del Congo. La historia del ex gobernador de Tabasco es sólo una de tantas que se desarrollan en México, donde recién se revisan las cuentas públicas en estados con casi cien años de gobierno de un solo partido: el PRI.
Cuando supo de su eminente regreso a México para declarar en el proceso que se le sigue por el millonario desfalco, Andrés Granier Melo (que gozaba de cabal salud en su auto exilio en la Florida norteamericana), súbitamente enfermó. Ese mismo cuadro clínico es común entre los políticos mexicanos que a la hora de tener que enfrentar la justicia por los delitos que cometen, se ven forzados a regresar a México. Ahí tenemos el caso de Elba Esther Gordillo, quien al verse vestida con el uniforme de reclusa en la prisión de Santa Martha Acatitla en el Distrito Federal, sufrió un colapso que la mantiene con cuidados médicos intensivos. Ahí comprobamos que la señora que parecía estar hueca por dentro y no tener corazón vivía casi de milagro al haber donado la mitad de sus órganos. Tal vez ahora que al ex gobernador de Tabasco le giraron dos órdenes de aprehensión en su contra, sus abogados le manejaron la noticia con cuidado.Ayer, Andrés Granier, ex gobernador de Tabasco, fue trasladado al Reclusorio Preventivo Oriente acusado de realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita y fraude fiscal por un supuesto desvío de dinero público durante su administración (2006-2012). Granier fue llevado al penal, donde será presentado para responder por los delitos de operación con recursos de procedencia ilícita y defraudación fiscal. Así enfermito o como esté tendrá que declarar. Ya no podrá declarar por teléfono o telegrama como lo vino haciendo desde su cama de diez mil pesos la noche y podría sólo alcanzar una pena máxima de hasta cinco años.
Los arreglos políticos en Tabasco datan desde antes de la conquista. Los caciques prehispánicos pactaron con los españoles las mejores vías para ponerle en la madre el enérgico régimen central del imperio azteca así que los tabasqueños saben su negocio. Desde Roberto Madrazo Pintado, no ha habido un solo gobernador de Tabasco que no haya sido tentado por la corrupción a gran escala. Manuel Andrade Díaz, antecesor de Granier en el cargo y discípulo de Madrazo había sido solo la punta del iceberg que flotaba en los pantanos de Centla. La corrupción descubierta por el ex priista, Arturo Núñez no se formó en un solo sexenio, tal vez el linaje de corrupción familiar llegué hasta aquellas épocas donde Hernán Cortes cortejó a los caciques mayas tabasqueños y así poderlos sumar a su causa.Los caciques regionales como Andrés Granier han representado un dolor de cabeza para la administración del presidente Enrique Peña Nieto, quien no sabe qué hacer para acotar su poder. Desde el año 2000 con la llegada del Partido Acción Nacional a la presidencia, los gobernadores de las entidades federativas en México se dedicaron a acumular poder y transferirlo preferiblemente a alguien que pudiera protegerlos de pisar la cárcel. Con el escarmiento público a Gordillo y Granier, casos como los de Fidel Herrera en Veracruz y Humberto Moreira en Coahuila, puedan estar no muy lejos de merecer un correctivo en cuanto a sus cuentas públicas y deudas exorbitantes.Así, Andrés Granier pasa a la historia como el pendejo que tuvo que pagar la cuenta de los demás aunque los excesos de sus colaboradores, su familia y hasta del ex gobernador mismo cuando agarraba la peda ayudaron bastante.Menciones Honoríficas:Margarita Arellanes Cervantes, alcaldesa de Monterrey. Noble gesto entregar la ciudad a Cristo en vez de al crimen organizado pero para fines prácticos…mmm, no.
Enrique Peña Nieto en la reunión del G8: VICE fue el medio que dio la primicia: EPN será por tercer año consecutivo, el pendejo del año que sigue. Y sigue sin competidor.¿Y tú por quién votas?@RomanCoteraAnteriormente:Gerardo Saade MurilloLee más en nuestra columna El pendejo de la semana.
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