Rory, de la serie ‘Gilmore Girls’, es una hipócrita, desagradecida, mimada y mediocre

En mi depresión después de las elecciones de Estados Unidos, estaba buscando cosas que me hicieran sentir mejor: pedir mucha comida y comérmela toda en una noche viendo las siete temporadas de Gilmore Girls.Para prepararme para el reestreno de la serie, la temporada llamada A Year in the Life, que se estrena el viernes en Netflix. Pero mientras veía el programa de televisión, la vieja serie que transmitían todos los días en la época en que ver televisión era otra cosa, cuando la vi, caí en cuenta de algo que a la mayoría de la gente se le olvida sobre Rory Gilmore, la hija de Lorelai y la más joven de las dos mujeres: ella realmente es terrible. Lo siento, sé que duele. Yo luché contra ese impulso mientras veía episodio tras episodio. El personaje que interpretaba Alexis Bledel era un modelo a seguir en los 2000 para todos aquellos que amábamos los libros, la pizza y tomábamos grandes cantidades de café. Ver como dejo su pequeño pueblo en Stars Hollow para seguir su sueño de estudiar en una universidad Ivy League como Yale era inspirador. Pero una vez que se te pasa la fiebre de la nostalgia y dejas de alabarla, te das cuenta de que Rory es terrible. Vean porque:

Todos sabemos que Lorelai (Lauren Graham) no es cualquier mamá: es cool. Pero la dinámica de ser el mejor amigo de tus hijos puede hacer que los límites se difuminen. Rory, por ejemplo, se aprovechaba constantemente de ese hecho. Sea porque invitó a sus abuelos a la graduación de Lorelai ––quien no quería verlos–– o porque fue a la tienda de Anna Nardini después de que específicamente su mamá le pidió que no lo hiciera. ¿Límites? ¿Qué es eso? No sólo no los respetaba sino que era egoísta e hipócrita. Hacía pataleta cuando su mamá no seguía sus consejos amorosos: ¿se acuerdan cuando le dijo a Lorelai que fuera más despacio con Christopher (David Sutcliffe) en la séptima temporada, y después se puso brava cuando se casaron en Paris? Se pone brava con Lorelai por sus decisiones en el amor, mientras que ella ha tomado decisiones muy cuestionables sobre su propia vida amorosa.

¿Ayn Rand? ¿El Código Da Vinci? ¿George W. Bushism? Para alguien que supuestamente es muy noño, esta es una lista de libros que no pasan de ser los que ponen a leer en cualquier colegio gringo.

Jess (Milo Ventimiglia) lo medio entiendo. ¿Pero Dean (Jared Padalecki)? ¿Logan Huntzberger (Matt Czuchry)? Su primer error fue salir con un hombre que su apellido suena como el nombre de un frasco caro de salsa de tomate. Pero entre sus errores más destacables también está el hecho de que tuvo sexo con un hombre casado y tuvo relaciones inestables con hombres muy coquetos que le hicieron mucho daño.

Entiendo que uno quiere estar preparado para una reunión así, pero su abuelo se esforzó por conseguir esa reunión, debería estar agradecida. Nunca me sentí menos identificada con Rory y Lorelai que cuando se fueron de Yale porque no podían creer que el abuelo se hubiera atrevido a conseguir esa reunión para asegurar que Rory entrara a una universidad Ivy league.

¿De verdad? ¿No conoció a nadie en la universidad? ¿Se tenía que conformar con Dean, su exnovio del colegio que tiene un mal corte de pelo? ¿Para perder su virginidad? Además, una estudiante de Yale que duerme con un hombre casado y se tira su vida en el proceso puede ser una heroína apropiada para una novela de Ayn Rand, pero una opción rara para un programa de televisión diseñado para sentirse bien .

Que te digan que no sirves para el trabajo de tus sueños duele mucho. Pero seamos sinceros: Mitchum (Gregg Henry) tenía razón. Mientras que todos sus amigos se la pasaron buscando pasantías todo el verano, Rory se fue a Europa con su abuela. Cuando finalmente consiguió un trabajo que no fue gracias a su novio, se la pasó jugando a ser la asistente personal y la amiga de todo el personal, en lugar de salir y buscar historias originales para escribir.

Uno de los aspectos más irritantes del personaje de Rory es su incapacidad para reconocer lo privilegiada que es. A Rory y Lorelai siempre les ha gustado creer que son de una clase social baja, por el esfuerzo que hizo Lorelai por distanciarse del dinero de Richard y Emily a través de los años, pero no tienen ningún problema en pedirle dinero a la familia cuando es necesario: para pagar por su colegio, tener un carro nuevo, pagar la matrícula de Yale, pagar los viajes a Europa. La lista sigue.  Cuando se acabó la serie, Rory estaba yendo a cubrir la campaña presidencial del senador Barack Obama, después de que le dijo a sus abuelos que no podía aceptar el apartamento que le dieron para vivir en Nueva York porque no la aceptaron para hacer su practica en el New York Times. Ella y su mamá estaban tan convencidas que ni siquiera consideraban la idea de que Rory no recibiría la prestigiosa beca: simplemente asumieron que ella lo conseguiría "porque ella es Rory".

¿La intuición de Mitchum sobre Rory de "no tener lo que se necesita" para ser una periodista notable era verdad? ¿Rory ha trabajado duro para lograrlo con los malos sueldos de un periodista normal durante la última década, o se confió en el dinero de su abuelo para que le financiaran su futuro? Rory le dijo que no a Logan cuando le propuso matrimonio porque quería ser independiente, pero es poco probable que alguna vez se quiera divorciar de los privilegios similares que ha recibido de sus abuelos, o de su papá increíblemente rico. Es como cuando Logan le recordó a Rory en la séptima temporada: "Despierta, Rory, te guste o no, eres uno de nosotros, fuiste a un colegio privado , estudias en Yale, tus abuelos construyeron un maldito edificio de astronomía con tu nombre". El estilo de vida privilegiada con el que Rory se siente tan incómoda es lo que la hace ser quien es. Es una periodista hipócrita, desagradecida, mimada, mediocre, con mal gusto en los hombres y mal gusto en los libros.