FYI.

This story is over 5 years old.

Noticias

El agresor de Virginia había recibido orden de sus jefes de buscar ayuda médica

Memorandos internos obtenidos por el diario The Guardian revelan que Vester Flanagan, también conocido como Bryce Williams, había tenido varias discusiones en la WDBJ17 en las que su comportamiento había hecho sentir a sus colegas "extremadamente...

El hombre que disparó y asesinó a dos antiguos compañeros mientras transmitían una emisión en vivo, tenía una larga historia de problemas de comportamiento en el trabajo.

Vester Flanagan, quien asesinó a la reportera Alison Parker y al camarógrafo Adam Ward la mañana del miércoles y que luego se suicidó, había recibido la orden por parte de sus jefes, en la estación de televisión WDBJ7 en Virginia, de buscar ayuda médica tras una serie de discusiones con algunos colegas, según unos memorandos internos obtenidos por el diario The Guardian.

Publicidad

Flanagan había hecho que sus colegas se sintieran amenazados y había actuado de forma poco profesional durante varias discusiones con fotógrafos sobre cómo deberían ser filmados algunos segmentos, según reportó el diario, lo que llevó a que se hicieran advertencias oficiales y finalmente su despido en febrero de 2013.

Una circular de mayo 31 de 2012 subraya tres confrontaciones, dos de las cuales Flanagan discrepó con los fotógrafos sobre la forma en que estaban eligiendo filmar, enojándose en frente de los entrevistados; y otra en la que "perdió lo estribos" dentro de una camioneta de la estación, haciendo que sus colegas se sintieran "amenazados y extremadamente incómodos".

En una circular de julio 30 de 2012, el entonces director de noticias de WDBJ17, Dan Dennison, le dijo a Flanagan que debía contactar a profesionales de la salud o perdería su trabajo. No se reportó si Flanagan había obedecido la orden.

Cuando Flanagan fue finalmente despedido por "desempeño laboral insatisfactorio e inhabilidad para trabajar como parte de un equipo", se puso bravo y agresivo y tuvo que ser escoltado por la policía fuera de la estación.

Por su parte, Flanagan, que usaba en pantalla el nombre de Bryce Williams como reportero, denunció tratamientos racistas y sexistas por parte de WDBJ17. El año siguiente a su despido entabló una denuncia civil contra la estación alegando ser víctima de un intento "cuidadosamente orquestado" por los fotógrafos de hacerlo "despedir", en un caso que fue denegado por la corte de Virginia.

Publicidad

En algunos tweets después del tiroteo del miércoles, aseguró que Parker había hecho comentarios racistas y que Ward había hecho una queja oficial después de haber trabajo con él sólo una vez.

En un fax de 23 páginas que envió a ABC News en las horas siguientes al ataque, Flanagan también detalló sus supuestas motivaciones, alegando que sus colegas lo habían discriminado por ser negro y gay, que lo habían inspirado los tiroteos masivos de Virginia Tech y de Columbine, y que estaba indignado por los tiroteos masivos motivados por racismo en la iglesia Charleston en junio pasado. Aparentemente compró su arma dos días después de la masacre.

El miércoles, el director general de WDBJ, Jeff Marks, dijo al aire que Flanagan era "un hombre infeliz" que "estaba más o menos buscando que la gente dijera cosas que pudieran ofenderlo. Eventualmente, después de muchos incidentes en que su ira salía a la luz, lo despedimos. Y él no lo tomó bien".

La Casa Blanca y otros políticos de alto rango de Estados Unidos, incluyendo a Hilary Clinton y al gobernador de Virginia Terry McAuliffe, reiteraron las demandas por mejores controles de armas en vista de los asesinatos.

Barack Obama le dijo a la BBC el mes pasado que el fracaso en aprobar las "leyes de seguridad de armas basadas en el sentido común" era su "frustración más grande" como presidente.