El socio de Al-Qaeda en Siria planta al grupo terrorista y eso son malas noticias para EEUU

Jabhat al-Nusra, la franquicia de Al-Qaeda en Siria ha decidido romper todos sus vínculos con su organización madre. Así lo anunció ayer la organización terrorista a través de un comunicado.

El líder del Frente al-Nusra, Abu Mohamed al-Jolani, conjuntamente con dos otros miembros de la cúpula de la organización, ha anunciado la escisión a través de un comunicado retransmitido por las emisoras Orient News y Al Jazeera en árabe.

Al-Jolani aparece en la retransmisión con el rostro descubierto, a diferencia de cómo lo hacía en su última intervención en Al Jazeera en árabe, donde compareció enmascarado. A primera hora de hoy los perfiles del frente al-Nusra en las redes sociales han publicado la primera foto jamás divulgada de al-Jolani.

En un comunicado a través de audio igualmente publicado a primera hora de hoy, el número dos de Al-Qaeda, Abu al-Khayr al-Masri, ha concedido su consentimiento al Frente al-Nusra para que este se escinda. Al-Masri ha declarado que la separación será un paso de lo más pragmático para unir a todas las facciones rebeldes en su lucha contra el régimen sirio.

Al-Jolani ha declarado a su vez que la voluntad de su organización no es otra que fundar un nuevo movimiento con el resto de facciones rebeldes al que se ha bautizado como Jabhat Fateh al-Sham, o "el movimiento por la conquista del Levante".

El movimiento confiere a la formación una nueva alianza en su lucha contra las fuerzas del dictador sirio Bashar al-Assad, que se encuentran muy cerca de aplastar sin contemplaciones a los rebeldes en su lucha por el control de la estratégica y devastada ciudad de Alepo. El anuncio supone también un revés contra la estrategia de Estados Unidos de intentar separar a los rebeldes de ideología más moderada de los yihadistas vinculados a al-Qaeda.

Los anuncios de hoy llegan después de que se hayan producido una serie de reuniones secretas en Siria en los que se habría debatido la formación de una organización capaz de enfrentarse a las fuerzas de Assad y a las de su todopoderoso aliado ruso. A fin de cuentas, las fuerzas de Putin están avanzando en Alepo, la ciudad más grande de Siria, a golpe de bombardeos, asesinando a todo lo que sale a su paso.

Según opina Charles Lister, un miembro de la cúpula del instituto de Oriente Medio, la flamante formación incluye a la mayoría de fuerzas de al-Nusra, que serían algunas de las mejores armadas y entrenadas del país. Para Lister, debería de empezar a considerarse a la nueva alianza como un nuevo bando en el conflicto sirio, y no como a una franquicia de ninguna organización radicada en cualquier otro país que apenas se preocupa por la suerte del pueblo sirio.

El consejo de sabios de Al-Nusra, al que se conoce como el Consejo Shura y que ofrece asesoramiento a Al-Jolani ha votado a favor de la escisión. El asesoramiento se ha producido después de que haya trascendido un mensaje de un operativo de Al-Qaeda en el que se asegura que el 90 por ciento de la cúpula de al-Nusra estaría a favor de la escisión.

"Se trata de una discusión que viene de lejos… muchos grupos rebeldes deseaban que al-Nusra rompiera su vínculo con Al-Qaeda, opina Amarnath Amarasingam, miembro del programa en Extremismo de la universidad George Washington.

Las autoridades de inteligencia de los países del Golfo Pérsico, entre ellos Qatar, también se habrían reunido con la cúpula de al-Nusra. Según algunas fuentes de la exfranquicia de Al-Qaeda a las que cita la agencia Reuters, estas habrían ofrecido una mayor financiación así como incrementar sus suministros, a cambio de que se produzca la escisión con Al-Qaeda. Las monarquías del Golfo, que se oponen al régimen de Assad, llevan mucho tiempo apoyando a sus proverbiales enemigos yihadistas más radicales.

La cúpula de al-Nusra considera que la escisión será ventajosa en varios frentes, según opina Amarasingam.

Lo cierto es que Al-Qaeda no goza del apoyo ni del favor de la gran mayoría de las organizaciones que forman la oposición al régimen sirio. A menudo se le ha percibido como una formación de extranjeros entrometidos. Así lo comenta Lister, autor del libro La Yihad Siria.

En cambio, al-Nusra está integrado fundamentalmente por combatientes sirios, y la oposición a Assad ya había mostrado su apoyo por la organización en el pasado. Ya lo hizo, incluso, después de que Estados Unidos decidiera incluir al Frente en su listado de organizaciones terroristas en diciembre de 2012.

La ruptura con Al-Qaeda, de acuerdo con Amarasingam, es una forma de intentar incrementar ese apoyo. La cúpula de al-Nusra "espera convertirse en el acicate que una a los rebeldes, lo cual posibilitaría que las poderosas fuerzas de la formación penetraran todavía más entre las fuerzas de la oposición", ha comentado Amarasingam.

"Dejando Al-Qaeda, se deshacen finalmente del argumento que les habían echado en cara muchas formaciones rebeldes, que no era otro que el frente al-Nusra no era un fuerza de unidad", añade.

Los integrantes del frente al-Nusra también han mostrado su esperanza en que la escisión disuada a los países extranjeros que han bombardeando sin descanso a las fuerzas de al-Nusra en el pasado con la justificación de que son una rama de Al-Qaeda, de bombardearles en el futuro. La formación ha sido apabullada por los bombardeos de la coalición dirigida por Estados Unido, y por las inclementes ofensivas rusas.

Amarasingam, quien habría estado recientemente en contacto con distintos combatientes del Frente al-Nusra, asegura que muchos de ellos han "declarado que si las fuerzas extranjeras continúan bombardeándoles después de tamaña escisión, entonces se demostrará que el argumento de que Al-Nusra es Al-Qaeda no era más que un conveniente pretexto empleado por sus agresores para acometer su auténtico objetivo. Y este no sería otro que "masacrar a los musulmanes".

La cúpula de al-Nusra se ha mostrado cada vez más preocupada por los insaciables bombardeos de los últimos días, mientras Estados Unidos y Rusia se reunían para charlar sobre la posibilidad de asociarse en suelo sirio.

El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, y el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Larov se reunieron el pasado 15 de julio en Moscú para hablar sobre Siria. Y según algunas fuerzas diplomáticas mencionadas en el periódico árabe radicado en Londres Asharq al-Aswat, habrían sellado un acuerdo para desplegar un bombardeo coordinado contra el Frente al-Nusra y contra Estado Islámico.

"Si hay algún detractor que esté criticando a Estados Unidos o Rusia por ir en contra del frente al-Nusra, que es una organización terrorista en toda regla, solo porque le están plantando cara a Assad, entonces es que han perdido la referencia sobre cuáles son sus prioridades", ha declarado Kerry a la prensa después de su encuentro en Moscú.

"El hecho es que Nusra está orquestando atentados contra países de todo el mundo", ha dicho Kerry. La organización no ha reivindicado ningún atentado en Occidente, pero "lo que pasó en Niza hace dos semanas podría haber sido perfectamente obra del frente al-Nusra, como de cualquier otra organización parecida", según Kerry.

Al-Nusra ya ha declarado en varias ocasiones que no tienen el menor interés en desplegar ataques terroristas contra Occidente, y que su único interés está concentrado en derrocar al régimen de al-Assad.

"Desde Jabhat al-Nusra queremos subrayar que, con el objetivo de seguir alimentando la yihad siria de manera fuerte y vigorosa, el resto de nuestros objetivos, como atacar a Occidente y Estados Unidos, han sido abandonados y han dejado de existir", ha escrito el responsable de la oficina de comunicación de la organización, Abu Ammar al-Shami a principios de este mes.

Estados Unidos ha intentado sin éxito disuadir a los grupos rebeldes de que se asocien con el Frente al-Nusra en los últimos meses, cuenta Lister. Sin embargo, la situación en Alepo es tan descorazonadora para los rebeldes, que no van a descartar la ayuda de una de las pocas facciones que les ofrecen la posibilidad de seguir resistiendo.

"Nuestra situación en Alepo lleva mucho tiempo siendo desesperada, claro que a los estadounidenses parece alegrarles ver cómo padecemos y morimos. Estamos desesperados y aceptaremos el apoyo de quienquiera que nos lo brinde, siempre y cuando este sirva a nuestra objetivo de derrocar al régimen de Assad", habría dicho un líder rebelde que contaría con el apoyo de Estados Unidos, ha comentado Lister

Sin embargo es posible que la escisión del Frente Al-Nusra de Al-Qaeda sea más una declaración para disuadir a los bombardeos que un acuerdo real, comenta Lister.

En un comunicado emitido por al-Maqalat, una fuerza holandesa vinculada a al-Nusra, se explica bastante bien la situación: "Si Jabhat al-Nustra rompe sus vínculos y cambia su nombre, pero sigue compartiendo la misma estrategia y metodología que Al-Qaeda, entonces es posible que tal sea parte del plan original de Al-Qaeda para Jabhat Nusra en Shaam. A fin de cuentas, Shakyh Ayman Zawahiri ordenó a sus soldados que no declararan ninguna presencia de Al-Qaedah en Shaam", expresa. (Shaam o Sham es el término árabe para referirse al Levante, la región en la que está enclavada Siria).

Durante el pasado mes de mayo, Zawahiri publicó una grabación de audio en el que aseguraba que el hecho de que al-Nusra se escindiera de Al-Qaeda no sería ningún obstáculo "para las grandes esperanzas de la nación islámica". El beneplácito para la escisión también permitirá a al-Nusra respetar la Baya —un juramento de lealtad a un líder contemplado por el Corán — que en su día le ofreció a Al-Qaeda, sin incurrir en pecado.

El frente al-Nusra fue formado a finales de 2011, cuando Abu Bakr al-Baghdadi, emir y fundador de Estado Islámico de Irak, también conocido como Al-Qaeda en Irak, envió a Jolani rumbo a Siria para que este desplegara las células yihadistas radicales de la organización en el país de Assad. Entonces la guerra civil que se sigue librando hoy apenas acababa de arrancar.

La organización enseguida se posicionó como un grupo solvente y de confianza, que sería de lo más eficaz en su batida contra las fuerzas de Assad. No tardaría en despertar el apoyo de otras formaciones, gracias a que habría impedido que se cometieran muchas atrocidades contra otras facciones rebeldes.

Sin embargo, el frente al-Nusra habría cometido desde entonces crímenes de guerra. Al menos así lo atestigua un breve informe reciente de Amnistía Internacional. El informe denuncia que al-Nusra, conjuntamente con otros grupos rebeldes habría torturado a prisioneros, abducido a activistas y a miembros de grupos minoritarios, cometido ejecuciones sumarias e implementado durísimas interpretaciones de la ley sharia en las zonas conquistadas.

En abril de 2013 Baghdadi anunció de manera unilateral que había unido a las fuerzas del Estado Islámico con las del frente al-Nusra, para así alumbrar al Estado Islámico de Irak y de Siria. Jolani, sin embargo, se salió por la tangente, desmintió el anuncio y decidió, por el contrario, jurar lealtad a Al-Qaeda, la formación dirigida desde Afganistán por Zawahiri, igualmente contario a la coalición con al-Baghdadi.

Miles de combatientes de al-Nusra desertaron entonces y se sumaron a Estado Islámico. Desde entonces ambas formaciones se han batido en numerosas ocasiones en el campo de batalla.

La reacción inicial de los combatientes yihadistas de Estado Islámico ante la escisión de sus rivales y Al-Qaeda, ha sido la de burlarse del comunicado, opina el periodista Hala Jaber. Claro que podrían no reírse por mucho tiempo, según Amarasingam: si los bien organizados miembros de al-Nusra y el resto de rebeldes sirios unen sus fuerzas contra ellos, entonces las cosas se podrían poner realmente feas para Estado Islámico.

Sigue a David Mastracci en Twitter: @DavideMastracci

Sigue a VICE News en Twitter: @VICEnewsES