Los indígenas estrenan su semana de la moda

Foto cortesía de la Semana de la Moda Indígena de Australia

El paisaje de Australia es vasto, desolado y en su mayor parte desconectado del mundo de la alta costura. Pero también hay tradiciones artísticas y artesanales, y donde hay arte, hay horizontes de rentabilidad para la moda.

En abril, se llevó a cabo en Sidney el primer desfile de moda indígena de Australia. La idea fue concebida por Krystal Perkins, una ejecutiva de marketing que ayudó a lanzar el canal de televisión National Indigenous Television. Perkins quiere introducir a los aborígenes australianos al mundo de la moda de alta costura.

Aparte de Samantha Harris, una modelo aborigen de piel clara, hay muy pocos símbolos de la belleza entre la comunidad indígena de Australia. De las 1.100 modelos fichadas en las agencias de renombre en el país, solo siete son indígenas, según un artículo aparecido en Cleo, una revista australiana para mujeres. “Me sorprendió la falta de chicas negras en el mundo de la moda e intenté lograr un equilibrio”, dice Krystal.

Ella cree que con más diversidad en el mundo de la moda, las mujeres indígenas y jóvenes podrán verse y sentirse bellas. Como parte de la Semana de la Moda Indígena, se realizó una competencia de modelaje para jóvenes indígenas, y 16 fueron elegidas para ir a Sidney a capacitarse en negocios, conducta y manejo de pasarela.

Claro, el modelaje no es una tradición predilecta de la comunidad de jóvenes indígenas, y en la mayoría de las comunidades más conservadoras ni se sabe del asunto. “Esta tiene que ser una decisión para la comunidad entera”, dice Krystal. “Si una joven quiere modelar, tiene que ser aceptada no solo por sus padres, sino por el resto de sus familiares”.

La semana incluyó un taller de diseño para indígenas de todo el país, donde se ofrecieron talleres para desarrollar y comercializar sus productos. Krystal espera que muchos sigan los pasos de Jimmy Pike, un artista indígena que empezó a pintar mientras estaba en prisión y ha elaborado piezas únicas para Desert Designs y telas patentadas para Oroton y Seridan.

De hecho, marcas europeas como Zegna y Hermès tienen diseños autorizados hechos por artistas indígenas. Esto no se trata de enseñarles a las comunidades cómo hacer arte —pues ya lo saben hacer—, se trata de ayudarles a encontrar un mercado para sus trabajos. Mientras que el enfoque de las artesanías es el diseño y la pintura, hay otras técnicas indígenas que pueden encontrar un espacio en la industria de la moda.

Artesanos y artistas de las islas Tiwi, en el estrecho de Torres, entre Australia y Nueva Guinea, están incorporando tejidos tradicionales a sus bolsas y accesorios. Además, el uso de piel de canguros y zarigüellas para confeccionar sacos, propio de los pueblos del sur de Australia, puede convertirse en una tendencia de la moda en mercados de Europa y Asia.