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Cultură

13 momentos memorables de la televisión en España

Como la tele en el verano fue un abismo de desolación, repasamos algunos momentos memorables de la tele en España.

Empezamos con una confesión: antes de marcharnos de vacaciones teníamos pensado publicar, ya en la vuelta, por estas fechas, un artículo para resumir y analizar qué había dado de sí la programación televisiva del verano. Ya sabes, un texto desenfadado para hacer balance y, de paso, reírnos un poco a costa de los habituales desastres que perpetra la pequeña pantalla en periodo vacacional. Pero nada, olvídalo. No lo haremos. Hacía años que no recordaba un parrilla tan desoladora, descorazonadora y deprimente como la de estas últimas semanas. Ni para hacer sorna ha dado de sí el tema. Un solar. El aeropuerto de Castellón un martes de febrero a las 9 de la noche. Estoy seguro de que si hablamos con un par de libreros nos confirmarán que en agosto han aumentado las ventas de forma considerable en comparación a meses anteriores. Así que hemos pensado que no hay mejor forma de denunciar semejante maltrato a los televidentes estivales que la absoluta indiferencia. Y como tenemos mono de televisión y los programadores nos han tenido a pan y cuchillo estos dos meses, hemos optado por inventarnos nuestro particular hit del verano, nuestro Top 13 de momentos épicos, memorables y desternillantes de la historia más o menos reciente de nuestra televisión. Un listado polémico –todos lo son– que está abierto al debate y las réplicas, pero que tiene una premisa clara: compilar nuestros momentos televisivos favoritos, aquellos que aún hoy nos hacen saltar las lágrimas, independientemente de su relevancia histórica, influencia y poso. El mejor programa que podrás ver hoy lo encontrarás aquí, no en la tele.

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Paco Lobatón & Gregorio Cobos

A ver… Nos habría pasado a todos. Estás buscando a Gregorio y te ponen al teléfono a una persona que asegura ser Gregorio, pero que tiene voz de Margarita, Julia u Hortensia. Y obviamente te quedas en shock, pestañeas y, con toda la discreción del mundo, intentas salir del atolladero en el que te ha metido tu productor, incapaz de avisarte antes de pasar la llamada que Gregorio Cobos Burguillo tiene un tono de voz algo afeminado. Es curioso porque "¿Quién sabe dónde?", el programa de búsqueda de personas desaparecidas que presentaba Lobatón y al que pertenecen estas imágenes, ha pasado a la historia por este momento… Pero nadie ha reparado o querido reparar en que se trataba de un caso resuelto favorablemente por el programa.

Chábeli Iglesias visita Tómbola

¿Vivió momentos mejores "Tómbola"? Seguramente. Y con toda probabilidad tanto "DEC" como "Sálvame Deluxe" hayan superado con creces el grado de acoso y derribo al famoso que experimentó la hija mayor de Julio Iglesias en esos momentos, pero hablamos de uno de los primeros casos de bullying televisivo que se recuerdan, el gran pionero de todo esto… Gracias Chábeli, contigo empezó todo. Fórmula clásica, fórmula ganadora: declaraciones ridículas de la celebrity y una jauría de hienas hambrientas dispuestas a despedazar a la presa en cuestión de segundos. ¿Os suena, sí? Hoy es muy fácil hacerlo; pero hace casi veinte años, y en una televisión pública, no tanto.

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Emilio Rodríguez Menéndez enfurecido en Sálvame Deluxe

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En "Sálvame Deluxe" hemos vivido grandes momentos, pero no me cabe la menor duda que la entrevista al abogado, y por entonces prófugo, Emilio Rodríguez Menéndez, desde su escondite argentino, es el mejor y más memorable episodio vivido en el programa de Telecinco que recuerdo. Gritos, insultos, los sobacos de la Bollo, los dedos en forma de cuerno… o cómo salir airoso y triunfal de una emboscada de alto voltaje, con todo el equipo de colaboradores del programa disparando munición ininterrumpidamente. Lo que no sabían es que Rodríguez Menéndez guardaba bajo el brazo un arsenal de bombas racimo.

Kiko Matamoros vs. Coto Matamoros

La versión fatuñera de Abel y Caín. Hermanos que en vez de matarse por envidias emocionales compiten para ver quién acusa más fuerte y alto al otro. De drogadicto, adúltero y traficante para arriba. La escenificación de esta rivalidad vivió dos noches épicas: el partido de ida, en "DEC", con Kiko en plató y Coto en Tailandia, ahí donde teóricamente el menor de los Matamoros tenía pensado suicidarse; el partido de vuelta, ya en "Sálvame Deluxe", con Coto aún vivo pero considerablemente más mermado física y mentalmente. Dos veladas épicas, más ruidosa y agitada la primera pero más contundente y terminal la segunda. ¿Mayweather contra Pacquiao el combate del siglo? Nah. Los vídeos aquí.

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La Veneno en su salsa

Aun a riesgo de ser linchado públicamente por los hooligans de La Veneno, que con toda seguridad preferirán otros momentos de su trayectoria –esa noche en "DEC" junto a Carmen de Mairena y Marisol, la cirujana plástica del Raval, también fue épica–, he elegido este breve pero monumental episodio en el propio "DEC" no solo por el interminable aluvión de palabrotas, gestos soeces, gritos y alaridos simiescos que salen de su boca y cuerpo en apenas dos minutos, sino porque es incapaz de entender que le están gastando una broma. El personaje resumido en su máxima expresión. Cien segundos en el paraíso de la grosería, la mala educación y la anarquía.

Fernando Arrabal y el milenarismo

Confieso que dudaba entre incluir este momento o no. No porque no me parezca memorable, que rotundamente sí, sino porque a veces te dejas llevar por absurdos prejuicios que te alejan del mainstream sin justificación. Arrabal fue el primer gran punk de la tele, pero hoy su acto de terrorismo etílico en el programa de Fernando Sánchez Dragó goza de máxima difusión y aceptación entre el gran público. Si no lo incluyes te estás perdiendo un momento histórico; si lo incluyes te queda la sensación de que estás siendo predecible. Pero desde que me informaron que esa misma noche, al margen de caerse, fantasear con el fin del mundo y todo lo que se ve en el vídeo, Arrabal también se sacó la manguera y regó parte del plató, imágenes que fueron pertinentemente censuradas por la cadena, el respeto por el poeta y su hazaña solo ha hecho que engrandecerse.

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"Pim, pam, toma Lacasitos"

Pupilas como platos, rictus desencajado, lengua pastosa, tembleque constante y, por supuesto, el estribillo inmortal: "pim, pam, toma Lacasitos". A Ares, el tipo desbocado que la Guardia Civil intercepta para hacerle un control de alcoholemia, le salvó la vida, o cuando menos algunos huesos, la cámara de "Callejeros", presente en el parking de una macrodiscoteca en plena ruta valenciana. ¿Hubiera reaccionado igual el agente sin una cámara delante ante el comportamiento delirante y tocapelotas de nuestro héroe? No lo creo. Pero ahí estaba el programa para inmortalizar a Ares y, de paso, para hacer la radiografía más perfecta y memorable de lo que es un colocón épico de éxtasis.

Hotel Glam

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"Hotel Glam" es el reality show que más minutos de llorera nos ha proporcionado nunca. Y claro, elegir un solo momento de todos los que acontecieron durante la emisión del programa es un marrón por el que no estamos dispuestos a pasar, así de claro. La mochila de Pocholo, el exorcismo de Yola Berrocal, las ocurrencias de Malena Gracia… Finalmente hemos optado por recuperar otro momento épico: la enganchada entre Coto Matamoros y Dinio García en una conexión en directo en "Crónicas marcianas": juraría que es la única vez en la historia de los realities en España en que el concursante, supuestamente recluido en una casa, parecía ir más puesto que el contertulio. Y ya es decir.

Paco Porras y el esquí acuático

Ok, aquí hemos hecho trampa. Este momento no es propiamente televisivo, sino que formaba parte de la película "FBI: Frikis Buscan Incordiar", dirigida por Javier Cárdenas. Nos la suda. Esta escena se emitió tantas veces en "Crónicas marcianas" que para muchos es más televisiva que cinematográfica. Es evidente que caen lágrimas cada vez que lo ves por el tremendo golpetazo que se da Porras contra el agua y la arena. Pero sobre todo caen lágrimas por esos segundos previos de tensión y dramatismo en los que el vidente se ve venir el batacazo y no puede hacer nada para evitarlo. En serio, es antológico: la cara de pánico, la cuerda que empieza a tensarse y ese segundo mágico en que salta por los aires. La sublimación absoluta de la humillación televisiva consentida. Arte.

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Jesús Gil vs. José María Caneda

La duda estaba entre el careo entre Jesús Gil y Julián Muñoz en "Salsa rosa" o esta versión sui generis de "El club de la lucha" protagonizada por Jesús Gil y José María Caneda, entonces presidentes del Atlético de Madrid y el Compostela, respectivamente. Revisionadas ambas no me ha quedado la menor duda: esta última, que además os ofrecemos en su versión íntegra, gana por goleada. Gil as its best. Las gafas que caen al suelo. Los guardaespaldas empujando. Los insultos en pronunciado acento gallego del acompañante de Caneda, el gerente del club José González Fidalgo. Gil acusándolos de robar al pueblo de Marbella. Las caras de estupor de algunos miembros de la Federación Española de Fútbol que asisten a la escena. La persecución ya dentro del edificio. El Dogma mucho antes de que a Lars Von Trier se le iluminara el cerebro. Nostalgia de aquellos años, la verdad: la cultura del pelotazo, los presidentes caciques, los shows de Gil, Ruiz Mateos o Mendoza, la falta de corrección política…

Umbral y su libro

Ahora que todos nos llenamos la boca hablando de autopromoción, marketing viral, product placement o spam selectivo, es de recibo reivindicar este vídeo, en el que Paco Umbral inventó el spam en vivo y en directo ante la desconcertada y confusa mirada de Mercedes Milá. El escritor, harto de perder el tiempo hablando de tonterías, increpó a la presentadora por no dedicarle los minutos merecidos a la promoción de su libro; y de ahí a la posteridad, un hit convertido en muletilla recurrente cuando algún plumilla, actor o cantante pisa algún plató en plena gira promocional. Con una diferencia importante: ahora se emplea entre sonrisillas, como para hacer la gracia; Umbral iba en serio. Muy en serio.

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Droja en el Cola Cao

El reciente fallecimiento de José Tojeiro ha permitido revivir de forma intensa uno de esos momentos irrepetibles que la televisión nos regala sin que haya mediado la mente brillante de algún directivo o presentador. "Me echaron droja en el Cola Cao" como excusa atenuante para justificar y explicar varios hurtos y, de paso, para quitarle hierro al hecho de haber recibido en casa a "tres prespitutas", es una obra de arte que jamás ningún guionista podría haberse sacado de la manga a conciencia. El presentador del programa del que salió esta perla, Arturo Pérez-Reverte, ahora muestra un incomprensible arrepentimiento por ese pasado televisivo. Lo sentimos, Arturo: esto sí ha pasado la historia, y no la adaptación de "Alatriste".

El mechero y la Sole

Medio minuto que vale por todas las temporadas completas de "Palabra de gitano", "Callejeros" o "Gipsy Kings". La suerte hay que buscarla: Alfonso Arús encontró esta obra magna de la televisión de los 90, vete tú a saber dónde, y gracias a "Al Ataque" la convirtió en uno de los running gags de la década. Los protagonistas, Cesáreo "El Chicharra" y su prima, "la mierda la Sole"; el leit motiv, el huevo que lanza ella y que impacta en la cabeza de él. El resto, por todos ya conocido e interiorizado: popularización total del acento caló, imitaciones a cascoporro y mitificación de un pobre diablo del que un año después, y pasado el primer tsunami de fama, ya no sabíamos absolutamente nada.