FYI.

This story is over 5 years old.

Noticias

Los lobos han vuelto a la Sierra de Madrid

La supuesta reaparición del lobo ibérico provoca que se envenenen ovejas muertas para cazarlos y ya hay curiosos que organizan excursiones para intentar verlos.

Imagen vía

¿Lobos en Madrid? ¿Leyenda o realidad? Los naturalistas llevan tiempo asegurando el avistamiento de camadas mientras las autoridades lo desmienten. Nadie dice dónde habitan exactamente los ejemplares de esta especie supuestamente desaparecida en los setenta, porque la sierra es territorio ganadero y ahí el lobo ibérico no es bien recibido. Tampoco Clara Benito, una madrileña que se fue a vivir a la sierra norte con su pareja y su hija Juana, nos desvela dónde está su casa. Lo que sí hace contarnos con pelos y señales sus encuentros con los lobos y cómo atacaron a sus cabras.

Publicidad

VICE: ¿Cómo fue la primera vez que viste al lobo?

Clara Benito: Estaba escondido detrás de unos matorrales, a unos cuatro metros de mí. Y yo en una piedra leyendo con mis cabras al otro lado. No sabía qué era, de hecho pensé que era el perro de una vecina. Yo que sé, es muy atrevido pensar que lo que estás viendo es un lobo. Además, yo no tengo mucha idea de animales. El cabrón no se movía y las cabras no se enteraban de nada, estaba contra el viento.

Y ahí ya te diste cuenta de que no era un perro, claro.

Sí porque tenía las patas traseras despejadas, el cuello lleno de pelo como una bufanda y ojos naranjas y todo. Algo te dice que eso no es un perro. Cuando se lo conté a David, mi pareja, que conoce bien los animales, me dijo que un perro no habría observado así sino que se hubiese tirado a por las cabras sin esperar. Después me enseñó fotos de lobos y, efectivamente, había visto claramente un lobo.

Tuviste que flipar bastante.

Fue muy loco porque él ni pestañeaba, sólo miraba a las cabras y ellas no se enteraban. Yo le gritaba "¡eh! ¡eh!" con el palo levantado, y seguía sin moverse. Me puse nerviosa, pensando que se iba a abalanzar en cualquier momento y me moví yo. Empecé a llamar a las cabras para que bajasen conmigo y el lobo salió del matorral. Las cabras le vieron y se fueron corriendo y él se fue hacia el pinar pero sin correr ni nada, casi de paseo. Fue increíble, le pude ver muy bien. Al principio me dio rollo hacerle foto y cuando me decidí ya estaba demasiado lejos.

Publicidad

Una de las cabras atacadas por el lobo, con la marca azul del spray antibiótico.

¿No te measte encima?

Tuve miedo por las cabras, pero yo no me sentí en peligro en ningún momento, la verdad. Y el lobo se fue así tan pichi, desfilándome en la cara. Por si acaso nos hicimos con un mastín, pero como lo tienes que coger cachorro para que se acostumbre a ir con el ganado, viva con las cabras y aprenda que tiene que defenderlas, aún no abulta lo suficiente como para que un lobo achante. Después, todo volvió a la normalidad. Las cabras ya se habían aprendido un poco la zona e iban casi solas, aunque se alejaran un poco no nos preocupábamos. Ese fue el error, porque el lobo vigila con paciencia hasta que ve el momento.

Hay quién dice que es Medio Ambiente quien introduce y alimenta a los lobos de la sierra madrileña.

¿Y cuándo vio el momento de volver?

Un día que yo estaba en el camino y las cabras habían subido hacia el pinar. Cruzaron un camino de jaras, un poco chungo para que lo hagan solas, pero justo cuando me iba a levantar para ir a buscarlas aparecieron por el otro lado y me quedé tranquila. Me volví a sentar y la mastín estaba conmigo en vez de con ellas, ese fue el otro error. Las cabras estaban como a unos veinte metros de mi, y escuché a una balar muy fuerte, un balido de lo más estremecedor.

¿Qué hiciste?

Dejé todo y subí corriendo la cuesta con mi palo, otra vez llamándolas como para que me vieran y bajasen, porque estaban todas en corro paralizadas. Bueno, todas menos una a la que había enganchado del lomo, y que de repente se llevaba al lobo casi en volandas. Yo flipé con eso, el lobo le mordió y ella siguió corriendo hasta que se zafó. Los lobos ibéricos son un poco más pequeños o iguales que una cabra adulta. Si la hubiese cogido del cuello que es donde suelen atacar… Pero la cogió de donde pudo. El resultado fueron dos cabras heridas, la pequeña con los colmillos del lobo en el cuello y la otra desgarro en el lomo hasta el músculo. Hubo que coserla y chutarle amoxicilina. Un buen bocao.

Publicidad

Los ganaderos quieren matar a los lobos y envenenan ovejas que se les han muerto para se las coman y se mueran también, porque el lobo es carroñero.

¿Hay más gente que ha visto a los lobos?

Si, claro, en algunos pueblos de al lado también lo han visto y dicen que ha matado ganado. Creo que los lobos habían desaparecido de Madrid desde los años 40 o 50 y casi consiguieron extinguirlos. Bueno, creo que en realidad no había desaparecido de la península, sino que se habían ido despoblando zonas donde se habían visto muy amenazados. Y ahora se ve que con el tiempo se han ido reproduciendo y han vuelto a colonizar zonas de las que se habían marchado. Bueno eso es lo que dice David, que es biólogo y que desde muy pequeño le gustaba irse al campo con una bolsa de naranjas a pasar la noche para observar a los animales.

Pero hay quién dice que los han introducido de forma controlada.

Lo de que los han introducido de nuevo es una leyenda urbana que se maneja mucho en los pueblos. Una leyenda rural, más bien. Por aquí lo dicen mucho, que pérfidamente los del Seprona los alimentan y los meten de nuevo. En realidad los ganaderos dicen que es Medio Ambiente quien los alimenta y les vuelve a introducir, porque defienden a los lobos y multan a los ganaderos si los cazan.

¿Cómo que están cazando lobos?

Bueno hay quien los quiere matar y, por ejemplo, envenena una oveja que se le ha muerto para que el lobo se la coma y se muera también, porque el lobo es carroñero. Pero claro, ¿qué pasa si a esa oveja le muerde mi perro? ¿O buitres? O yo qué sé, cualquier animal. Es una cadena, uno se come a uno envenenado y muere y a éste se lo come otro que también morirá por envenenamiento. Si llevas el cuerpo del animal, y confirmas que ha muerto por el ataque de un lobo, te indemnizan. La peña está muy loca. A la gente se le está yendo la cabeza con esto de que vuelve a haber lobos y se lo cuentan a todo el mundo y ya empiezan a venir friquis con sus telescopios terrestres y sus movidas. Son enamorados de los lobos, simpáticos, pero tampoco queremos que se monte un parque temático aquí.

Van a acabar con vuestra tranquilidad en el campo.

De momento no. La vida del campo es maravillosa. Nunca he vivido mejor que ahora. David ya vivía aquí y había tenido cabras y yo me vine con él cuando me quedé embarazada. Se fueron dando las circunstancias y tenemos quince cabras con intenciones de hacer queso, yogures, comer cabrito… Para consumo propio y también para vender. Queremos que el rebaño crezca.

Los vecinos pensarán que sois unos jipis.

No hablamos mucho así que creo que no saben que somos de 'los otros'. Ahora que saben que he visto al lobo, las mujeres sí que vienen y me preguntan y me dicen que hay que tener cuidado con los niños. Aunque Juana ya tiene dos años, yo creo que un lobo iría a por los niños que abultan un poco menos. También me recomiendan que lleve siempre un palo. Que nunca se sabe. Yo lo llevo más pensando en que me sirva para subir cuestas que para apalear bichos.