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Música

​Techsound Promotora: creando escena con las uñas

Desde los noventas Sónico lleva demostrando con Techsound que las luchas con amor dan frutos, que es posible vivir de la música y que los ejércitos de un solo hombre sí existen.
Foto archivo de Baum.

Con esta serie quisimos dibujar el mapa sonoro de nuestro país a punta de colectivos de personas activas, que están uniendo talentos para agrandar la escena local.

Cuando Luis Vargas tocaba techno por allá en el año 95 bajo el nombre de Sónico, a nadie le gustaba. Y no porque fuera malo ni mucho menos, sino porque, a diferencia de ahora, nadie oía eso en la época. Con el tiempo, Sónico fue entendiendo que se hallaba prácticamente solo en esta lucha musical, pero esto no lo detuvo.

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De la mano de Statik, el ex guitarrista de Aterciopelados, Sónico creó Techsound, una organización que ha hecho el papel de promotora de eventos, colectivo, agencia y sello disquero. "A pesar de haber sido un colectivo, ya no lo somos" adhiere. Al principio lo intentó con muchos DJs, pero todo se redujo a cuatro personajes: Sónico, Bluekim, Blanali y Triana, quienes se dividían las labores de booking, diseño, label managing, etc. "Teníamos en común una visión de la música", cuenta Sónico. "Un sentimiento por lo que hacíamos incluso más allá del género, y un concepto musical claro: el Techno y la independencia en todo el esplendor de su significado". El cuarteto se disolvió, pero Sónico siguió trabajando en conjunto con varias organizaciones y colaboradores que trabajaran periódicamente en este colectivo, del que él lleva la batuta: "Techsound es más una familia y una institución que un colectivo".

Hoy en día este colectivo, que no es tan colectivo, puede mostrar con orgullo más de 600 eventos en diversas líneas musicales, los 150 artistas que ha traído al país y las oportunidades que le ha dado a más de 300 artistas nacionales. Sónico puede decir con total seguridad que ha sido de los que más ha ayudado a desarrollar escena en el país cubriendo varios frentes, desde rap hasta hardcore, pasando por techno y house. "Actualmente Techsound se divide en tres partes", me explica Sónico. "La producción de eventos y los bookings, que son manejados completamente por mí, y el sello Techsound Records, que lo sacamos adelante de la mano de Alex Jockey".

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Eventos como el que tienen ahorita, el Hardcodelia, una fiesta que ha posicionado a Techsound, siendo su versión 38 desde el 2007 y su cuarta versión de este año. El invitado que tienen ahorita es Manu le Malin, un duro del hardcore y del industrial, un duro del sonido fuerte (tenemos boleticas gratis para sortear entre los que compartan este artículo).

Han diversificado su sonido en el tiempo. Se la pasan de concierto en concierto trayendo a exponentes musicales de todo tipo. Han hecho vínculos con gente alrededor de todo el mundo durante todos estos años, pero para Sónico una de las cosas más importantes es que han hecho lo que han querido. "Hemos encontrado la forma de vivir de lo que nos gusta… ¿Qué hay más grande que eso?". Hablamos con él acerca del pasado, de lo que radica detrás de la música y de que el techno no es moda.

Ha sido un viaje largo para ti. ¿Qué ha sido lo mejor? ¿Qué ha sido lo peor?

Empecemos por lo malo. Lo peor fue darme cuenta de la falta de mentalidad colectiva cuando quise hacer un colectivo. Lo peor ha sido pararse de esas reventadas económicas. Lo peor también ha sido afrontar los estigmas, las barreras legales, la envidia, los haters, los plagiadores y la gente pretenciosa que proyecta una imagen errónea de nuestra escena, pero eso pasa en todos los gremios.

Las cosas buenas han sido más. Lo mejor fue conocer otras personas con las que pude conspirar y conocer la verdadera colectividad, caso de Bogotrax, caso de mi equipo de trabajo actual. Me siento afortunado de la gente que me rodea y de los amigos que tengo. Me siento afortunado de poder viajar haciendo lo que me gusta y de que a pesar de todos los inconvenientes, aquí seguimos y aún creemos en la gente, en los nuevos talentos.

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Techsound me dio una vida, me enseñó todo lo que sé. Me dio una razón para seguir adelante. La experiencia es, en retrospectiva, lo mejor que me ha pasado en mi historia a nivel personal. Moriré haciendo lo que hago. Amo esto.

Desde que te montaste en esta vaca loca de Techsound, ¿Cómo se ha rediseñado tu sonido? ¿A qué sonaba Techsound antes y a qué suena Techsound ahora?

Desde que empecé a tocar, siempre he tocado techno. Lo que sucede es que para todos el techno no es lo mismo. Existe una concepción general del techno de pocos años para acá que no comparto. Yo me voy más por la definición de Jeff Mills: "todo lo que nunca hayas escuchado es techno, es música straight forward, basada en la experimentación". Partiendo de ahí imagínate todo lo que se puede clasificar como techno.

El sonido lo hemos diseñado en la marcha. Es importante en ese diseño de sonido el fundamento conceptual e ideológico que lo sustenta. Lo tribal alrededor del rito, la danza alrededor de la hoguera, la reunión, la celebración, la intersección cultural, la cocina del plato siguiente, la conspirada. El loop infinito, las repeticiones musicales para alterar estados de conciencia, la conexión universal a través de las frecuencias, el shamaneo frente al público…crear una experiencia más que empatar canciones. De ahí en adelante, todo ha sido nuestra interpretación de emociones reflejada en cómo mezclas, en lo que tocas, en lo que produces, en la pasión que le pones, en ser tú mismo, en tener tu sonido con identidad, sin seguir trends ni esquemas, trascendiendo etiquetas de géneros. En mi caso el sonido Sónico. En el caso del sello el sonido Techsound.

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Los artistas locales de Techsound Records. Foto archivo de Sónico.

Sin embargo dispersarse tanto es de doble filo. Ha sido una apuesta arriesgada porque tanto en el sello como en mi proyecto artístico existen tantos colores y propuestas del techno que si no se contextualizan primero puedes confundirte. Pero eso nos gusta, porque somos diversos y no somos predecibles.

En el caso de Techsound Records tenemos 3 subseries. White Series (experimental, downtempo, tech house, minimal), Extra series (techno, electrónica alternativa, electro) y Black Series (hard beats de hard techno a hardcore a hardtek, etc). Clasificamos el material sonoro en una de estas series con una sola normativa para sellarlo: lo que nos gusta, lo publicamos, así de sencillo.

Y luego pasa lo mismo con mi proyecto personal. Al día de hoy, Sónico, R.A.D. y Sonicore van enfocados en las mismas tendencias mencionadas del sello. Por esto es difícil desligar a Techsound de Sónico y aunque para muchos es incomprensible el tema de la diversidad, eso me gusta. Me gusta poder tocar en Baum y luego en una Hardcodelia, desde un Bogotrax a un rooftop. Siento que es un privilegio y no es fácil de hacer ni de llegar ahí.

Teniendo un concepto tan diverso, ¿crees que Techsound ha hecho muchos aportes a la escena? ¿Cuáles crees que han sido?

Primero que todo somos pro-activos. No solo hablamos, somos una organización de acción, no paramos, hacemos que las cosas sucedan. Somos transparentes y valoramos lo que hacemos. Lo hacemos de corazón, dedicados y con pasión. Tenemos un fundamento ideológico. Transmitimos no solo música sino cultura y una forma de vida. Techsound respira techno, Techsound no es moda.

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Foto vía.

Has mencionado la palabra moda ya un par de veces. ¿Cómo definirías la escena electrónica nacional actual?

Coyuntural o pretenciosa.

En todo este tiempo, ¿qué ídolos o episodios históricos han inspirado a Techsound para seguir haciendo lo que hacen?

Han sido varios. A nivel musical general el rock, la década de los 80, de los 90, el punk, el glam, el industrial y la salsa. Si nos centramos en música electrónica indudablemente Jeff Mills. También The Advent, Kraftwerk y Lenny Dee.

Dices que has viajado un montón, y me imagino que has podido ver otras escenas electrónicas mucho más desarrolladas. Si nos ponemos a comparar ¿Cómo ves la escena colombiana en relación con lo que has visto durante todos estos años?

Hay movimiento, hay crecimiento, y eso es bueno. Vamos mejorando en cosas pero pareciera que empeorando en otras. Estamos en un momento coyuntural donde se le debe dar sentido, dirección a lo que se hace. Hay muchos eventos, muchos artistas, mucha sed de fama y dinero. Actualmente hay mucha gente que está en esto por las razones equivocadas. Sin embargo Colombia es una de las escenas más grandes de Latinoamérica en este momento, al menos por el lado undergound y eso es bien curioso y llamativo. Bogotá es una plaza contracultural increíble. Hay parches, hay independencia, hay ganas de hacer lo de cada uno. No podemos cegarnos por que nos aplaudan en una tarima… lo que busca mucha gente es ese tipo de reconocimiento y no puede ser un fin, debe ser más bien producto del buen trabajo. La competencia es dura, las leyes son complicadas para la escena electrónica, se lucha contra el sistema pero muchas veces sin orden, sin organización, solo rebeldía.

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En la medida que culturicemos más a la gente y entendamos los verdaderos pilares de hacer lo que hacemos, la escena crecerá equiparada, no sólo como una sobre oferta de DJs y eventos vacíos. Hace falta más producción, más representación, más apoyo al talento local, pero del de verdad.

Sí, he viajado y me encanta la escena Bogotana. Me quedo aquí por gusto, no por obligación. Aquí todo está por hacerse. En sitios como Europa ya casi todo está hecho. La fiesta en Colombia es muy buena, todos los artistas internacionales que vienen lo saben, menos nosotros, que como clásicos colombianos, tendemos siempre a vanagloriar lo de afuera, y no lo de aquí. Ese eterno sentimiento de que no hay sentido de pertenencia, algo que queremos cambiar. Nuestra escena promete, debemos creerlo para que sea así.

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Pilla otros colectivos de la geografía nacional acá.

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