El cólera se está cebando con Irak — otra secuela más de la guerra que azota el país

Al menos 2.000 iraquíes han contraído el virus del cólera desde el último estallido. Naciones Unidas advirtió el viernes que las lluvias torrenciales que están cayendo sobre el país podrían multiplicar la propagación de la enfermedad, que ya ha motivado el retraso del arranque del año escolar.

Irak está considerado como un país donde el cólera es endémico. Allí la enfermedad es latente y sus estallidos pueden ser provocados en cualquier momento. Los espacios mal higienizados y desprovistos de cuidados médicos son los lugares más proclives a convertirse en focos de los estallidos. El de este año, que se ha declarado en 15 de los 18 distritos del país, es uno de los peores registrados en tiempo.

La agencia de la ONU para la protección de la infancia, UNICEF, ha expresado su preocupación con que el estallido provoque elevadas cotas de absentismo escolar entre los niños. Más de 2 millones de niños iraquíes no van al colegio, y la mayoría de ellos viven en condiciones de riesgo de contraer el virus. Se estima que otros 1.2 millones de alumnos se expongan a dejar las clases, mientras que un total de 700.000 ya van con un año de retraso, según UNICEF.

Al menos 6 personas han muerto a causa de la enfermedad, que provoca severa deshidratación, fallos renales y que, en algunos casos, puede matar al paciente en cuestión de horas desde la manifestación de los síntomas.

El gobierno de Bagdad ya ha retrasado el principio del año escolar durante un mes en muchos lugares del país como medida preventiva para la propagación. Según las cifras de la ONU, alrededor del 20 por ciento de los casos de cólera afectan a niños.

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La enfermedad fue detectada en Bagdad a mediados de septiembre y amenaza con propagarse por culpa de las inundaciones que asolan grandes partes del país desde finales de octubre. Según UNICEF, la intensidad de los aguaceros ha provocado que el alcantarillado haya rebasado sus límites y que las aguas residuales hayan afluido a la superficie. Se trata de una circunstancia dramática, ya que ha disparado las posibilidades de contagio en lugares como los campamentos de refugiados donde se alojan más de 65.000 iraquíes desplazados.

En realidad se trata solo de una pequeña parte de las más de 3.2 millones de personas actualmente desplazadas por el conflicto armado que atraviesa el país. Se estima que solo en la región de Anbar son casi 580.000 personas las que están en tal situación.

Muchas escuelas se han visto obligadas a dividir las jornadas en tres turnos para absorber al flujo de nuevos estudiantes.

"A veces las clases son de hasta 60 niños" explica Karim Elkorany, portavoz de UNICEF. "Pero eso no es lo peor. Nos preocupan más los casi dos millones de niños que ni siquiera van al colegio".

Lo que todavía complica más la situación, según Elkorany, es que se estima que hay más de un millón de niños en lugares del país que escapan al control del gobierno. Se trata, en su mayoría, de lugares que han sido asediados por los guerrilleros yihadistas de Estado Islámico (EI). Se sabe muy poco sobre las condiciones de vida de los niños de todas esas zonas.

"La suma de todos estos factores es lo que más dificulta las consecuencias que puedan tener tales circunstancias en mujeres y niños", explica.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el día 8 de octurbe la mayor parte de las infecciones se concentraban en Babilonia y Cadisia. Entre ambas habían registrado 1.263 contagios. Claro que en menos de un mes, los números se han doblado.

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UNICEF también ha comunicado que se han registrado casos en las vecinas Kuwait y Baréin y no pudo confirmar la incidencia en Siria. La frontera entre Irak y Siria está, en su mayor parte, controlada por EI.

En los últimos años, Bagdad ha invertido mucho dinero en seguridad. Cualquier estallido hubiese sido una prioridad en tiempos de paz, pero ahora mismo se trata de una de las últimas preocupaciones del gobierno. UNICEF ya ha proclamado que está intentando cubrir las insuficiencias de la prestación de servicios en Irak. De momento ha distribuido ya agua embotellada a 37.000 personas y ha repartido 820.00 kits de rehidratación a través de los funcionarios de salud. Pese a todo, la misión en Irak, al igual que la mayoría de programas de la ONU, están muy precariamente financiadas. El viernes UNICEF anunció que el país "necesita urgentemente 12.7 millones de dólares".

El próximo mes, millones de musulmanes chiitas se desplazarán hasta Irak para celebrar el peregrinaje de Arbain. Se teme que la cantidad de visitantes pueda rebasar vastamente la capacidad del gobierno para contener el estallido.

Mira el documental de VICE News La batalla por Irak.