¡El pueblo lo Baila Carajo! Una entrevista con Dj Walaa

Con los hechos recientes del Paro Cívico que tiene como epicentro a Quibdó, aunque también a Buenaventura y más tímidamente a Tumaco y a Guapi, se actualizan y reivindican unas de las históricas luchas del Chocó: por vías (para conectar con Pereira y con Medellín al menos), por la salud (un hospital de tercer nivel en Quibdó y centros de salud en lugares como Bahía Solano), y por el respeto a la integridad territorial del Departamento (Que ratifiquen en los mapas la titularidad sobre Belén de Bajirá).

La gente negra del litoral Pacífico está firme y parada en la raya exigiéndole no solo al Estado sino al resto del país unas condiciones de vida dignas ¡No más al racismo institucional! ¡¡Carajo pues!! ¡¡¡¡El pueblo se respeta carajo!!!!

El pasado 26 de mayo de 2017, el día que se suspendió el Paro Cívico en el Chocó, se cumplían 30 años, los años que tiene mi hermano, del último Paro grande registrado en el Chocó. Hace 63 años, casi los que tiene mi mamá, García Márquez levantó una crónica sobre una manifestación similar que tuvo lugar en Quibdó. Hace los siglos, desde que se fundó Santa María la Antigua del Darién, los problemas que se ciernen sobre el Chocó parecen ser exactamente los mismos. Una lectura atenta de la historia permite constatar que en efecto han tenido que pasar sucesivas generaciones gritando lo mismo, han tenido que pasar vidas enteras sin respuestas. Menos mal hay siempre voces que nos cantan como es que es la vuelta y se resisten a callar.

Parte de lo que estaba sucediendo en Quibdó durante el Paro lo supe en videos de instagram. Por ejemplo uno de Alexis Play haciendo una improvisación sobre el paro, u otro de él mismo con sus estudiantes de audio. Hay otro de la gente en coro marchando e incluso uno de Dinko Manute, integrante de Rancho Aparte, liderando la voz en una de las marchas. Las músicas del pacífico entonces aparecen ahí como el sonido ideal para la revuelta: la perfecta juntazón entre el bunde y la marcha, entre la recocha y el empute. Tanto han sonado las consignas cantadas en el Paro Pacífico que hasta aquí en Bogotá lo han copiado en las últimas marchas, por supuesto con la torpeza y el oído de artillero rolo.

Precisamente este sábado 10 de junio, en La Piel Roja en Bogotá, llega Walter Gamboa A.K.A Dj Walaa, de los Dj más pegados ahora en Quibdó. Viene a la fiesta La Bembona para ver si en estos tiempos de revuelta bota pistas de cómo es la cosa, para ver si poniendo a bailar a los bogotanos se les calienta el cuerpo, afinan los gritos y se comienzan a mover más vacilados para que ahí si salgan a marchar todo lo que quieran. Dj Walaa está sonando sabroso y bastante. Nacido y criado en Quibdó, vive en Medellín y en Bogotá a la gente le quedo gustando desde que debutó hace unos meses en Boogaloop y Latino Power.

Esta vez no viene solo, estará mano a mano mezclando su remixes con el toque de tambor de Los Batata, Juan Batata y Batata VI, herederos de la Dinastía Batata de San Basilio de Palenque, descendientes del mítico Paulino Salgado Batata: Rey del Lumbalú, histórico tamborero mayor de Totó La Momposina. Los Batata son los tamboreros autorizados de sobra para llevarnos y traernos desde el Congo hasta el Centro Internacional de Bogotá.

Aquí unas palabras que cruce con Dj Walaa para darle vueltas a estas músicas negras en tiempos de revuelta.

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Noisey: ¿Cómo arrancó usted con la música? ¿Con qué clase de sonido está experimentando?

Dj Walaa: A pesar de que la gente me ve como grande y como pionero, yo tengo 20 años recién cumplidos y llevo en la música 1 año y dos meses máximo. Desde ahí llevo impulsando un ritmo y puse una pauta en el Chocó que lo denominamos Ritmo Exótico, que es pues de lo que se trata casi toda la música que yo hago, remixes, que han tenido buena acogida porque como es folclor con sonidos electrónicos, moombahtónicos, sonidos estéreo, la gente dice que es algo como innovador y me ha ido muy bien.

El Ritmo Exótico es por lo variado, es como coger cualquier parte de algo y volverlo pegajoso: digamos palabras de tres segundos, notas de voz, algún chiste, cualquier entonación que salga de momento y que sea alegre nosotros lo convertimos en un ritmo, en una canción. También cogemos canciones de Choquibtown, de Alexis Play, Los de la T, hasta Herencia de Timbiquí. La cosa es que esto es algo muy cyber, lo puede hacer cualquiera. Nos hemos encontrado con personas que al igual que nosotros son remixeros de calle… es como hace muy poco esa nota de voz que se filtró de una vieja muy charra disque…guaro, perico, tusi, popper, sexo… de una eso se fue un éxito, porque es que donde sea se escucha. La gente pensaría que estamos innovando pero no, todo el mundo lo tiene en la cabeza, todo el mundo es capaz… y es algo que es mundial. Hasta los mejores, un Diplo o un Major Lazer, van a esperar esas cosas, loopiar cualquier vaina y a sonárla…

¿Y qué música le gusta sonar?

Siempre me he inclinado por el genero del Dance Hall y el Moombahton, no muy propios de nosotros, pero es música que te relaja o te pone a mover, es una música que al cuerpo le gusta.

Esa canción " La Calumnia " es muy chistosa, la hace toda con un pedazo de una nota de voz, ¿de donde salió?

Son escenas… por lo menos esa nota de voz que remixeo en la canción fue una vez que estábamos sentados entre amigos y decidimos tomarnos un refresco por decirlo así, un trago. Entonces una persona había quedado de traerlo y yo de acompañarlo, pero pues el Dj en el momentico era yo y le tocó irse solo. Nunca volvió con el trago, entonces, luego el dijo que disque yo lo estaba calumniando con el cuento del refresco… y ahí salió ese disco.

Bueno y ahorita ¿Cómo vivió usted el Paro Cívico del Chocó estando desde Medellín? ¿cómo lo vio, como se involucró?

Es maluco porque uno desearía estar acompañando en lo más mínimo, así sea en la marcha. Es que un mensaje de apoyo en redes sociales o hacer una llamada no va a cambiar nada, pero entonces en la contraparte viendo la cosa como artista, le sacamos provecho al Paro. Acá en Medellín, los artistas se presentaron en un Parque y les sonamos algunos discos, esa fue la parte bonita de todo, sacamos un tema…

Exacto, es un momento que se puede aprovechar como lo hizo ahorita Junior Jein con esa canción Fucking Esmad por ejemplo. ¿Y ese tema que sacaron piensan botarlo en la fiesta?

Claro, esa es la idea principal, además de tener interacción con el público, hablar, que la gente sienta que uno está ahí, que sepa el motivo por el que uno está ahí…

El espacio del hip hop en Quibdó es muy sólido y tiene su historia con el festival Dementes Concientes que siempre ha tenido su cosa política marcada. Tanto que siempre sucededetrás de la cárcel Anayansi para que los presos lo escuchen ¿Hay otros espacios así en su generación?

En el Chocó, al igual que otras partes de Colombia, por ejemplo, se contaba con el apoyo de Batuta para el reconocimiento cultural en otros escenarios, pero se ha ido apagando y como el chocó es una parte donde llueve casi 20 de las 24 horas del día, lastimosamente los espacios públicos son muy escasos.

Un espacio alternativo así pero virtual está siendo la plataforma Talento Chocoano ¿no?

Exacto, es la plataforma insignia del Chocó, es la que muestra el talento vocal, visual, corporal, todo… de las personas que son de allá. A la final se vuelve la información para que la gente entre e interactue, da la oportunidad de reconocer al menos visualmente a las personas que uno no tiene idea quienes son, para que cuando uno este en la calle y pase al lado del artista lo identifique… es lo que le da a uno la visibilidad. Es como la base del Chocó. Si vos querés enterarte de lo que está pasando referente al ambiente cultural étnico, lo que está pasando en la música y la movida, pues toca ir a Talento Chocoano.

Y es que en Quibdó no hay mucho espacio para sonidos distintos a la Salsa, el Reggaetón y el Vallenato, ¿cómo es que están ustedes abriendo otros espacios para la experimentación donde se permita el ensayo y el error con otros sonidos?

Los jóvenes ahorita tienen la movida, pues es lo que se está viendo ahorita en la música. Pero es que es muy reducida, siempre salen los mismos y eso obliga a todo el mundo a escuchar eso. Abriendo espacio como tal están esta especie de pool parties o estas fiestas caseras donde digamos te reunes con 15 personas que escuchan rock…o te reúnes para escuchar house…Pero entonces cuando llegamos a sitios como Jenilao (Polémica discoteca Chocoana) sigue siendo la misma música generalizada.

Igual es muy bueno que ustedes se mantienen conectados con sus canales en internet y sobre todo que son estudiantes universitarios que se van a otras ciudades como Cali, Pereira, Medellín o Bogotá, y siguen en contacto, muy actualizados…

Sí, sí, sí. Es una conexión increíble y la gente se mantiene al tanto, es algo muy bacano. Nadie lo esperó pero por lo menos por mi parte ¡PUM! sale un remix que le gustó mucho a la gente y entonces ¿Qué pasa con la hiperactividad de uno? Pues que uno queda a la expectativa. Cada momento que se postea algo, sea bueno o sea malo, se escucha, es muy expansivo, por inercia se escucha donde quiera que vos estés.

Hay un parche de pelaos en Nairobi, Kenia, que se llaman East African Wave que son como de su edad y están rompiendo la movida por esos lados . En parte es porque están haciendo unas mezclas que la gente no se veía venir y además dicen que odian cuando alguien les dice que no suenan africanos porque no hay congas en todas sus canciones. Dicen que su música es africana simplemente porque ellos son africanos. ¿Cómo ha sido la cosa de poner música en otras ciudades? ¿Qué espera la gente? ¿Cómo lo reciben?

Yo quiero brindar lo que las personas quieran escuchar, del Chocó para lo demás, de los demás para nosotros. Hay veces que hasta en el mismo YouTube la reproducción automática se va a otras partes, entonces no es de limitar el oído para lo de uno porque se quedaría como en las mismas. No estuviéramos hablando acá si lo del Chocó se queda en el Chocó. Vos te pones a mirar más allá, más allá, más allá, más allá. Y sí, estamos en lo de nosotros pero meterle 2 o 3 cositas ajenas a eso…perfecto para que los demás echen a ver. Eso es lo que ha pasado por lo menos las veces que he salido, la gente dice: "ahhh pues bacano porque los peladitos hacen cosas que los identifican a ellos pero mirá que suenan con algo de acá, es música para nosotros". Igual al principio es difícil porque es algo nuevo para ellos, no lo asimilan tan rápido, pero siempre me ha ido bien, el apoyo siempre ha sido bueno.

Por último ¿Algo para decirle a la gente?

Tocar con los Batata este Sábado en Bogotá va a ser un placer. Quiero que por la fiesta nos tengan que echar de Bogotá, que sea una locura, y que la gente quede con ganas de que volvamos.

Para unirte a la fiesta clickea aquí.