La épica particular de Ceremonia: Enlistamos nuestros actos favoritos de su historia

Si piensas que además de presentar propuestas frescas que le quiten el candado a los audífonos, tienen la decencia de montar shows con consagrados de este fenómeno llamado pop (o rock o industria) como Animal Collective, Snoop Dogg o Justice, la fórmula resulta más atractiva. Como es el caso del Ceremonia de este año, con Björk como acto cerrador principal.

Sí, también es cierto que los tiempos y lugares de Ceremonia no han sido idóneos. La fría ciudad de Toluca ha llenado el Centro Pegaso de lluvia, granizo, y su tradicional lodo. Pero si lo pensamos bien, esas cosas pasan hasta en Glaston y aún así ves a la gente pasarla de huevos ¿Por qué? Por el simple hecho de que la gente se concentra en disfrutar los actos musicales.

Esta lista está basada en la voz popular de aquellos actos que a muchos ––no a todos–– les volaron la cabeza. Obviamente, habrá bandas o momentos favoritos para ti (perdónenme Nas y Ed Banger) que hayan quedado fuera por el simple hecho de que no todos la pasaron tan chido como tú. Como sea, checa la lista y vete preparando para el desmadre de este sábado en Ceremonia.

La primera edición de Ceremonia tendría un par de problemas en su logística, pero una vez puesta la mesa, la gente se dio su atracón. Uno de los primeros platillos del día vino directo en forma de animal mitológico. La fusión de sonidos electrónicos con corridos y rancheras, le dan voz al característico ERM (electrónica regional mexicana) de Centavrvs que inevitablemente puso a la gente a agitar sus masas corpóreas. Fue poco el tiempo en el stage, pero eso bastó para poner a Centavrvs dentro del top de actos nacionales presentados en Ceremonia.

Una gran sorpresa para muchos, no tanto para otros. La presencia de una rubia enfundada en ropas de tinturas pastel, parecía poco lógico para un festival que encabezarían Chet Faker y The Horrors. No obstante, Kali demostró porqué su espacio en el lineup. Una tornamesa y un micrófono fue lo que necesitó la colombiana radicada en EU para montar un acto repleto de referencias sonoras que inevitablemente nos llevaron a algo más que vintage, a algo alejado del nuevo milenio pero totalmente millennial. El sentido en que Kali fluía sobre los ritmos, son una prueba de lo experimentada que es a pesar de su edad.

Una de las cartas fuertes de la segunda edición de Ceremonia fue Flying Lotus, productor de LA que en ese momento traía bajo el brazo algunas rolas de su último disco, You're Dead! Steven Ellison armó un set complementado casi de manera artesanal con gráficos y luces que remitían a psicodelia digna de un buen trip en peyote. Desde dub, hasta jazz electroso, sin dejar de pasar por el rap de Costa Oeste, Flying Lotus creó una atmósfera por demás abrumadora que reventó macizo las bocinas del Escenario León.

Ceremonia se ha caracterizado por abrir sus puertas a movimientos de la música urbana con actos como Pusha T, Alemán, Nas, Yoga Fire, Anderson .Paak, Theophilus London o Álvaro Díaz, pero la cereza en el pastel, la joya en la corona, vino en 2015 con Snoop Dogg poniéndole cierre a la noche. A pesar de que Snoopadelic andaba en su pedo de hacer reggae, el boom bap no faltó y se rifó sus clásicos noventeros e intentó darle variedad al asunto tocando "I Love Rock n' Roll", "California Gurls" y hasta "La Bamba". La densa neblina formada por algo que parecía el incendio forestal de un bosque de mota, puso el mood adecuado a los asistentes que vivieron uno de los momentos más springbreakers en la historia del evento.

Tuvieron que pasar más de cinco años para que una de las bandas que marcaron el sonido mexicano de principios del milenio decidiera agruparse de nuevo y Ceremonia tuvo la primicia de abrir su entarimado a la esperada reunión. ¿Y es que quién querría perderse el show de los alter egos de Silverio, Brian Amadeus Moderatto, y el wey detrás de María Daniela y su Sonido Lasser? Nadie. Y por nadie me refiero a que el escenario principal estaba repleto de fans de antaño y simples morbosos que no sabrían que pasaría. La respuesta fue un set que le daba lucidez a cada uno de los instrumentos que forman su música, la guitarra de Julián, los sintes de Emilio, y la bataca de Jay. La vuelta de Titán se sintió como eso, el primer paso de un gigante que hace temblar el lugar.

Pocas veces en Ceremonia el dancefloor ha sido sustituido por el moshpit. Una de esas ocasiones, fue protagonizada por un poco dócil joven de Laguna Beach. Ty Segall es uno de esos tipos que transpiran energía y su presentación en 2014 fue eso y nada mas. Potentes golpes en la tarola, vigorosos slaps en el bajo e intensos alaridos salidos de la garganta de Segall, devolvieron los signos vitales a un agonizante garage rock. No bastó tocar algunos tracks de su entonces más reciente elepé Manipulator para poner a tono a la gente, así que se fue atrás con Girlfriend y My Sunshine y bueno, eso bastó hasta para el mas aburrido de los asistentes.

Ceremonia tenía que presentarse ante la escena con un fuerte golpe en la mesa y se fueron un paso más allá. Animal Collective tomó la mesa, la partió en dos, la aventó debajo de un tráiler, y la destrozó en pedacitos. Ah, y también la pintó de colorcitos porque #AnimalCollective. La banda pionera del indie elaboró un show que iba más allá de un simple sentido, sus rostros reflejaban los colores propios de un fiel que reza debajo del vitral de una iglesia, sus manos se movían al ritmo de un experimental ruido que transportó el momento a un trance que perduró poco más de una hora. Definitivamente uno de los mejores instantes en la breve historia de Ceremonia.

La tarde del 9 de abril de 2016 fue testigo de la primera llegada al país de un extraño pero esperado exponente del "neo funk" y el soul. Stephen Bruner, conectó su tradicional bajo de puente amplio y abrió su set al ritmo de un jazz lento que se fue intensificando hasta llegar a un clímax traducido en éxtasis sonoro. Thundercat, quien formó parte de Suicidal Tendencies y ha colaborado con K-Dot y FlyLo, dejó hasta el último suspiro contenido en sus pulmones, remembrando a figuras como BB King o James Brown. No obstante, su peculiar atuendo de mariachi azul nos devolvían a la realidad terrenal, Thundercat estuvo en México y destrozó el festival.

Todas las fotos de Daniel Patlán para Noisey México.