Cris Cyborg está batallando una vez más para dar el peso

Nadie la tiene más complicada que Cris "Cyborg" en el MMA. En una era en la que Jon Jones puede violar las leyes de Nuevo México y seguir en la contienda por el título, cuando UFC programa una temporada de The Ultimate Fighter para encontrarle un oponente a Demetrious Johnson y Conor McGregor tiene permitido mudarse a la división que quiera mientras sostiene el cinturón peso pluma, de los peleadores libra por libra sólo Cyborg tiene que adecuarse al deporte que domina, en lugar de que sea al revés. Maldita y bendita por el cuerpo con el que nació, uno diseñado para pelear pero demasiado grande como para enfrentar a las demás buenas peleadoras de su generación, Cyborg es la personificación de que la grandeza puede ser tuya por el precio de tu cuerpo.

El lunes pasado, cinco días antes de su pelea contra Lina Lansberg en Brasilia este sábado, Cyborg le dijo a The MMA Hour que aún le faltaba perder 24 libras. Incluso en un peso pactado de 140 libras, cinco más del límite de peso gallo donde pelean Ronda Rousey, Holly Holm, y la campeona Amanda Nuñes, Cyborg una vez más está presionando a su cuerpo para llegar al octágono. Y todo para pelear contra una mujer que nadie conocía antes de que se anunciara la pelea.

Para empeorar las cosas, Cyborg dijo que no estaba logrando cortar peso satisfactoriamente ya que sólo había perdido tres libras desde que llegó a Brasil. Muchos peleadores de MMA llegan a la semana de la pelea con mucho peso pero sus cuerpos casi nunca se resisten a la tarea. Olviden las 140 libras, Cyborg dijo: en este campamento no se ha acercado a las 150 libras.

"Este campamento no llegué a las 150", dijo. "Es muy aterrador, veo el espejo, entrené el doble y no sé por qué no llego a las 50. Hay algo diferente en este campamento y es que tomé anticonceptivos. Para la pelea pasada llegué a las 140 libras con éxito".

En un video publicado el martes, Cyborg está discutiendo con su nutriólogo George Lockhart sobre su decisión de hacerla tomar anticonceptivos antes de la pelea contra Lansberg, algo que no tuvo que hacer para su última pelea para la que tuvo un corte exitoso, en su debut en UFC. Cyborg dice que las pastillas la hacen retener líquidos. También dice que la droga fue prohibida en los Estados Unidos en 2012 porque causa coágulos, y se preocupa por perder su fuerza y agresividad. Además se pregunta para qué necesita el medicamento cuando la vez anterior no lo necesitó, pregunta muy razonable para una mujer que está pasando su cuerpo por un infierno para obtener una paga.

"Cada vez quieres mejorar el corte de peso", dice Lockhart, antes de enfocarse en el ciclo menstrual de Cyborg. "Cuando llega tu periodo subes 13 libras. Tu periodo es una locura, y tu humor cambia mucho. Eso es algo que tenemos que cuidar".

"El propósito de esto fueron los periodos, asegurarnos de que no salgan de control, sus cambios de ánimo no están fuera de control y su peso no se dispara", dice Lockhart. "Eso es lo que buscamos".

Lockhart le dice a los productores del video que Cyborg está inhibiendo las hormonas que le impiden perder líquidos, no ayudándolas. Según un artículo publicado en Bloody Elbow el martes (escrito por Iain Kidd, quien actualmente está escribiendo un libro junto a George Lockhart), el nutriologo de Cyborg está en lo correcto. Uno de los efectos de la drospinerona, el anticonceptivo que toma la peleadora, es la pérdida de peso.

"Estudios muestran la pérdida de peso y los efectos específicos del sistema al que Lockhart se refiere en el video", Kidd escribe. "Otro estudio promueve sus beneficios como un método anticonceptivoefectivo que también ayuda a perder peso, especialmente hablando sobre retención de líquidos". Kidd también dice que la drospinerona nunca ha sido prohibida en EE.UU, sino que sólo se le dio una advertencia después de que se determinara que podía causar coágulos en mujeres embarazadas.

Eso demuestra que Lockhart tiene razón en cuanto a la ciencia de su método, pero lo lejos que está yendo Cyborg para dar el peso: que es obligada a no nada más alterar su dieta, sino su ciclo menstrual y su sistema hormonal. La mayoría de los peleadores no hacen siquiera la mitad de eso porque no pesan más de 15 libras más que el peso de su división. Cada peleador sacrifica un poco su cuerpo, pero Cristiane es la única campeona, tal vez la única atleta de élite, que tiene que distorsionar su cuerpo para competir. Pero, ¿qué otra cosa puede hacer una peleadora cuando el mundo, sus colegas peleadoras y su propio cuerpo conspiran en su contra?