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Música

Priests con la fórmula correcta para rockera sin culpas en 2016

Lo nuevo de Priests tiene un ritmo que puede seguirse con las palmas, un teclado saltarín, guitarra con sangre y una cantante con carisma aullando las mejores letras de su generación.

Me encantan Priests. Me encanta Katie Alice Greer, su cantante. Me encantan sus textos en Fvck The Media (pueden echarle un vistazo a este sobre la importancia de los espacios comunitarios o a esta entrevista con Grace Ambrose de Maximum Rocknroll), o en fanzines como Making Waves (en su último número habla -muy bien- de Su Tissue). Me encantaba cuando estaba en Chain & The Gang dando los mejores conciertos que le hemos visto a Ian Svenonius y compañía en la última década. Soy fan, no dejen que me extienda demasiado.

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Mi idea de rock and roll, de las pocas que soporto dado el año que vivimos, pasa exactamente por todo lo que son Priests: un ritmo que puede seguirse con las palmas, un bajo sacado de la jungla, un teclado saltarín, una guitarra con sangre que no olvida que la clave de todo es el juego y una cantante con carisma aullando las mejores letras de su generación. No se que más necesitan para tatuarse su nombre, la verdad.

Hoy estrenan el primer vídeo del que va a ser su placa debut, Nothing Feels Natural, y me cuesta un poco imaginar un adelanto mejor.

Míralo aquí y declárate fan también, antes de que se haga cliché barato: