¿Qué sigue para los Cavaliers de Cleveland?

Los Warriors de Golden State son los campeones de la NBA una vez más. Se sabía que no habría clímax en el resultado desde el momento que Kevin Durant acaparó toda la atención en The Player's Tribune hace 11 meses.

Este equipo de los Warriors quizás sea una de las amalgamas de talento más grandiosas de la historia, y como tal era de esperarse que pasaran por encima de los Cavaliers de Cleveland en las Finales promediando 117.5 puntos por cada 100 posesiones de balón, al mismo tiempo que mantuvieron un porcentaje de posesión de 103.1 (comparado con el 95.4 por ciento en las Finales del año pasado). Asumiendo que Golden State seguirá con paso firme, la liga requerirá de transacciones significativas en la Conferencia Oeste para desafiarlos en una serie de siete partidos. Ante nuestras miradas se erige una dinastía que bien podría dominar la liga por media década.

Pero aunque las Finales se hayan definido en cinco partidos y para mal de Cleveland, los Cavs demostraron que no son segundos distantes. Obligaron a los Warriors a retroceder detrás de la media cancha, y las estrellas de Golden State tuvieron que jugar en otro nivel para poder salir victoriosos.

¿Entonces qué sigue para Cleveland?

Los Cavs cuentan con tres jugadores extremadamente buenos que pueden desempeñarse en lo más alto del basquetbol para derrocar a los Warriors la próxima temporada. Por supuesto, el primero en la lista es LeBron James. Kevin Durant ganó su primer MVP de las Finales este año, pero James seguirá portando su corona como el mejor basquetbolista del planeta Tierra. Promedió 33.6 puntos, 12.0 rebotes, y 10.0 asistencias por partido con un porcentaje de disparo de .630. Su valor es innegable: en el lapso de 28 minutos que James descansó en la serie, Cleveland promedió 75.0 puntos por cada 100 posesiones. En los 212 minutos que jugó, la cifra subió a 116.5.

Por su parte, Kyrie Irving sigue siendo un acertijo difícil de resolver para las defensas, a pesar de que regaló varios balones en el Juego 5 que acotaron todavía más las esperanzas de Cleveland. Kevin Love demostró que puede ser un antídoto para las alineaciones con jugadores bajitos de Golden State. Se comportó a la altura en la defensa, se lució en el tablero, y metió a los Warriors en situaciones incómodas.

Al momento de discutir sobre los planes de Cleveland en la temporada muerta, la transferencia de algunos de estos tres es inconcebible. En teoría, un intercambio Kevin Love-Paul George mejoraría ligeramente las posibilidades de Cleveland contra Golden State, pero los contratos a punto de expirar hacen la operación demasiado riesgosa. Ya que George y James podrán convertirse en agentes libres sin restricción el próximo verano, un colapso en las Finales 2017-18 podría mandar a la franquicia de vuelta a la lotería más pronto de los esperado.

Siempre y cuando James se mantenga sano, este equipo debería ser capaz de conquistar la Conferencia Este la próxima campaña. Los Celtics de Boston y Bucks de Milwaukee podrían oponer más resistencia de la vista este año, pero nadie puede detener a James cuando está rodeado por tres tiradores de élite.

Sin embargo, para derrotar a los Warriors, Cleveland necesitará mucho más. La defensa se vio mal a lo largo de la temporada regular y se desmoronó en las Finales cuando más importaba, particularmente al transitar el balón. Los Cavs tienen pocos recursos para mejorar de este lado de la duela sin dañar su ataque. Hasta el momento, el contrato de Griffin vence el 30 de junio, y el dueño de los Cavs, Dan Gilbert, aún falta por decidir si está dispuesto a incrementar el salario anual de Griffin ligeramente por debajo de los dos millones de dólares en los próximos años.

Perder a Griffin sería un golpe catastrófico. Ha hecho un trabajo fantástico, empezando en 2014 cuando despejó suficiente espacio salarial para sumar a James, intercambiar por Kevin Love, adquirir a J.R. Smith, Iman Shumpert, y Timofey Mozgov por selecciones futuras.

Sin él, el futuro de la franquicia a largo plazo se torna menos claro, y se debilita su capacidad para maximizar el crecimiento a corto plazo. Incluso si Griffin regresa, Cleveland sigue estando en una posición engañosa. No tienen espacio salarial para este verano, ninguna joya para intercambiar, y ocho jugadores de este equipo tienen garantizado recibir dinero la próxima campaña (con excepción de Kyle Korver).

La meta principal de Cleveland debería ser localizar a deportistas que puedan tirar y que estén dispuestos a aceptar un papel menos participativo, por menos dinero, y bajo un acuerdo de un año para incrementar su valor de cara al 2018. Es algo complicado para las necesidades de Cleveland, pero no es completamente imposible que alguien muerda el anzuelo.

En el departamento de jóvenes talentosos, Cedi Osman es un jugador de 22 años cuyos derechos Cleveland obtuvo en el draft de 2015. Es un jugador con buena estatura que podría llegar a ser una amenaza de triples constante, pero hasta el momento existen más dudas que respuestas acerca de si estará en el plantel el próximo año, y mucho menos de si tendrá el nivel para competir en las Finales en contra de uno de los mejores equipos de la historia.

Las opciones de Cleveland no dan mucha cabida al optimismo, pero este equipo tampoco está muy alejado de la cima. Si hubiesen derrotado a Golden State en el Juego 3 y lanzado el balón como lo hicieron en los primeras tres rondas, habrían podido postergar la serie.

Al parecer, James jamás bajará de nivel, Irving aún tiene mucho para mejorar, y Love deberían llegar a la siguiente postemporada con más confianza que nunca. Incluso con tan pocas opciones para mejorar el plantel en julio, este conjunto está a un paso de recuperar el campeonato en 2018.

No hay duda que los Warrior seguirán siendo los favoritos, pero Cleveland tiene el talento para oponer resistencia. Sólo necesitan hacer los movimientos adecuados y mucha suerte para que las cosas se den a su manera.