El parque acuático de 1980 en Chapultepec | Lugares Abandonados

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El parque acuático de 1980 en Chapultepec | Lugares Abandonados

Atlantis solía abrir de 10 am a 6 pm de martes a domingos en temporada vacacional.
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fotografías de Hanna Quevedo

Explorando una locación en busca de fotos y unas grabaciones de sonido para un proyecto que presentamos en Mutek Mexico bajo la residencia artística de Marshmallow Laser Feast, llegamos a este mágico lugar que, en cierto modo, parece detenido en el tiempo, cubierto por el olvido.

En 1981, Atlantis abrió sus puertas a jóvenes y adultos con atracciones nunca antes vistas en la Ciudad de México, como espectáculos con lobos marinos, delfines y aves entrenadas.

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Aunque la fecha de su cierre no se sabe con exactitud, se calcula que fue sobre el año 2000 cuando Atlantis dejó de recibir visitantes. La empresa que daba "vida" a este parque situado en la Ciudad de México, prometió remodelar y volver a abrir el espacio. Al día de hoy, diecisiete años después, aún no ha pasado. Cuando dejaron de dar servicios, varios medios de comunicación publicaron que el lugar cerró con todo y los animales vivos, los cuales carecían de la alimentación y cuidados necesarios.

Se comentaba aún en las redes que aquellos enormes lobos marinos seguían viviendo en las pequeñas piscinas de Atlantis, pero en febrero de este año, las tres lobas marinas que aún se encontraban en el parque, fueron entregadas voluntariamente por Convimar, empresa propietaria que tenía la concesión del lugar. Desde Atlantis fueron llevadas al delfinario "Dolphin Discovery Vallarta".

El parque solía abrir de 10 am a 6 pm de martes a domingos en temporada vacacional, y a la misma hora pero sólo sábados y domingos cuando no lo era. La entrada, que ellos llamaban "pasaporte", costaba 60 pesos. Si alguien quería nadar con delfines, el precio subía a 600.

Ahora este parque acuático está más seco que mojado, lleno de mosquitos acumulados por las aguas estancadas, preparado para seguir siendo el lienzo de los graffiteros de la Ciudad, un laberinto de tubos acrílicos.